Capítulo 1

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La primera vez que me desperté, pensé que estaba soñando.

A menudo él invadía mis sueños en el barco que se suponía que nos llevaría a Mal y a mí a través del Mar Auténtico a una nueva vida en Novyi Zem. Una vida en la que pudiéramos ser quienes quisiéramos - excepto nosotros mismos. Una vida que estaría libre de él.

Así que fue irónico que él atormentará mis sueños entonces, tal como los atormenta ahora. Había dejado atrás al Oscuro, tal vez incluso para morir en La Sombra, pero ahí estaba él mirándome, con el cabello negro como la noche y los ojos gris pizarra, con su rostro afilado y hermoso. Era tan familiar la forma en que ahuecó mi mejilla en su mano.

En mis sueños habituales, me incliné hacia él. Deje que rozará con las yemas de sus dedos el collar de Morozova e invocará el poder que vivía dentro de mí, el resplandor de la luz. Lo dejé hacer lo que él quisiera.

Pero ahora cuando tocó mi mejilla, todo lo que hice fue congelarme.

Su mano estaba tibia.

—Alina —susurró.

Le devolví la mirada. Yo no era un objeto inerte. Podía pensar. Sentí que mi corazón se aceleraba detrás de mis costillas, la sangre latía en mis oídos, las yemas de mis dedos estaban entumecidas. Sentí que estaba acostada sobre algo blando. Sentí su aliento acariciando mi mejilla. La noche presionando a nuestro alrededor.

—Esto no es real —le dije, como si decirlo lo hiciera realidad. —No eres real.

Suspiró y miró a alguien a quien no pude ver. —De nuevo —dijo.

Antes de que pudiera preguntar qué significaba eso, caí como una piedra.

Antes de que pudiera preguntar qué significaba eso, caí como una piedra

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Algunas personas encuentran fácil dormir en el mar. Yo nunca lo hice. No por el choque del océano, o el constante balanceo del barco mientras navega por las volátiles olas, sino por los sueños. Los conocía muy bien, pero ese había sido diferente.

Me sentí aliviada al encontrarme en mi hamaca debajo de la cubierta con los brazos de Mal a mi alrededor, su voz en mi oído.

—Estás a salvo —dijo. —Estás bien.

Apenas registré sus palabras cuando me estremecí contra él. Nuestros compañeros de cabina probablemente estaban mirando furiosos. Solía hablar en sueños. —Se sintió real —susurré, presionando mi rostro contra su cuello.

—¿Qué pasó?

Negué con la cabeza. Sabía bien que Mal no querría oír hablar del Oscuro.

—Así de malo, ¿eh? —preguntó con una risa forzada. Aunque no podía ver su rostro en la oscuridad, sabía que estaba frunciendo el ceño, incluso mientras acariciaba con una mano firme mi espalda.

—No es nada —le aseguré. —Tienes razón. Estoy a salvo. Solo otro sueño. —Presioné cada parte de mí que pude, cada parte torpe y huesuda, en su cuerpo, tratando de encontrar consuelo en su presencia. —Lamento despertarte.

Out Of Time - Traducción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora