Niñero🧸; km au.

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Jungkook apretaba el volante entre sus manos mientras conducía a toda velocidad hacia su casa, seguramente Jimin ya había visto el articulo de Dispatch. De todos modos sabia que Jimin terminaría con el, al menos debía explicarle.

Bajo corriendo del auto, con sus manos temblando abrió la puerta. Quiso matarse cuando al estar subiendo las escaleras escucho los fuertes sollozos del rubio. Al intentar girar el pomo que claramente estaba cerrada con seguro, golpeo con fuerza la puerta. 

Se sorprendió cuando Jimin le abrió la puerta, sus ojos estaban hinchados, mejillas mojadas por las lagrimas desbordando de sus ojos, sus labios tenían notables mordidas que aun sangraban.

-Jimin.. 

Jimin no le respondió y se sentó en la cama, el pelinegro cerro la puerta para luego tratar de acercarse. El rubio negó colocando su mano en el pecho del contrario, lo empujo un poco alejándolo de su cuerpo.

-Jimin..

-¿Porque lo hizo? -su voz sonó muy baja y lastimera.

-No estaba consciente.. 

El rubio ríe sin gracia. -¿Estaba inconsciente? ¿Y estas fotos también lo estaba?

Jimin desbloqueo su celular, le enseño la conversación completa. Jungkook suspiro entregándole el celular.  

-¿Y bien? 

-¿Que quieres que te diga?

-¿Porque? ¿Porque hizo esto? Si no quiere estar conmigo me lo hubiera dicho y no tendría que haberme enterado de esta manera.

-Yo quiero estar contigo..

-Sus acciones demuestran lo contrario. 

Jungkook bajo la mirada.

-La primera vez.. ella me drogo, me cito a su departamento y tomamos mucho a las horas me despertó y ella estaba a mi lado.. estábamos desnudos. Las demas no me drogo ni me emborracho, yo quise hacerlo. -el rubio soltó un jadeo levantándose de la cama. - Lo lamento.. -cubrió su boca empezando a llorar.

Jimin estaba en una esquina de la habitación, con sus manos cubriendo su boca. Su cuerpo fue resbalándose hasta llegar al frio piso. 

Jungkook había prometido a su padre que jamás dejaría que alguien le hiciera daño, pero el rompió su promesa el lo había lastimado y de la peor manera. Su corazón dolía, el nudo en su garganta le impedía tragar saliva con facilidad. 

¿Qué podía hacer si su corazón se había enamorado fuertemente y ahora dolía demasiado al pensar que la persona que amaba le había fallado?

¿Porque amar dolía tanto?

Y solo allí deseo jamás haber conocido a Jungkook, jamás haberse entregado a el. Quizá su padre estaría mal o ya estuviera muerto pero su corazón solo dolería por su padre, no por el amor que había sido entregado y le habían fallado. 

Con su cuerpo tembloroso se levanto del lugar, camino al closet de Jungkook con escalofríos recorriendo su ser. Tomó su pequeña mochila y guardo la poca ropa que tenia en aquella casa. El pelinegro lo miraba soltando sollozos, no lo iba a detener. 

Lo amaba, por eso lo dejaría ir. 

Al tener su ropa guardada, cuando iba a abrir la puerta recordando el celular que Jungkook le había obsequiado. Quito el chip y se acerco a Jungkook para entregárselo, pero este no lo acepto.

-Te lo obsequie, quédatelo es tuyo.

-No quiero nada suyo en mi vida. 

Jungkook lamio sus labios tomando el celular en sus manos. Camino detrás del rubio hasta llegar a la puerta.