Iba despertando acausa de la alarma del reloj de la mesita de noche a un lado mío, como era de suponerse Alexander ya no estaba en casa, se había ido a quien sabe dónde, por asuntos de la empresa. O al menos eso es lo que quiero creer.
Hoy no tenía que ir al hospital, pero tenía que estar el pendiente por si es que tenía algún llamando.
Me levanté y me puse mi ropa deportiva, iba a entrar un rato, mientras hacía ejercicio mi mente paraba de pensar, ¿Estará con alguien más?, ¿A caso soy tan ordinaria que no encuentra interés en mi?.
No había dado cuenta que ya habían pasado dos horas, haci que salí del gym de mi casa y me dirigí a la ducha.
Cuándo salí de aquella ducha relajante, me dirigí a los vestidores para ponerme un conjunto que combinaba a la perfección y me hacía ver sexy.
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Después de cambiarme decidí llamar a mi hermana, para ir la centró comercial.
Rim, rim , rim.
-Hola her...ma..ti..na- dijo con una voz agitada.
-Dios Bean ¿interrumpo algo?- Dijo con inosencia, y vergüenza.
-No hermanita ya habíamos acabado- dijo de una manera superior.
-Lo siento de cualquier forma, llamaba para saber ¿Si querías al centro comercial?.- dije
-Uyy hermanita, hoy volé hacia Italia no podré- dijo en forma de burla casi impresectible.
-Oh está bien, divierte- dijo de una manera muy linda.
-Lo haré hermanita- dijo sengundos antes de colgar pero de fondo se había echado la voz de un hombre que creía reconocer pero no lo logró, y la llamada acabo.
Me acabé de alistar y sali de casa, rumbo al centro comercial.
Narra Alexander :
Después de volar casi 6 horas fuí al hotel donde me hospedaria junto con Hades y Bean.
-Estas seguro de querer traicionar a tu mujer con su hermana, vamos Alex esto es muy fuerte- la voz de Hades me interrumpió justo antes de entrar atrás de Bean a mi recámara.
-Desde cuando de interesa con quién la engaño, nadie más que tu sabes que Bean no será la primera- dije de manera sarcástica y fría.
-Lo se desde la luna de miel, pero es tu esposa y a quién estás a punto de follar es su hermana, no te lo perdonará jamás- dijo tratando de persuadirme.
Pero sinceramente si se enteraba o no, no era algo que me importase, no la amaba solo es un contrato más como los muchos que hago al año, siemplemente este tenía un culo bonito.
