ႮΝᎪ ᎷᎪՏᏟϴͲᎪ [𝙎𝙝𝙖𝙙𝙤𝙬 𝘽𝙤𝙤𝙢] (PAUSADA)

2 - En su mano

Finalmente un nuevo día en la gran isla y en esa cueva, donde habitaba el erizo oscuro.
Éste ya estaba despierto y ahora mismo permanecía fuera del hogar para pensar en que hacer con esa joven, la cual caminaba y veía las plantas o jugaba con rocas, parecía una niña; un animal que se la pasaba jugando y curioseando.

Ignorandola se perdió en los pensamientos. Como es una humana seria normal enviarla con Eggman, pero al instante descarto la idea, pues es un gordo obsesionado con Sonic y sus amigos. Quién sabe para que la usaría a esa pobre jovencita.
Luego pensó en la otra opción, y ese era el erizo azul que tanto odiaba. Nuevamente negó esa idea, iba en contra de su orgullo, sería como pedir ayuda o un favor a ese idiota. Jamás caería tan bajo como para hacer tal cosa.

<Tendré que buscar la forma de que me deje en paz>

La observo pensando en que necesitaba hacer para deshacerse de ella. Esa castaña con mirada tranquila he inexpresiva, que picaba un panal de abejas con una rama, y estaba a punto de caer...

— Espera... ¿Qué?

Volviendo a la realidad, vio como ese panal caía y las abejas furiosas pensaban salir.
Usando su gran velocidad fue hacia ella para llevársela lejos de ahí.

— ¿Pero qué demonios hacías? ¡Es peligroso! —Exclamo regañandola—. Puedes suicidarte si quieres, pero no agregues una mala imagen en mi memoria. —Se quejó cruzándose de brazos.

Solo recibió una sonrisa de su parte, cosa que lo irritó más y volteo tocándose la barbilla.

— Mhm, primero nesecitas sobrevivir... —Murmuró para luego mirarla—. Escucha humana, debes sobrevivir sola aquí y lo primero es alimentarte.

— ¿A..limentarme? —ladeo su cabeza pensativa.

<¿Le cuesta hablar o me toma por idiota?>

— Si. Aquí no conseguirás comida tan fácil, y lo digo porque estarás sola. Debes comer; cazar y comer.

— Cazar... ¿un animal?

— Exacto. Para sobrevivir se debe hacer cosas de ese tipo. —Explicó cerrando los ojos—. Pero simplemente puedes buscar alguna fruta o pedirle a algunos aldeanos algo de comida...

Mientras explicaba con seriedad sin abrir los ojos, la joven lo había pasado de lado dirigiéndose hacia algo en específico.

— Y así me deshare de... —comento abriendo los ojos pero ella no estaba— Oye ¿dónde te has ido?

Confundido volteo y se encontró con la joven teniendo una pequeña ardilla en la mano. Abrió su boca para intentar meterla dentro.

— ¡Oye espera!

Rápidamente se acercó para quitarle la ardilla y dejarla escaparse.

— ¿¡Qué pensabas hacer!?

— .... tú dijiste que debía comer.

— ¡¡No me refería...!! —se calmo y suspiro.

No iba a ser fácil, de alguna manera sentía que no era lo indicado abandonarla así. Ahí se le ocurrió una idea.

— Supongo que te enseñaré a defenderte. —comentó mirándola—. Para que nadie intente aprovecharse de ti o algo por el estilo, yo que se, ni me interesa. —Se encogió de hombros.

Asintió y lo siguió para no meterse en problemas, o eso creía.

No podía creerlo, era simplemente estupido. Creyó que no se metería en problemas y ahí estaba, llenándose de hormigas por tropezar en su nido.
Rápidamente la tomo por detrás y la lanzo al agua. Era la única idea que se le cruzo por la cabeza para que se deshaga de las hormigas.

Del agua salió la cabeza de esa castaña y de la nada comenzó a nadar como si fuese un perro jugando en el lago. El erizo no hizo más que sentarse en una roca y observarla, ¿tan torpe era? Aún sigue pensando en cómo sobrevivió ahí afuera o en el mar para llegar hasta aquí.

<¿es realmente humana?>

Preguntas que no lo dejarán dormir en paz. Ahora que lo pensaba ni él mismo sabía cómo terminó así.
Mientras pensaba no se dio cuenta de que la joven se hundió, y él lo más tranquilo pensando en cómo llegó a intentar cuidar de una humana sin cerebro.

— ¿Mhm? ¡no puede ser! ¡solo me descuide un segundo! —Exclamo mientras se ponía de pie.

Al intentar meterse, la humana salió de pronto y se acercó para extenderle su brazo.

— .... Eso es... un pescado.

Si. Tenía un gran pescado tragando la mitad de su brazo, que ahora se estaba ahogando por falta de aire. Bueno, eso podría contar como su primera comida de supervivencia. Fue lo más raro pero merecía un punto positivo, ella se veía alegre al lograr tal acción.

— Bien hecho... supongo, ahora hay que quitarte eso del brazo. —Dijo pensando en quitarselo.

Pero ella se adelantó y tomo un palo para golpear a una gran velocidad y repetidas veces al pez, además parecía que ni a matarlo llegaría.

— ¡Así no!

Le quitó el pez y ya había muerto por la falta de aire, eso ojos sin vida y la lengua afuera le hacía creer que sufrió un poco.
Que humana más problemática se acaba de encontrar. Lo mejor iba a ser intentar buscar información de su hogar, pero luego se encargaría de eso.

— Bien, volvamos y camina sin meterte en problemas esta vez.

En todo el camino la miraba de reojo vigilando que no se desvíe del camino, se la coma algún animal o algo peor.