Fight or Flight

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Había pasado un tiempo razonable desde que dejó el pequeño pueblo en Corea. En un principio fue demasiado raro vivir solo en Japón, pero pensó que era lo mejor para sanar. No estaba bien quedándose en Corea luego de todas las cosas que habían sucedido. Y si, fueron unos años duros estudiando solo sin conocer a nadie, pero un tiempo después pudo conocer a Felix y a Seungmin.

Minho había dejado Corea tan pronto se había graduado. Ni siquiera asistió a la fiesta o la ceremonia de entrega de diplomas. No hizo nada. Las clases solo terminaron, se aseguró de tener todo en orden y se fue a estudiar a Japón. Sus padres lo encontraron bien. Había una muy buena Universidad en ese país y Minho estudiaría Administración de Empresas. Era lo ideal para familia así que ni siquiera preguntaron por qué de la nada Minho estaba preguntando para irse a estudiar a Japón. Ellos solo lo vieron como que su hijo estaba siendo responsable sin imaginar la gran depresión que estaba cargando.

En fin, fue difícil, pero para el segundo semestre tuvo la suerte de compartir clase con Kim Seungmin y Lee Felix. El primero venía de Corea, al igual que él, y el segundo de Australia, pero era de ascendencia coreana. Encajaron bastante rápido. Se sentaron juntos por casualidad y justo ese día el profesor dijo que quería un trabajo colaborativo con las personas a su al rededor. Minho tenía a Felix a su izquierda y a Seungmin a su derecha. Aunque el trabajo no era de nota, les fue bastante bien y fue el momento en que esa pequeña pero linda amistad comenzó. Los tres estudiaban lo mismo e iban al mismo año, y aunque no coincidían en todas las clases, se aseguraron de mantener la amistad, aun cuando a la vida de Minho llegó Mingi.

Fue en una de sus últimas clases. Felix, Minho y Seungmin habían batallado bastante para en ese último semestre tener sus ultimas clases iguales y con los mismos profesores. Fue en una clase de concentración que Minho lo vio. Alto, muy alto a decir verdad, cabello negro, ojos casi invisibles y sonrisa encantadora. Para sus amigos no pasó desapercibido el que Mingi no le quitaba la vista de encima. Al finalizar la clase, Mingi se le acercó y le pidió si número, y Minho al principio se negó por eso de su mala experiencia en el amor. Aun así, Mingi le insistió y le dijo que si no lo hacía, buscaría su email en los mensajes que mandaba el profesor. Minho no queria mezclar su email institucional con cosas personales así que resignado le dio su número a Mingi.

Felix y Seungmin, si saber su trágica historia en Corea, sólo que no quería saber nada del amor, le insistieron en que no podía ser tan malo. Y bueno, realmente no lo fue, al menos al principio. Mingi fue todo un caballero. Comenzaron saliendo como amigos. Eso duró así tal vez un mes hasta que comenzaron a tener citas. Felix y Seungmin estaban bastante felices por su amigo. Minho no hablaba mucho de su vida en Corea, pero por como se expresaba del amor, sabían que debió sufrir bastante feo con algún ex novio en Corea. Eso de no creer en el amor era algo extremo, según ellos claro.

Cuando el semestre finalizó y la graduación se llevó a cabo, Mingi y Minho formalizaron su relación. Minho por primera vez en mucho tiempo desde que dejó Corea, se sentía feliz. No es que sus nuevos amigos no le hubiesen llevado felicidad, pero el tener una pareja a la que realmente quiere le hacía solo... feliz. Y si, se había enamorado de Mingi.

Minho sentía que ese eran un gran paso en su vida. Sigue con su misma postura de adolescente, de que el amor de parejas no es necesario para vivir, pero enamorarse de verdad le da una gran tranquilidad a su vida. Sabía que eran un gran paso así que todo iba solo... bien. Luego de la graduación consiguió trabajo como Asistente Administrativo. Al principio sus padres se opusieron ya que creían que era mejor que regresara a Corea y se hiciera cargo de la empresa familiar, pero al enterarse que tenía un novio tan prometedor le dejaron quedarse más tiempo en Japón, todo el que quisiera. Mingi sí estaba trabajando ya para la empresa de su familia, en una sucursal de Japón. Felix y Seungmin habían conseguido trabajo en la misma empresa que Minho, como Asistentes Administrativos también. Sus jefes eran muy diferentes entre sí, pero ninguno abusaba de su poder así que se podría decir que eran felices en esa pequeña empresa de autos.

Two boys, one sweater and other sad thingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora