Empujé con todas mis fuerzas mi cuerpo en aquella gran brecha dimensional, obligándome a pasar por allí, junto con la hermana de Drake, Amanda. El esfuerzo era sobrehumano. Nunca antes había transportado a una humana de una dimensión a otra. De hecho, ni siquiera la había transportado dentro de una misma dimensión. Jamás pensé que sería tan difícil; pero lo era y ya estaba a mitad de camino entre la burbuja dimensional de la Muerte y la sala de estar de la casa de Josh.
Y entonces sentí expandirse el espacio reducido por el que me empujaba a mí mismo y salí despedido en la sala de estar de Josh. Casi pierdo el equilibrio como un completo novato, pero logré controlarme enseguida y dejé a la inconsciente Amanda en el sofá.
-¿Qué demonios?- pregunta Noah poniéndose de pie de un salto, completamente alarmado de ver a la chica en mis brazos. Él se levanta sin demora del sofá para dejarle espacio y desde ese momento él dejó de prestarme atención. Me encogí de hombros, no es como si me importara demasiado si Noah me prestaba o no atención.
-¿Qué sucede Noah?- pregunta el padre de Drake, Robert Rhionnon, entrando en la habitación flotando a través de las paredes. Yo indiqué el lugar en donde descansaba Amanda y él se acerca con curiosidad. Se alarmó bastante al ver a su hija tan pálida y maltratada. A decir verdad, sus heridas eran aún peores de lo que me había imaginado. Me hacía agradecer de todo corazón nunca haber caído en manos de la Muerte siendo un humano que la había cabreado. Aunque hay que reconocer que no había sido culpa de Amanda que la Muerte, la Gran Zorra, se hubiera cabreado con su familia.
-La chica estaba en la dimensión de la Muerte- afirmo con solemnidad y Noah comenzó a prestarme atención nuevamente. Su cara se había puesto completamente pálida, y su mirada me lanzaba destellos de acusación. No dejé que me afectara. No le haría ningún bien a nadie si dejaba que esa pequeñez me enfadara con tanta facilidad.
-¿Por qué?- pregunta Isabella fríamente con los brazos cruzados en el pecho, mirándome con una ceja levantada. Yo le devolví la mirada.
-La Muerte se estaba divirtiendo de lo lindo torturando a la chica- afirmo sentándome en un sofá más pequeño, apto solo para una persona, que estaba situado frente a Amanda.
-Así que la Gran Zorra ya ha alcanzado en más de unos aspectos a la familia de Drake- comenta ella sin emoción, aunque yo sabía perfectamente lo enfadada que estaba: lo podía ver en sus ojos, los cuales estaban negros como el carbón, y que lanzaban destellos azules mientras más fuera la rabia que Isabella albergara en su interior.
-Sí, Amanda explicó que se la habían llevado del avión en el que viajaba, por lo que sé que la Muerte la tiene desde hace dos semanas... Y por la gravedad y cantidad de sus heridas, bueno, yo diría que no le dejó demasiado tiempo para descansar en todo ese tiempo- afirmo y Robert Rhionnon se puso de pie, manteniéndose, sin darse cuenta, a unos centímetros del piso.
-¡Esto es todo su culpa!- exclama él hecho una furia. Yo le lancé una mirada furibunda y él se quedó con la palabra en la boca.
-Fíjate que no es así. Drake en sí es el problema...
-Has dicho "es"- comenta Isabella con voz plana. Yo miré sus ojos, los cuales habían cambiado a celeste relativamente oscuro. Era como un color entre el azul y el celeste. Yo sentí como si me hubiera pateado el estómago. Había cometido un error. Para mí, Drake no estaba muerto en absoluto. Es decir, ¡estuve hablando con él en la dimensión de la Muerte! Drake no había muerto, el problema es que ninguno de ellos lo sabía y ellos seguían viviendo el dolor de haber perdido a alguien muy querido... sobre todo Isabella, quien parecía estar enloqueciendo por haber perdido al amor de su vida.
-Sé lo que he dicho- comento con cautela y Noah me mira con el ceño fruncido. Entonces él abre los ojos como platos y coge mi brazo con fuerza. Yo lo miré sorprendido. Se suponía que él no debería poder tocarme... sin embargo...
ESTÁS LEYENDO
Traición (Crónicas del Nigromante 2)
FantasíaDrake ha muerto e Isabella se siente traicionada por él. Drake la había dejado sola. Pero no es el único que la traiciona, todas las personas que alguna vez afirmaron amarla la están traicionando. ¿De verdad era que nadie podía mantenerse de su lado...