Tengo algo que decir

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[Kyle POV OFF / todo el capítulo]

Eran las dos de la madrugada y no podía dormir.

Desde que Stan había (prácticamente) amenazado a Kyle con romper su relación, no podía dormir con la misma facilidad que cuando todo parecía ser prometedor. El moreno, acostado en su cama, sostenía una pequeña pelota de goma que tenía la misma forma que el balón de futbol americano. Era de esas pequeñas pelotas anti-estrés que puedes apretar todo lo que quieras, pero él se limitaba a lanzarla hacia el techo, recogerla con la mano, y así sucesivamente.

Se preguntaba si esa sensación de vacío que sentía por tener un bache en su relación con Kyle sería lo que sentiría cada día durante un buen par de años... hasta que acabase la universidad.

No podía decir que no había pensado en ello, pero desde luego no como él. No sabía que para Kyle estaba siendo tan difícil. Siempre pensó que lo difícil sería que dejase a Craig, una relación en la que él mismo se atrapó... pero Stan se equivocaba.

Si algo le había enseñado la terapia, es que siempre hay problemas que afrontar. Y no podemos estar preparados, pero podemos intentar decidir como lidiar con ello.

Vuelve a lanzar la pelota, mira fijamente como casi llega al techo, la vuelve a recoger con la mano.

"No sé como solucionar esto... pero tengo que buscar el modo" pensaba él.

Hacía ya un mes que empezaron los partidos, un mes en el que no había vuelto a besar a Kyle... era duro tan solo pensarlo. Hacían como si nada cuando estaban en el instituto, delante de los demás. Pero una vez finalizaba el día, Stan se iba a entrenar y descansar, y Kyle a estudiar. Y así, poco a poco, pasaron tantos días que Stan empezaba a temer que había esperado demasiado.

Sus amigos no se involucraban de ninguna forma, así que Stanley sospechaba que Kyle no les había contado nada. Y por esa razón, él tampoco quiso contarles nada. Aunque se muriese de ganas de desahogarse con alguien.

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Sale el sol.

Stan se despierta de un golpe, asustado, pensando que se le había hecho tarde para entrenar. Al mirar el reloj se tranquiliza, y se dispone a prepararse e irse. De camino al instituto, agradecía un día más no tener que entrar a la misma hora que sus amigos debido a sus entrenamientos (que ahora son tanto por la mañana como por la tarde). La mala noticia, es que este sería el último día.

Al llegar al campo, su entrenador se acerca a él.

—Buenos días.

—Buenos días, entrenador —le responde Stan.

—¿Estas preparado para afrontar el día antes del partido final?

Stan toma aire antes de responder.

—Por su puesto —responde intentando ser enérgico.

—Así me gusta —le dice satisfecho— si todo sale bien, es probable que reconozcan tu beca mañana, después del partido.

El moreno se sorprende tanto, que no sabe como gestionarlo.

—¿En serio? ¿reconocer?

—Te entregaran el papel o certificado que tengan que entregarte, ya sabes, creo que lo veías venir, ¿no?

Lo cierto es que había sido una temporada magnifica, y sabía que tenía muchas probabilidades de conseguirlo. Pero no estaba completamente confiado. Ahora que lo tiene justo delante de las narices, le cuesta asimilarlo.

Sueños Húmedos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora