Wanderers Not So Faraway.

EXTRA.

La montaña changming está cubierta de una espesa capa de nieve, los rayos del sol tocaban con delicadeza la tierra, Como su tuvieran miedo de que la tersa nieve se diera a derretir. Los pocos árboles que se aglomeraban en pequeñas manchas, están completamente blancos.

Un pequeño conejo salió de su madriguera en busca de algo para llevar su pequeño estómago, pero eso no pudo pasar, porque alguien salió corriendo de entre los árboles riendo a grandes carcajadas.

—¡Ven aquí pequeña mono! —Wen Ke Xing corría detrás de la pequeña de cinco años. Una hermosa niña de cabellos oscuros, ojos azabaches, sonrisa hermosa, labios finos, mejillas un poco regordetas por su edad y piernas cortas.

—¡No puedes atraparme! —Con voz llena de orgullo y risa le gritó a su padre.

—¡Le voy a decir a tu madre!

—¡Mamá me ama y no me regañara! —entro corriendo a la sala principal chocando con alguien más.

—¿Quién no te va a regañar? —Un Zhou Zi Shu embarazado por segunda vez, cuestionó a su hija.

Tocandose el pecho y respirando drásticamente Wen Ke Xing llegó a la habitación. —Ah-Xu…. Ella… —señaló a su hija —Ella hizo cosas incorrectas el día de hoy…

Zhou Zi Shu puso los ojos en blanco. —Eso no debería extrañarte si lo sacó de ti.

—Pero… —La pequeña Xiang al ver que había ganado en contra de su padre se escondió detrás de Zi Shu para mostrarle la lengua después. —¡Tú!

—No la regañes. Es una niña que no sabe.

Wen Ke Xing se cruzó de brazos. —ay nunca aprenderá a ser una buena dama si la sigues minando demasiado. ¿Dónde está mi Ah-Xu de boca dura y corazón dulce? Devuelmelo.

—Lo sigo siendo, pero para mi hija no puedo ser duro. Ella es una hermosa hada.

—Será una mal educada y vulgar como ustedes si no la disciplinan como es correcto. — Te Bai Yi entró mirando en dirección a la pequeña niña. —Pequeña monstruo mira lo que te traje. —de entre sus mangas sacó una hermosa muñeca de porcelana.

—¡Wow! —la niña estaba tan emocionada y encantada con tal regalo que salió de su escondite.

—¿Te gusta?

—¡Sí!, ¡Gracias abuelo Ye!

—¡No lo llames así! Este viejo muestro no es tu abuelo. —reprendió Wen Ke Xing obviamente lleno de celos.

—Callate.

Como se pueden imaginar después de cinco años de una ardua enseñanza para aprender a ser padres, lograr mantener sana y salva a su hija. Y como lo había prometido desde hace mucho tiempo el maestro del valle fantasma no permitió en ningún momento que Ye Bai Yi se hiciera cargo de su hija.

El espadachín por otro lado le había tomado un cariño incondicionalmente grande a la niña, que hasta le había puesto un apodo ‘pequeña monstruo’. Wen Lixue Xiang era la imagen viva de Gu Xiang sólo que un poco regordeta y nutrida, con una vida pacífica y llena de esperanza, y sin olvidar que tenía una familia.

Sin duda la abuela meng le dio el pase directo a la reencarnación pocos años después de morir, y sobre todo la dejó escoger a su familia.

A su maestro como padre y al enfermizo Zhou, como su madre.
A Zhang Cheng Ling se le dio la oportunidad de abandonar la montaña para salir al mundo y vivir como un alma libre, ayudando a los necesitados. Mejorando y aprendiendo técnicas de cultivo y de artes marciales.

¿Qué puede ser mejor que una vida sin preocupaciones? ¿Qué puede valer más que la espera de un alma gemela? ¿Qué precio más grande puede pagar el amor que no sea felicidad?

Creeme, lo único que tienes que hacer en la vida es vivir como un vagabundo en la tierra y ser un viajero en el mundo. Porque dos almas que se aman, son vagabundos en un reino de odio y egoísmo, que los puede alejar pero no son tan lejanos. Porque el amor los une, haciéndolos vagabundos no tan lejanos.

◇───────◇───────◇

The end