14

141 2 0
                                    

Gine

— ¿Que te sucede?.— pregunte confundida.

En ese momento todo el peso de Bardock cayó sobre ella en la cama. Sentí su corazón latir fuertemente.  ¿Me volveria a besar?.

Pasaron los minutos y ambos estábamos inmoviles, se me hizo extraño que Bardock no se moviera, solo sentia su respiración por mi cuello lo cual se estremecia.

— Bardock..— dije con voz temblorosa.

No recibio ni una palabra de el, seguia estando inmovil encima de mi. Lo moví un poco para verificar y resulto que estaba desmayado encima de mi, esa era la razón por la cual no se movia. En ese momento recordé que esa medicima solia causar el desmayo debido a los ingredientes. ¿Como se me pudo olvidar esa parte?. Con todas mis fuerzas lo hice a un lado y me levanté. Por lo que veo no se despertaria hasta la mañana, asi que es mejor acomodarlo en la cama, lo tendria que poner bajo las cobijas para que pudiera estar mas comodo, pero antes tengo que quitarle la armadura de arriba y las muñequeras.
Con un leve sonrojo comencé a quitarle las muñequeras, despues la armadura lo cual seria mas dificil.

Al quitarle la armadura por completo la dejé en el suelo al igual que las muñequeras, tambien le quité las botas, alcé la mirada y vi los brazos y el pecho del saiyajin lo cual le resultaba bastante atractivo. Era bastante claro que tenia musculos, tantas peleas y entrenamientos habian hecho que Bardock tomara ese aspecto, no pude evitar admirarlo, no negaba que yo habia visto a otros hombres saiyajin con el pecho descubierto. Para mi jamas se me hizo atractivo mas bien desagradable, pero con Bardock era diferente. ¿Porque sentia tales cosas por el?.
Le puse una cobija hasta la mitad de su pecho y me di la vuelta para irme, aunque queria asegurar que el se encontrar bien, asi que decidí quedarme y dormir a lado de el. No me importa si parecia raro pero lo que yo queria era estar junto a el. Vi por ultima vez a Bardock en la cama y cerré mis los ojos quedándome dormida en su cama.

A la mañana siguiente abrí los ojos y lo primero con lo que me encontré fue a Bardock aun dormido.
No pude evitar dar una calida sonrisa al verlo aun con los ojos cerrados, pegue mas mi nariz a la almohada y tenia el olor de Bardock. Ese olor varonil me estaba volviendo loca, podia sentir ese olor llegar a los mas profundos de mis fosas nasales, si seguia así, terminaria obsecionandose con eso. Me termine sentando en la cama, debido a la posición del sol aun era temprano, podia llegar a mi casa, comer algo e irse a la disteibución de carne.
Termine por ponerme mis muñequeras y botas para ya irme, desvíe mi mirada a Bardock que aún se encontraba en la cama, planeaba ir a verlo despues del trabajo para cuidarlo un poco. No puedo evitar acercarme mas a el, me subí a la cama y gateo hasta su rostro. Observaba su rostro bastante, especialemente su cicatriz que tenia en una de sus mejillas, lo cual me resultaba bastante atractivo. Observé sus labios con detenimiento, me relami los labios con tan solo verlos, me sonroje un poco y me acerque mas a su rostro. Sin darme cuenta pegue sus labios a los de el.
Mi corazón latia bastante fuerte, estaba gritando por dentro. Esta vez pude sentir más detalladamente sus labios, eran calidos, suaves y dulces.

La primera vez que los toque no los habia sentido de tal manera, pero ahora sentia mas que eso por Bardock. Lo tome de la mejila para poder profundizar mas mis labios con los de el. No me importa si llegó tarde a mi trabajo, queria sentir mas los labios de Bardock los cuales no pudo apreciar la primera vez. Me separé de el rozando mi nariz con la de el, no pude evitar sacar una risa de felicidad tras lo que acaba de hacer. Volví a besarlo para despedirme de el, cuando estuve a punto de alejarme, sentí una mano calida sobre mi nuca la cual me empujo de nuevo a los labios de el. Esto me sorprendió y también me asusté al mismo tiempo.

¿Porque bajé la guardia? Al darme cuenta un poco tarde, ví que Bardock estaba despierto, tenia una que de sus manos sobre mi nuca.
Cerré mis ojos y dirigí mis manos a las mejillas de Bardock. Aunque fuera extraño, este beso resultaba ser cuidadoso y fragil a la vez. No era brusco como el de la otra vez, hasta podia sentir que era un beso lleno de amor y cariño.

— Bardock...— susurré entre sus labios.

Esto lo hizo reaccionar de golpe, me aparto de un empujón y se levanto de la cama tocandose la cara ¿Porque se comporto de esa manera?.

— ¿Porque hiciste eso?.— Pregunto sin quitarse las manos de la cara.

— Pero si tu tambien me seguiste.— respondí en voz baja.— Solo era un beso de despedida.

Bardock susurro algo que yo no logré entender.
Se giro bruscamente hacia mi bastante furioso. 

— ¿Y eso?.— dijo con voz ronca.— Ya te lo he dicho, no quiero nada de ti y tampoco no me interesas en nada inútil ¡Maldita sea Gine!.

Esas palabras fueron como un golpe bajo para mi, directo al corazón.

Me levanté de la cama, me acerque a el, y con una rotunda agresividad le solté una bofetada en su mejilla donde se encontró aquella cicatriz. Eso no lo vio venir Bardock, el jamas creyo que yo seria capaz de hacer tal cosa. 

— Bardock... ¡¡Eres un Imbecil!!.— grite con todas mis fuerzas.— ¡¡No creas que yo sere igual como todas las mujeres saiyajin!!.— no lo aguante mas y en ese momento me empezaron a caer lagrimas sobre mis mejillas.— ¡Te odio! ¡¡¡Ojala te mueras!!!. 

Tras lo ultimo salí corriendo de la habitación, hasta la puerta principal, hasta tomar vuelo. ¿Como es que pude ser tan ingenua al ilusionarse en ese momento?
Y ahora que es lo que en realidad quiero hacer.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 17, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

DRAGON BALL Z «LA HISTORIA DE GINE»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora