ScarletWidow One-Shots

LAGOS

Pov Wanda

Fuego.

Una explosión.

Gente gritando.

Es mi culpa.

Me desperté repentinamente, sudando y con la respiración agitada.

Ha sido solo una pesadilla.

Pero no lo había sido.

Había matado a gente.

Era peligrosa, por mucho que dijeran lo contrario.

La puerta de mi habitación se abrió de golpe, dejando ver a Natasha con una pistola en la mano.

Después me miró y se acercó rapidamente en mi cama.

-Hey estas bien?- pregunto con voz preocupada.

-Solo una pesadilla- contesté.

Ella se sentó a mi lado.

-Quieres hablar?- preguntó de nuevo.

-Es mi culpa- dije notando lágrimas en mis mejillas- yo maté a esas personas en Lagos-.

-No vuelvas a decir eso Wanda, no es tu culpa. Salvaste al equipo y a la gente del mercado. No hay victorias sin un sacrificio.-dijo y pasó un brazo por mis hombros abrazandome.

-Se que me tienen miedo, hasta yo me tengo miedo, pero no quiero hacer nada malo al equipo- dijo cerrando los ojos con fuerza.

-Le tienen miedo a tus poderes porque no saben nada de ellos, porque saben que eres poderosa y que no podran controlarte. Quieren buscar la forma de controlarte, pero no los voy a dejar- dijo con seguridad- lo prometo- me dió un beso en la cabeza- ahora vamos a dormir- se tumbó conmigo, abrazandome.

-Buenas noches Nat- dije.

-Buenas noches brujita- contestó.

Después de eso dormimos.

A la mañana siguiente me desperté sola, mieré la hora y ví que era tarde.

Bajé a la cocina, cogí una manzana y me dirigí al salón.

Me senté en un sofá y empecé a comer.

Escuché pasos por detrás mía y cuando miré era Nat.

Se me acercó y me sonrió.

-Hey tenemos que ir a la sala de conferencias, ha venido alguien importante- dijo y yo asentí.

Me levanté y la seguí.

Al entrar en la sala todo el mundo me miraba.

Yo agaché la mirada y me senté.

El hombre que se había presentado como Ross emepzó a hablar, diciendo que éramos peligrosos y que necesitabamos ser controlados, pero mientras hablaba solo me miraba a mi.

Me empecé a sentir muy incomoda cuando empezó a enseñar fotos de Sokovia, Lagos etc.

-Ya vale, es suficiente- dijo Nat al ver como apartaba la mirada.

Ross quitó las imagenes y siguió diciendo lo mismo.

Habló de unos acuerdos, llamados los acuerdos de Sokovia.

Sinceramente lo único que sabía es que no quería ser controlada por nadie.

Cuando Ross se fue, la sala se quedó en silencio por unos minutos.

Después hablo Steve.

-No pienso firmar esto- dijo- somos libres de tomar decisiones ahora, si nos controlan puede que lleguemos tarde- terminó.

-Pero podremos hacer algo- contestó Tony.

-Seremos controlados y no lo voy a permitir- dijo Steve.

-Puede que lo necesitemos- contestó Stark.

-No sabes lo que nos harían si nos controlaran- contratacó Steve.

-Bueno que hagan lo que quieran- dijo Tony con la voz más elevada- pero mientras podamos hacer algo para ayudar, me vale- dijo encogiendose de hombros- ademas algunos necesitamos ser controlados- me miró y yo agaché la mirada.

-No dejes el peso caer en ella, sabes que no es su culpa- contestó Steve levantando la voz.

-Esque no lo ves! Es como si dejaramos una bomba nuclear a manos de un niño, solo causa destrucción!- gritó Stark.

Lágrimas empezaron a formarse en mis ojos. Era un peligro para el equipo, para las personas y para mí misma.

-Solo es una niña Stark!- gritó Steve.

Nat al ver como yo temblaba se me acercó y me tomó la mano.

-Parad ya!- gritó Nat haciendo que se callasen- esque no veis lo que haceis?- dijo y sentí todas las miradas posarse en mí.

-Se lo que soy- empecé a hablar yo- se que soy peligrosa, que no controlo mis poderes, que solo soy un estorbo, que soy un monstruo- levanté la cabeza con los ojos llenos de lágrimas- pero yo no pedí nada de esto y lo siento si causo problemas, se que este mundo estaría mejor si yo no estuviera aquí- me levanté y me fui a mi habitación.

Pov Nat

Escuchar decir eso a Wanda me partió el corazón.

En cuanto se fue mire a Tony con una mirada asesina.

-Lo hemos comprobado Stark, no ves mas alla de tus propias narices. Esa chica lleva toda su vida sufriendo, sus padres, su hermano, su pais..., lo perdió todo y ahora nos ha encontrado a nosotros, su nueva familia.-solté indignada- Solo quiere ser feliz, tener a gente que la quiera y que no le tenga miedo por sus poderes. Es solo una niña y ya es menos egoista que tú- me levanté de la silla y me dirigí a la puerta- que yo no te escuche decir algo más de ella o te mataré tan lentamente que me suplicaras que te mate- amenacé antes de salir y dirigirme a la habitación de Wanda.

Toqué a la puerta y al ver que nadie respondía la abrí.

Cuando entré la ví en su cama, hecha una bola sollozando.

Me moví hasta estar a su lado atrayéndola a un abrazo.

Ella me abrazó de vuelta y pude notar como mi camiseta se mojaba por sus lágrimas.

Me senté allí, con ella abrazada a mí y acariciandole el cabello hasta que se calmó.

Ví que se quedó dormida y me tumbé hacia atras, con ella sobre mí abrazondome.

Desde ese día me prometí que la cuidaria, costara lo que costara.

Porque la quería con todo mi alma y nadie le volvería a hacer daño.