Do you dare? » JunHwan

CAPÍTULO 12

—¿Pasas el día con Rosé y no me lo cuentas? — Donghyuk se encuentra molesto, puede decirlo por el tono de voz que está usando y por cómo ni una sola vez se ha girado a verlo.

—No es para tanto, sólo somos amigos. — Responde el más alto siguiéndolo dentro de la habitación.

—Sí. Bueno, soy tu mejor amigo, así que es mi deber decirte que ella no te conviene. — Tomándolo por los hombros, el castaño se gira y lo enfrenta con la mirada, mientras Junhoe se deja arrastrar por el chico alrededor de la habitación.

—¿De qué hablas? Creí que te caía bien.

—Claro que me cae bien. — Responde el chico, — es la persona más genial y experimentada del mundo. Pero no es buena para ti. — Puntualiza juntando sus manos. — Recaes en tus malos hábitos con ella.

—¿Cuáles? — Pregunta frunciendo el ceño el rubio.

—Cuando salían, ella te vestía, hablaba por ti, y ahora estás detrás de ella de nuevo. — Junhoe desvía su mirada, pasándola alrededor de la habitación en la que se encuentran, — más importante ¿te estás divirtiendo?

—Esta charla no ayuda.

—Mira. Jinhwan, te hace divertirte. — Sacando desde el bolsillo de su chaqueta, Donghyuk extiende le cuaderno rojo entre ambos, señalándolo para enfatizar sus palabras. — Ella saca lo mejor de ti, te desafía.

Junhoe rueda los ojos, mientras trata de tomar el libro de las manos de su amigo, pero este lo retira de su alcanza, colocándolo detrás de su espalda.

—¡Hey!

—No te lo daré hasta que no me prometas que me contarás todo lo que suceda con Rosé y Jinhwan.

—Bien, prometo mantenerte al tanto de lo que haga en el futuro. — Responde el más alto rodando los ojos nuevamente.

—Bien. — Responde sonriendo el castaño. — Y con esa promesa, debo irme. — Termina dejando el cuaderno sobre sus palmas.

—¿Por qué te vas?

—Voy a ver "Duro de matar" y "¡Qué bello vivir!" con Jeff — Responde Donghyuk alcanzando su chaqueta del colchón dónde se encuentran el resto de las prendas de las personas en la fiesta.

—¿Quién es Jeff?

—El elfo del centro comercial. — Dice sonriendo. — ¿Ves? No se siente bien. — Borrando la sonrisa de su rostro, se acerca hasta el chico y continua. — Escucha. Cuídate de Rosé, no pierdas a Jinhwan, ¿sí?

Sin dejarlo decir algo más, el castaño sale de la habitación dejándolo completamente en blanco, aun con el cuaderno entre los dedos.

***

—¡Hola, Jinhwan! — Edgar se encuentra parado fuera de su edificio, luciendo como todo un tipo decente, una chaqueta marrón claro y una camisa de vestir debajo, su sonrisa es amplia y Jinhwan cree que tal vez esté demasiado emocionado.

—Hola. — Responde el más bajo llegando hasta encontrarse frente a él. — ¿Estás listo?

—¡Tu suéter es fantástico! — Exclama el chico una vez que logra verlo más cerca. — Esos suéteres son horribles, pero a ti te queda genial. — Menciona entre risas, haciendo sentir un poco mejor a Jinhwan.

—Gracias.

—Vamos, subamos. — Abriendo la puerta del taxi, Edgar deja que Jinhwan suba primero siguiéndolo detrás.

Una vez que el auto se detiene frente al edificio lujoso, no puede evitar sentir que su corazón late fuertemente y un agujero en su estómago le da vueltas desde adentro. Sin embargo, se obliga a sonreírle al chico que le sostiene la puerta de la entrada y lo dirige a través del elevador.