Quiero robarme al novio

510 40 53
                                    

—¿A qué te refieres con que se casa?

—A eso, se va a casar.

Una rabia comenzó a apoderarse de su ser y sin decir una palabra más, salió hecho una furia de aquel lugar, dejando a su amigo confundido, si Kim Jongwoon se casaría en algún momento, sería con él, Cho Kyuhyun, con nadie más y eso podrían apostarlo.

Sacó su teléfono mientras se dirigía a su auto y le lanzó directamente al buzón ¿ahora se escondía? eso no se quedaría así, subió a su auto y aceleró a fondo hasta llegar a aquel lujoso departamento que conocía de sobra. Tocó con violencia y no recibió respuesta.

—¡Abre la maldita puerta, Jongwoon!— Escupió furioso.— No me voy a ir hasta que abras, me conoces lo suficiente para saber que lo cumpliré y si no quieres un escándalo, ¡abre ahora!

La puerta se abrió y enseguida la empujó para evitar que le impidiera entrar, el pelinegro tenía la mirada en el suelo.

—¿Qué es esa mierda de que te casas?

—Lo siento, esto no puede ser, debo hacer lo mejor para mi familia.

—¿Tu familia? A tu familia le importa un comino tu felicidad ¿Y ahora también te comprometen sin que tú lo quieras?

—No sabes nada, yo quiero...

—Ni si quiera me estás mirando.—Le interrumpió tomando su rostro para levantarlo y hacer que sus ojos se encontraran.— Mírame, me amas a mí, lo sé y lo sabes. No está a discusión.

Los ojos del pelinegro se llenaron de lágrimas y el castaño se sintió débil ante aquella vulnerabilidad, con suavidad acarició sus mejillas y unió sus labios en un beso. Pronto aquel suave roce se hizo insuficiente, bajó sus manos a las caderas del mayor y lo pegó más a su cuerpo mientras su lengua acariciaba el labio inferior del otro, pidiendo permiso para entrar en su cavidad, permiso que le fue concedido unos momentos después.

—Mmm... Kyu...— Jadeó ante aquel desquiciante y sensual roce de sus lenguas, Kyuhyun sabía perfectamente que hacer y donde tocar para hacerle perder la cordura. Y tal vez por eso es que ahora se estaba dejando empujar hasta la habitación que ya muchas veces había sido testigo de sus apasionantes encuentros.

Había conocido al menor unos años atrás, mientras visitaba una de las empresas en las que su padre había invertido. Kyuhyun trabajaba como asistente para el dueño de la compañía. El click fue instantáneo, aunque primero disfrazaron todo como una amistad, aquel coqueteo y atracción comenzó a ser cada vez más evidente, hasta que ninguno de los dos lo pudo negar. Fue en una de sus salidas ocasionales que el jugueteo de siempre comenzó a ser más íntimo. Un beso solo fue el inicio de una apasionada relación entre ambos y aunque al inicio dejaron claro que no habría nada serio, era claro que las cosas avanzaron más.

—No dejaré que te cases con nadie más que no sea yo.— Afirmó Kyuhyun mientras dejaba a Jongwoon de espaldas en la cama, tomó su mano izquierda besó su dorso, observó aquel anillo que brillaba en su dedo anular, ese que simbolizaba ese estúpido compromiso que de ninguna manera dejaría que se realizara. Tomó el anillo y lo deslizó fuera de su dedo para ponerlo en el mueble que estaba al lado de la cama.— Lo vamos a resolver Jongwoon, te lo prometo, si un día te cansarás con alguien, te prometo que será conmigo.

Y por un momento Jongwoon quiso creerle, quiso tener su seguridad pero realmente tenía miedo, mucho. Sabía que su familia no aceptaría a Kyuhyun, él no era como ellos. El menor tenía un trabajo decente en esa compañía y ganaba lo suficiente para tener una vida decente pero nada que pudiera ofrecerles a los Kim como alianzas comerciales o algún beneficio. Si se lo preguntaban a él, era perfecto y lo amaba así como era, pero su familia no lo entendería jamás y es por eso que lo habían comprometido con un rico estirado y sin ninguna gracia.

Fanfics KyuSung-YeHyun y algo más...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora