•Atada a su sombra.•

Capitulo 7.

Seis meses después.

Tenía ya 8 meses de embarazo, mi vientre había crecido bastante a decir verdad, también sabía que mi bebé, sería una hermosa niña.

Alexander cada día era más frío y secó, solo hablábamos de nuestra hija, me acompañaba a cada cita médica, cumplía mis antojos, incluye mi deseo sexual, pero cundo se trataba de mostrar interés en mi, se comportaba de una manera cruel y iriente, mi bebita era lo único que a veces evitaba que me derrumbará.

El mostraba amor he interés en nuestra hija , lo había convencido de tomar algunas fotos, miéntras aún estaba embarazada.

De verdad se había enamorado de nuestra bebé, y amaba verlo mientras le hablaba a mi vientre de una manera cálida y cariñosa.

Aparte mis pensamientos, y decidí salir de la ducha, mi bebé pronto nacería y su habitación estaba casi lista, solo necesitaba compara algunas cosas extras y estaría perfecto.

Camine con dirección al vestidor, decidí obtener por un look bonito y casual.

Salí del vestidor, y el chófer me llevo al sentro comercial en el centro de Inglaterra.
Todas las cosas para bebés que había, me volvía loca, quería llevar todo, compré una carriola diseñada especialmente para mi bebita, al igual que el porta bebés.

También compré unos biberones y chupetes, - era mamá primeriza no quería correr el riesgo de fallar en algo-.

Acabe las compras, mire el reloj en mi muñeca marcaban las 3:42 pm, subí al auto y el chófer me llevo a casa.

Al llegar ayudantes de la casa se encargaron de meter las bolsas llenas de prenda y los maletines dónde se encontraban la correola, y el porta bebés.

Fui directo a la habitación que habíamos preparado para la bebé, y acomode todo lo que se incluirá a ella.

(Imágenes de la habitación y clóset de la bebé).

Cuando había acabado de organizar y acomodar todo, fui a ponerme cómoda ya que no soportaba mucho tiempo la ropa.

Me dirigí a la cocina, moría por fresas con nuetella, pero no alcance a llegar a la cocina ya que sentí una horrible dolor en mi vientre.

-Ahh ahh- gemi de dolor.

Poco a poco el dolor desvaneció, pero antes de recuperarme el dolor volvió a invadir mi cuerpo.

-Ahhh dios duele- me queje.

-Aitanaaaaaaaaa- grite.

Mi bebita ya estaba por nacer, y necesitan llegar al hospital.

-Señora...a,- no alcanzo a decir nada, ya que la interrumpí.

-La bebé ya viene, trae a Rayan AHHHH- dije mientras sentía el dolor nuevamente, Alexander no estaba a mi lado y lo necesitaba.

Llame a rayan quien era el chófer de la casa, necesitaba que me llevará al hospital, con cuidado me tomo es sus brazos y me acomodo en el aciento del vehículo.

Habíamos llegado ya.

-Contacta a mi esposoooo AHHHHH- grite

- El hospital está en eso, pero el Señor no atiende el celular, y  de su celular tampoco lo atiende- decía Rayan a un lado de mi.