Mystery Kingdom | Kookv

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El paso de los meses fue tan rápido que ya hasta se habían acostumbrado a vivir en ausencia de los anteriores soberanos, teniendo todo el palacio para ellos dos.

Ambos muy ocupados con los deberes que traía la corona, dejando espacios durante el día para verse y demostrarse su amor.
Pero, hace semanas algo mantenía alerta al alfa, siendo causa de la actitud extraña que estaba teniendo su omega, como si estuviese ocultando algo.

— Cariño ¿está todo en orden? — preguntó al entrar a su habitación compartida después de un largo día de trabajo sin verse ni un momento.

— ¿Mm? — Taehyung lo miró ya recostado en la gran cama — Sí lo estoy, ¿por qué lo preguntas?

— No lo sé, es que... — Jungkook buscaba las palabras correctas para expresar sus preocupaciones — ¿no te sientes nervioso o ansioso últimamente?

— No — el omega rio algo enternecido por las torpes palabras del pelinegro y su dulce actuar — ¿Qué cosas dices?

— Taehyungie, puedes decirme lo que sea —  se acostó a su lado, buscando que su amado confiase en el para contarle lo que le sucedía—. ¿Algo te tiene preocupado?

La convicción del alfa logró hacer efecto en el omega, soltando un suspiro pesado, se puso de costado para encontrar su mirada con la verdosa de su amado, este mismo le sonrió enamorado y beso su nariz con suavidad, transmitiendole paz y tranquilidad.

Aveces odiaba un poquito que Jungkook pudiera sentir todo lo que él debido al lazo, y en parte se sentía culpable por preocuparlo con sus sentimientos volátiles.

— Se supone que hace dos semanas debía tener mi celo y... no ha pasado.

— ¿No? — preguntó confundido — Pensé que sí, de repente hueles más dulce que antes y... no tiene sentido ahora que lo pienso a profundidad, no es que estuvieras en celo durante dos meses — se burló de si mismo —. Que tonto soy.

— El mes pasado tampoco lo tuve, Jungkook.

— ¿Y si estás enfermo?

— No creo que sea eso exactamente.... — apartó la mirada un poco tímido e inseguro.

— ¿Entonces qué es? — indagó insistente, para arrepentirse en segundos al ver como la mejillas abultadas de su omega se humedecía por sus lágrimas saladas — Cariño, no llores, ¿por qué lloras? ¿Te pasó algo? — secó sus lagrimas con sus pulgares, siendo delicado y amable — Mi amor, ¿qué pasa?

— P-Puede que... este... — Taehyung no sabía como decirlo, tenía miedo de su reacción y eso borraba cualquier palabra de su mente —. Jungkook vamos, no puedes no entender que sucede.

— ¿Qué? Taehyung, por la luna, tengo la intuición de un roca ¿cómo quieres que capte?

— ¡Vamos a tener un cachorro! — gritó finalmente vencido por lo despistado de su alfa.

Luego de escuchar la noticia los verdes ojos del pelinegro brillaron al igual que sus parpados se expandieron por la sorpesa inesperada.
Taehyung de repente se sintió mal, y él confirmó, según su pensar, la suposición que tenía desde que su primer celo se esfumó y supo que estaba en cinta, que Jungkook no estaría feliz con aquella noticia, que no le gustaría para nada el hecho de empezar a ser rey, que de repente estuviese a punto de ser padre también y de tener un cachorro juntos.
Sus emociones estaban tan volátiles por el embarazo, como si por dos meses hubiera estado en celo y sabía que durante siete meses más sería de eso modo e incluso más fuerte.

— Mi amor, mi amor — llamó Jungkook su atención, no le gustaba verlo llorar, lo odiaba en lo absoluto —. No llores, príncipe. ¿No estás feliz acaso? Tendremos un cachorro, mi amor.