❝ 𝐌𝐮𝐬𝐢𝐜 ❞ 𝙱𝙽𝙷𝙰

音楽|32

“Cuando mis ojos se cierran, pienso en mi vida y en todo lo que he tenido que soportar, entonces me doy cuenta que esto es sólo una pequeña aguja clavada en mi piel. ”

Sus manos se sujetaban con fuerza creando un gran circulo alrededor de Ash. Todos estaban nerviosos y temerosos por lo que estaban apunto de ver, mucho habían deseado conocer la vida de Ashlye, aunque claro no de esta manera.

— Bien, ya casi todo esta listo. — soltó un pequeño suspiro de cansancio, para luego mirarlos con seriedad. — Hay cosas que debo aclarar, no podrán intervenir en ninguna de sus memorias, deben de conservar siempre la calma si no se podrán perder algunas de ellas y por último Ashlye me pido que hiciera esto hace tiempo así que una vez que sepan su vida, no se atrevan a dejarla jamas. ¿Entendido?

Sintió un poco de tranquilidad al verlos afirmar con la cabeza. Ya era tiempo de comenzar, tenían que darse prisa y encontrar la clave dentro de sus recuerdos.
Tomo la rosa sobre la mesa y empezó a romper cada unos de  pétalos, al mismo tiempo una oscuridad los abrazaba creando un muro entre ellos.

Mirodiya se encontraba fascinado por el quirk de aquel chico, siendo sincero una gran preocupación empezaba a creer en su pecho.

Lentamente todo a su alrededor se esfumo, un nuevo escenario se hacia presente.

Aizawa se encontraba impresionado viendo todo lo que le rodeaba, era una habitación infantil con ligeros toques grises y rojos, no había peluches o muñecas, en su lugar solo había libros y pinturas muy bien elaborarás.
Sus miradas fueron llamadas hacia la puerta cuando esta se comenzaba a abrir.