At Gwanghwamun

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Kyu...

¿Si?

¿El amor es eterno?

No lo sé, pero el mío por ti lo es.

¿Prometes que si no lo logro, seguirás adelante?

No digas eso, tú saldrás de esto, te repondrás y luego nos casaremos, tendremos muchos hijos, adoptaremos a esa bola de pelos que te gustó; me encargaré de hacerte feliz día a día.

El moreno apretó el agarré que el castaño mantenía en su mano y sonrió Es una cachorrita, no una bola de pelos y eso suena lindo.

Jongwoon ya no tiene más tiempo, como lo siento, se hizo todo lo que estuvo en nuestros manos, hemos evaluado las posibilidades de una operación pero su corazón no la resistiría, es mejor que se despidan, no creo que el joven pase de esta noche.

Los padres de Jongwoon lloraban desconsolados y él... él sentía que la vida se le escapaba de su cuerpo con aquellas palabras, aquello no podía ser verdad, tenía tantos planes, tantos sueños, una vida planeada al lado de la persona que amaba.

...

Despertó agitado después de aquella pesadilla que regularmente le perseguía por las noches, frente a él estaba la mirada preocupada de uno de sus amigos más cercanos.

—¿Cómo entraste?—Preguntó

—Maldito malagradecido, vine porque llevas meses encerrado, todos están preocupados, Kyu esto tiene que terminar.— Exclamó preocupado Sungmin.

—Vete, no quiero ver a nadie, no sé como entraste ni tampoco me interesa. Vete, quiero estar solo.—Respondió ocultándose entre los cobertores nuevamente.

—Kyu, por favor sal de aquí, come algo, dúchate y sigue tu vida, estoy seguro que a...

—Cállate—le interrumpió—Cállate, tú no sabes nada de mí, nada de Jongwoon, nada de lo que había entre él y yo, tú no entiendes lo que sufro ni lo que pienso, así que hazme un favor y vete, así estaré mejor.

—Kyuhyun, Jongwoon murió. Acéptalo.

—¡QUE TE VAYAS, NO QUIERO VER A NADIE, DÉJENME SOLO DE UNA MALDITA VEZ, DÉJENME MORIR AQUÍ, ES LO ÚNICO QUE QUIERO— detuvo sus gritos a medida que sus propias palabras calaban en su corazón—solo... solo quiero algo de paz—sollozó— solo... yo... le necesito...

El llanto del menor se escuchó en toda la casa, su amigo sabía lo mal que lo estaba pasando así que simplemente se mantuvo en silencio a su lado, lloró con él, acompañándolo en su pena, en una que no parecía tener fin.

Entre palabras de aliendo y palmadas en la espalda, Sungmin logró ayudar a su amigo a arreglarse y salir del departamento, todo aquello era algo que aún no podía procesar, jamás pensó ver a Kyuhyun tan derrotado.

—Quiero ir a verle—Susurró el castaño.

—Kyu, no creo que sea...

—Por favor, necesito hacerlo.

El rubio suspiró derrotado y al final asistió.

—De acuerdo, pasemos por unas flores ¿te parece?

Después de una parada en la florería, ambos amigos ya se hallaban frente a la lápida de Jongwoon.

Kyuhyun solo bajó la mirada y pronto las lágrimas comenzaron picar en sus ojos, ansiosas por caer, Sungmin hizo una venia profunda en el suelo y oró por el alma de su amigo algunos minutos, Kyuhyun seguía en silencio, pensó que lo mejor era que se desahogara así que colocó las flores sobre la lápida y le dio una palmada en el hombro.

Fanfics KyuSung-YeHyun y algo más...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora