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Pero ¿Ella te besa como yo te besé?

Lisa se preguntaba qué demonios hacían en el camerino de TWICE, si era sincera, después de lo que escuchó no tenía ni la más mínima moral para enfrentarse a Sana y lo que significaba su presencia.

Lo único que agradecía era que podía estar con Mina y Momo, que le hablan de cosas triviales y la distraían de lo que pasaba en su vida desastrosa.

No podía evitar mirar de vez en cuando hacía Sana, que permanecía tecleando animadamente en su teléfono; Lisa sabía que Jungkook aparecería en cualquier momento a cumplir lo que le prometió en esa llamada, llevarla a cenar y tal vez algo más.

La verdad no lo quería saber.

BLACKPINK había decidido visitar a las chicas para felicitarlas por el final de su promoción y TWICE había expresado lo buena que era su nueva canción; la amistad entre los dos grupos nunca se hizo afectada después de lo ocurrido. Sólo Lisa y Sana sabían que las cosas entre ambas simplemente nunca funcionarían de la manera en que lo hacía con las demás.

Menos ahora.

— Buenas tardes.

Todo el mundo se quedó en silencio, cuando esa voz se escuchó en todo el camerino.  Lisa de inmediato supo de quién se trataba, un nudo formándose en su garganta.

De verdad había venido.

— ¡Jungkook!

Se quedó estática en su lugar mientras veía como Sana se apresuraba feliz a saludarlo, con una sonrisa de par en par que no podía disimular.

Lisa se removió incómoda en su asiento, preguntándose si él la había visto; miró de reojo y notó como hablaba con Sana, manteniendo una poca distancia.

Le era imposible no preguntarse qué demonios sucedía entre los dos. Debería dejarlo ir y convencerse de que Jungkook ya no sentía nada por ella, que ahora quería seguir su vida y hasta intentar algo con Sana si se le daba la gana.

Pero era tan difícil.

Ella seguía amandolo con el alma y pretender que no le dolía la idea de verlo con alguien más, le ardía en los más profundo y se hacía cada vez más difícil para ella mantener esa fachada ante todos.

Daba miradas debes en cuando hacía su dirección, mientras pretendía estar en la conversación que Mina y Momo intentaban continuar para distraerle de todo.

Pero entre mirada y mirada, se le arrugó el corazón cuando vio cómo Sana se puso de puntitas y depositó un beso en la mejilla de Jungkook.

El chico sintió como los labios de la pelirroja, impactaban casi que en la comisura de su labio, le fue imposible no apartarse incómodo, tocando su nuca en el proceso.

Sus ojos se deslizaron hasta donde estaba Lisa, atrapando por un segundo su mirada fija, que al notar la de él, se apartó rápidamente.

Jungkook la había sentido verlo desde hace tiempo y si pensaba en el último encuentro que tuvieron, necesitaba saber que pasaba por su mente.

Siempre había sido el tipo de personas que no recuerda las cosas después d una borrachera, pero cómo demonios podía olvidar que Lisa le había dicho que lo amaba.

Cuando se despertó la mañana siguiente, quiso maldecirse y lo hizo. Hasta ese momento, teniendo a Sana frente a él hablándole de cosas que verdaderamente no le importaban, se seguía preguntando por qué demonios dijo eso.

¿De verdad lo había sentido eso? Y si era así ¿Por qué se arrepentía? ¿Por qué quería deshacer sus palabras?

—Jungkook.—Dijo suavemente Sana.—¿Estás bien?

—Sí, así es.—Dijo desinteresado.—Vamos a encontrarnos con los chicos.

La pelirroja se removió insegura en su asiento y después de darle una mirada a Lisa, se acercó más a Jungkook con una mirada coqueta.

—Pensé que iríamos a cenar los dos juntos.

Jungkook frunció el ceño:—No, te dije que nos reuniríamos con los chicos. Jamás hablé de cena, vamos que nos encontraremos en mi apartamento y debo organizar todo.

Sana se ahorró las palabras y formó una leve sonrisa, sin demostrar su decepción.

—Además...—Dijo el chico antes de marcharse.—No me des besos de ese tipo, sólo somos amigos. No quiero que confundas las cosas.

–Claro, Jungkook.—Aseguró.

Pero la sangre le hervía, principalmente porque sabía la razón de su frialdad.

Y aunque Jungkook quisiera pretender que no es así, la presencia de Lisa allí, influía demasiado en él.

* * *

Quedan 5 capítulos para el final... 😬

All these years » lizkook (2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora