Tiempo

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—Buenos días señorita Idomani—dijo Julie en la escalera—Otra vez despierta tan temprano, ¿eh? —preguntó Julie preocupada y Alice siguió su camino hacia abajo ignorando la charola de plata con sobres en esta—¡Su correspondencia señorita! —dijo Julie persiguiéndola.

Alice volteó hacia Julie, viendo la bandeja de sobres. Apellidos como Reiss, Arlet y Lloyd eran los que más resaltaban sobre estos, Alice tomó los sobres marcados con sello real y los que tenían el apellido Arlet con la mano derecha, mientras que con la mano izquierda tomaba el resto de ellos.

—¿Los volverá a desechar señorita? —preguntó Julie preocupada.

—Si no es de la Legión por el comandante Erwin o la capitana Hange, los demás no importan—contestó Alice—Historia sabe de mi estado actual, aunque deseo ayudarla no me es posible, solo dono el dinero que puedo y Armin es muy buen amigo, me mantiene al tanto de lo que Historia no me comunica—dijo mientras leía los otros sobres comenzando a romperlos.

—¿Y por qué rompe las cartas del señor Lloyd? —preguntó Julie preocupada, Alice volteó a verla con una sonrisa.

—A él lo veo casi diario, solo gasta dinero en correos. Su familia realmente lo obliga a hacer cualquier cosa, ¿cierto? —preguntó ella volteando a Julie, ella la miro con la boca abierta.

—Señorita Idomani, creo que el joven Mark Lloyd es el candidato perfecto para usted—dijo Julie confesandose, Alice volteó con sorpresa hacia ella—No me malinterprete, sé que la presionamos de la misma manera con el joven Nakamoto, pero Mark...

—Lo sé Julie—dijo Alice sujejtando las cartas—Mi familia quiere que despose a alguien, ¿no es así? —preguntó ella irónica—Ni si quiera dudé que cambiarían su manera de pensar, lo sabía, querían que volviera para que desposara a alguien, ¿no? —preguntó molesta Alice y Julie la miró con lástima.

—Señorita Alice—suplicó Julie—Si su famiia quiere que despose a alguien es para que no vuelva a salir de aquí. Por favor, señorita Alice, solo pienselo por un momento. El joven Yuta, a nosotros también nos duele su muerte, pero no sabe como nos destruirá que usted muera—dijo Julie con lágrimas en los ojos.

—Lo haré—dijo deteniendo a Julie—Solo cuano Lloyd se me proponga, aceptaré casarme con él—aceptó Alice tomando el resto de cartas.

—¿Lo dice en serio, señorita? —preguntó Julie con una pequeña sonrisa formandose en sus labios.

—Han pasado casi dos meses, no sé si la Legión me ha desechado o realmente no están haciendo nada...—mintió mirando a Julie.

Alice había recibido mensajes de pequeñas misiones, todas de Hange, ninguna de él, a quién realmente esperaba.

En parte sabía que era su culpa porque la primera carta que recibió no fue de Historia o Armin, fue de él, encriptada como una carta de Sasha. Fue duro leerla, pues ella no estaba en su mejor momento mientras la leía, le confesó todo, desde la primera junta que tuvo con su padre hasta la última que fue a solo días después de la coronación.

Si después de esa extensa carta Alice no recibió más por parte de él fue porque su padre, el señor Patrick Idomani, hizo creer a Levi que Alice no regresaría a la Legión y así también hizo creer a su hija que el capitán Levi ya no tenía ningún interés en ella.

Incluso Levi, cuando cayó en las mentiras del señor Idomani corrió hacia Stohess, en busca de ella. La mentira que él creía Patrick Idomani había fabricado no era falsa después de todo. Alice y Mark se habían vuelto más unidos en los últimos dos meses, Mark reflejando sus grandes intenciones hacia la chica de Stohess, mientras que ella solo pretendía no saber que la estaban conquistando.

Don't Let Me Go - [ LEVI ] - [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora