Don't Let Me Go - [ LEVI ] - [EDITANDO]

17

El punto de reunión era fuera del cuartel de las tropas de la Legión, Levi me había pedido que lo esperará fuera de este mientras él hacía su visita diaria para Erwin, supongo que tenía cierto aprecio al comandante. Comencé a contar las nubes pues él había tardado más de lo usual.

—¿Te quedarás ahí como idiota viendo al cielo? —llamó casi al otro extremo de la calle.

Bajé mi cabeza, comencé caminar hacia él molesta por sus palabras.

Estaba apunto de contestarle pero su rostro lucía consternado, aceleré el paso hacia él mientras que Levi solo siguió caminando.

—¿Ocurre algo? —pregunté y él negó—Levi...—lo llamé y tomó mi mano.

De nuevo esa sensación volvía a mí, mi corazón se aceleraba, me sentía nerviosa y mi estomago daba vueltas. Se sentía tan bien pero me hacía mal.

Mis ganas de soltarlo era tan fuertes como las de no hacerlo, el me guiaba por las calles de Trost, mientras solo mantenía mi mirada fija en él. Giramos sobre una calle cerrada, luego seguimos caminando hacia un callejón, ahí finalmente me soltó.

—Los titanes que matamos—comenzó aún dándome la espalda—, al parecer—giró su rostro levemente hacía mí—son humanos. —finalizó revelando al fin que era lo que le molestaba.

Lo miré sorprendida, dejé mi boca caer levemente, ahora entendía su molestia y por qué insistía tanto en que yo debía recuperarme.

No entendía su forma de ver la vida, él la apreciaba de alguna forma que para mí era difícil de comprender, quizá porque éramos lo último que quedaba de la humanidad y sobrevivir era parte para que nuestra existencia continuase.

—Todo este tiempo he estado asesinando personas. —gruñó.

Volteó a mí, se recargaba sobre la pared, yo me recargué del lado contrario y alcé mis ojos al cielo.

—Los titanes inteligentes son humanos—dije intentando encontrar las palabras correctas mediante las nubes, recordando a los que había en la tropa 104—. Los titanes "normales" eran humanos—continúe y bajé mi mirada hacia él, estaba consternado—. Digo, de alguna manera tenían su forma parecida a nosotros. Además solo los inteligentes vuelven a ser humanos como Eren o Annie, no hay un remedio para que vuelvan a ser humanos—dije con dificultad el último nombre—. No asesinaste humanos, Levi—me acerqué a el mirándolo fijamente—, mataste bestias que interfieren con la paz y libertad de la humanidad. d

Di la vuelta y seguí caminando. Él me siguió, no tenía rumbo alguno.

Hace solo una semana comenzamos nuestras caminatas diarias, después de realizar nuestras diferentes trabajos asignados nos reuníamos antes del anochecer para caminar, empezó como una leve recuperación para nosotros.

—Te has recuperado Alice—comenzó a hablar a mi lado, ignoré sus palabras y seguí caminando sin interés observando el atardecer—. Partiremos mañana, para continuar con los experimentos de Hange con Eren. —dijo y volteé hacia él con una leve sonrisa, al fin algo de trabajo.