Odio que me hagas amarte

Capitulo Final.

Capitulo FINAL.

-No me perdonarías... ¿Ni aunque hoy fuera el último día que me vieras?

A _______ le tembló la voz cuando le preguntó a Justin, haciendo uso de las últimas fuerzas que le quedaban, las últimas fuerzas que utilizaría en no llorar, en este preciso momento, la última vez que vería a sus ojos miel -Corrección, el jamás sería suyo- Aunque ______, por él, daría la vida. Sabía que ella sí le pertenecía a Justin.

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-Mira-Dijo mirándome mal-Si este fuera el último día que te viera, en este momento, esta mansión estaría hecha un desastre, ¿Sabes por qué?-Yo sólo me callé esperando a que se respondiera solo-¡Porque haría una fiesta!

-Supongo que con eso me dices todo-Dije suspirando-

-Ahora deja de molestarme, estoy ocupado, solo estorbas, tenemos examen y no he conseguido estudiar mucho

-Adiós-Dije y salí de la habitación de estudios-Para siempre-Esto último lo dije en un susurro, mientras unas lágrimas caían por mi mejilla-

Miré el enorme reloj de la pared en un acto reflejo, mientras mis ojos derramaban las últimas gotas de agua que le estaban quedando, ya que tendrían que reservar unas cuantas para unas horas más. Eran las doce y dos minutos.

¿Qué demonios estaba a punto de hacer? ¿Qué locura estaba a punto de llevar a cabo?

Cerré mis ojos intentando ordenar mis pensamientos, sin resultado alguno, mis pensamientos no tenían coherencia, ni siquiera para mí misma.

Siempre había sido la niña "Buena" de la historia, la buena estudiante, la buena hija, la niña perfección, la chica que sufría por un chico que jamás le pertenecería, la chica que estaba a punto de llevar a cabo la peor, o quizás la mejor estupidez que se le haya ocurrido hacer. La chica que estaba apunto de crear otro cuento, otra historia, otro principio y otro final, la chica que estaba predestinada a perder la lucha, la batalla y la guerra, aquella chica que no había podido hacer bien las cosas y que se veía enfrascada en un lío de locuras que eran completamente enajenadas, vesánicas, oficialmente esta historia podría ser un libro.

Mi historia había acabado, en un final brusco e inesperado, había acabado en lo que jamás habría esperado que hubiera acabado; nunca los volvería a ver, nunca volvería a escuchar sus voces, sus risas... Lo eran todo ¡Joder!

Sumergida en mis pensamientos que duraron un tiempo casi imperceptible, caí en la cruel y dura realidad; Era momento de marcharse.

Momento de dejar, abandonar, y recordar todos esas atesoradas memorias, que estarán siempre en mí.

Momento de desechar aquellas páginas de mi vida, y comenzar a escribir una nueva historia.

Momento de reunir toda mi fuerza, valor y coraje, e incluso estupidez, para hacer frente al mundo real y a todo lo que me estaba sucediendo.

Momento de dejar todo en el camino, avanzar sin mirar atrás.

Momento de rendirse oficialmente, de perder oficialmente la batalla y la guerra del amor, renunciar a ella también.

Momento de olvidar a Justin.

Pero quizá no todo estaba perdido, quizá rehacería mi vida de nuevo, quizá mi próxima historia tendría éxito, quizá no todo mis destino estaba tachado de horrible e imperfecto, quizá tenía que darle una nueva oportunidad al amor y a la vida, olvidar todo y comenzar de cero, como si nada hubiera pasado.

Quizá encontraría a aquel chico que supiera llegar a mi corazón, aquel chico que reemplazara el gran error que había sido Justin, y reemplazara las lágrimas por sonrisas. Justin no merecía mis lágrimas, aunque lo amara.

"Si alguien te hace llorar, no se merece tus lagrimas, porque quien realmente se las merezca, nunca te hará llorar"

Y Cuando subí al taxi, y vi la mansión desaparecer de apoco, sabía que oficialmente había escrito el "Fin" de mi historia, había acabado, era el fin, el indiscutido fin.

Pase lo que pase, aunque decida seguir adelante...Siempre estarán en mi corazón.

Si es que aun sigue latiendo...

Fin.