Capítulo 13.

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Narra Marco

La imagen de Nicole besándose con el portero había removido algo dentro de mí. Su llegada en sí lo había removido todo. No la veía desde que lo nuestro había acabado. Ella no quería verme ni si quiera hablar conmigo, cosa que entendía claro.

Cogí mi chaqueta y bajé al parking, me estaba agobiando ahí dentro.

Me apoyé en mi audi blanco y, aunque no debería, saqué un cigarrillo de la caja guardada en mi bolsillo. 

-¿Ahora fumas? Como han cambiado las cosas.

Su voz. ¿Me había seguido hasta aquí? Me giré para no darle la espalda.

-Todo ha cambiado. -Respondí con tono seco y triste para encender mi cigarrillo y volver a apoyarme en el coche.

-¿Por qué no podemos llevarnos bien? Te echo de menos. -Dijo colocándose a mi lado y apoyándose acto seguido en el coche.

-Estás borracha sube con tu amiguito Kepa anda.

-Así que es eso, estás celoso. Estoy suficientemente ebria para saber lo que hago y lo que digo.

Bajé la mirada y miré al suelo. ¿Estaba celoso?

-Claro que tonterías digo, como vas a estar celoso, tienes a una rubia plástica despampanante que más puedes pedir. -Dijo en tono irónico riéndose.

-Igual la rubia plástica no es mi chica perfecta.

-Es tu novia porque tú quieres. -Dijo resaltando el tú. - Y también por lo que me cambiaste a mí.

Ahora fue ella la que dirigió su mirada al suelo.

-Es de lo que más me arrepiento en esta vida. -Le dije sincero. Ella seguía con la mirada fija en el suelo. -Ey. -Le cogí la barbilla y la subí suavemente.

Hacía años que no veía esos ojos verdes tan cerca y joder, como los echaba de menos. En un impulso la besé, uní nuestros labios sin pensar en ninguna de las consecuencias. En un inicio me siguió el beso, luego paró y se separó. Automáticamente sus ojos se llenaron de lágrimas y yo no sabía cómo sentirme.

Un mismo destino. (Marco Asensio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora