Nuevamente esas pesadillas, cada noche era lo mismo, no podía dormir y cuando lo hacía las pesadillas atormentan mi mente.
Me senté rápidamente, con mi respiración agitada y algo de dolor en la espalda, pues dormir en el piso definitivamente ya me está haciendo efecto.
El castaño quien dormía profundamente a mi lado, se despertó desorientado y sacó su arma en forma de defensa.
-Lo lamentó -susurre en voz baja.- no fue mi intención despertarte -.
-¿Otra pesadilla? -pregunto, asiento y él suspira más tranquilo de que no sea algo en lo que deba usar su arma, después me abraza y me acerca a él.
-Cada vez son peores -murmuró.
-Entiendo, me pasa también ¿quieres hablar de ello? -me da un beso en la mejilla y me acaricia el cabello dándome tranquilidad.
Me acurruco más a él, y él se dedica a abrazarme más fuerte, me acuesto en su pecho y lentamente nos dejamos caer al piso nuevamente.
Escucho sus latidos que me tranquilizan y tomo un poco de aire antes de contarle, sobre el mismo sueño que tengo desde hace tiempo.
-Estábamos en un lugar, como un laboratorio, con paredes blancas -comienzo.- nos tomábamos de la mano y asentíamos, como dándonos una señal, pero no se de que. De un momento a otro alguien llega y me agarra, alejándome de ti, mientras intentas detenerlo unos tipos armados y con traje te agarran y a mi me llevan, mientras gritabas que no me hagan daño y decías que todo estaría bien. Después todo se vuelve obscuro y cuando abro los ojos, es como un vació, solo veo algunas personas, pero cuando me acerco para saber quienes son, desaparecen -lo abrazo mas, el me besa la frente y me separa un poco de él.
Me confundo un poco ante este acto por parte de Thomas, pero después se voltea hacia mi y pone ambas manos en mi cara, limpia con sus pulgares las pequeñas lágrimas que ruedan en mis mejillas.
-Solo es una pesadilla ¿okey?, nadie, nunca nos va separar, te lo prometo, siempre te voy a cuidar -asiento.- te amo _____ -susurra en mis labios, para después unirlos de forma dulce.
Me vuelvo acurrucar en su pecho, una vez que nos separamos del beso. Su mano acaricia mi pelo con suavidad y me siento más tranquila, siento mis párpados pesados y se que estoy quedando dormida.
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•19/04/2021•
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