No me había levantado en todo el día ni lo pensaba hacer ahora.
No me apetecía ir al instituto después de la desagradable sorpresa de anoche, y menos para ver como Stan se pasearía por el instituto con el labio inferior roto. Seguro que le lo estará enseñando a las idiotas de las animadoras para que sientan lástima por él... al fin y al cabo, es como si estuviese desesperado.
Y como revienta estar yo ahí, para él, a su disposición... pero que ni estando muy desesperado acceda a, al menos, darme una oportunidad...
¿Soy un egoísta por querer que ocurra eso?
Mis rizos color granate se pegaban a las sábanas y a la almohada, debido al hecho de permanecer un día entero sumergido en la cama. Sentía como mi mente vagaba entre el mundo de los sueños y el mundo real. Llevaba durmiendo desde que llegué a mi casa tras consuelos inútiles (pero apreciables al fin y al cabo) de Kenny. Tan solo durmiendo.
No había pensado ni siquiera en si debía entregar algún trabajo o alguna tarea. Me la sudaba. Y eso, y la usencia de mis padres por motivos familiares, era uno de los motivos por los que me pude quedar entre mis sábanas verdes y azules durante las 24 horas de aquel día laborable.
Mis ojos se abren lentamente en la penumbra de la habitación, con un intenso olor a encerramiento, o como mi madre lo llama "hormonas de adolescentes"... en fin.
Mientras mis pestañas se despliegan lentamente, una parte de mi corazón solo busca que se vuelvan a juntar para cerrar estos ojos que no me dejan ver más allá de la oscuridad. Mire el reloj que tenía a mi lado derecho.
Eran las 3 AM.
Al lado del reloj, no pude evitar descubrir cuál era el motivo por el que me había separado de aquel trance en el cual no sabía si estaba dormido o despierto: Alguien me había enviado un mensaje por el Iphone.
Tenía que mirarlo, ya que la curiosidad me había desvelado lo suficiente como para no volver a dormir en toda la noche. Además, me ayudaría a pensar en otra cosa que no fuese Stanley aunque fuese durante unos efímeros segundos.
Desplegué mi brazo derecho y lo arrastré de forma perezosa hasta que, segundos después, agarré el Iphone y dejé que mi asombro hiciese latir mi corazón por primera vez en 24 horas al ver los mensajes que tenía:
sé que es un poco tarde para hablarte por aquí, así que lo siento
Si te escribo tan tarde es por Tweek. Hay noticias, ya te contaré... si quieres escucharlas
Vas a venir mañana a clases?
Además hay una cosa que te tengo que preguntar sobre tus amigos...
Y me gustaría hablar contigo
Contacto: Craig.
Sentí como mi corazón daba un brinco: En primer lugar, Craig se había percatado de mi ausencia y se había preocupado, y eso que solo llevábamos unos días conociéndonos mejor. En segundo lugar, tiene noticias sobre Tweek... ¿Qué clase de noticias? ¿Buenas o malas? en tercer lugar, Craig al parecer deseaba verme en clases mañana... y en cuarto lugar, una cosa sobre mis amigos ¿sobre Stan, habrá percatado algo? ¿¡o habrá descubierto a el gordo de Cartman?! Y lo último... quiere hablar conmigo ¿de cualquier tema, como amigos?
Demasiada información junta.
Bueno, no. En realidad es tan solo la presión de mi jodido cerebro: mi mente busca matices en cualquier palabra o frase para transformarlos en más problemas.
ESTÁS LEYENDO
Sueños Húmedos.
RomanceKyle esta cansado de que sus sueños húmedos se queden en eso, sueños. Sin embargo, todo cambia cuando asiste a la fiesta de la pareja más popular del instituto. Style, nsfw.