Agresivo [l.s]

twenty two

Louis bufó exasperado, su paragua estaba hecho un lío por el viento y la fuerte lluvia y sus pantalones estaban algo empapados. Por suerte su casa estaba cerca, y estaba seguro de que podría largarse a llorar de felicidad al verla; estaba cansado, hambriento y con ganas de recibir los besos y abrazos de su madre después de todo un día estudiando y haciendo exámenes.

Ya era de noche, había estado estudiando en la casa de Liam junto a Tyler y Niall, sus exámenes se acercaban cada día más y Louis quería entrar en una buena Universidad.

"Maldito paraguas" Murmuró entre dientes con fastidio. La lluvia era mucha y empeoraría en cuestión de momentos, Louis quería apresurarse para ir a su casa lo más pronto posible, bañarse en su bañera repleta de agua caliente y burbujas y usar su pijama suave de invierno.

Sonrió sin poder evitarlo al ver a su casa a lo lejos, al final de la calle. Caminó aumentando el ritmo, sus pequeños pies chapoteaban en los abundantes charcos y salpicaban sus deportes de barro. Sin embargo, su sonrisa se rompió al ver a Harry sentado en uno de los bancos, totalmente empapado e intentando encender su cigarrillo de manera frustrada.

Harry tenía su cabello empapado hacia atrás; estaba completamente mojado de arriba a abajo y Louis se preocupó. ¿Qué haría un chico de dieciocho fuera de su casa, en mitad de una fuerte lluvia, tratando de fumar un cigarrillo y sin el aparente ánimo o prisa por volver a casa?

Claramente un chico que tiene problemas.

"¿Qué haces ahí, bajo la lluvia? ¿Es que te das duchas al aire libre ahora?" Louis habló, alzando la voz para que lo oyese por encima de la ruidosa lluvia. Harry levantó la mirada sin inmutarse, su mano estaba sobre su cigarrillo apagado como si fuera un techo. Los ojos de Harry vieron cómo Louis parecía temblar por el frío mientras de alguna manera se abrazaba a sí mismo y a su vez agarraba el doblado paraguas.

Harry rió hueco y sin ánimo, más amargura que una risa sin gracia "Vete a casa, Louis, estás temblando e interrumpiendo mi baño"  El mechero chasqueaba y soltaba chispas, chispas que se apagaban al instante por la humedad del ambiente.

Louis parpadeó lentamente "¿Estás bien?" Fue lo único que pudo murmurar. Harry gruñó frustrado al ver que sería imposible  encender esa mierda adictiva que era lo único que lo calmaba en estos momentos.

"Lo suficientemente bien como para estar aquí bajo la lluvia en vez de borracho y peleando en un bar"

El cuerpo del ojiazul estaba temblando notablemente por el frío, y Harry sabía que tan solo sería cuestión de tiempo que eventualmente Louis se marchara a su casa. Todos lo hacían al fin y al cabo, abandonarlo y darle la espalda; Harry había encontrado como amigos para ser consolado al alcohol y el cigarro, sus más leales amigos.

"¿Puedo sentarme contigo?"

La pregunta de Louis hizo que sus cejas se fruncieran muy notablemente, desconcertado. Levantó la mirada hacia sus ojos de nuevo, y no vio mentira o falsedad ahí; solo Louis temblando de frío y esperando una respuesta por parte de Harry. "El banco está mojado, mi chaqueta también. No puedo dejártela para que no pases frío, mejor ve a casa y abrígate"

Louis se encogió de hombros y musitó, "No me importa"  Antes de que Harry pudiera reprochárselo, el menor ya se acercaba a Harry y se sentaba a su lado "¿Ha pasado algo malo?"

"¿Crees que uno está en pleno Noviembre, en medio de un diluvio como este y está bien?" Harry se burló, Louis rodó los ojos y le golpeó el hombro.

"Estaba tratando de ser amable contigo, idiota"

"No hace falta que seas amable, prefiero que seas Louis simplemente" Harry murmura, Louis no entendió muy bien a qué se refería, pero de todas maneras no preguntó. "Mis padres están discutiendo como la mierda, así que salí a por una cerveza y a fumar un rato. Pero el bar al que quería ir ha cerrado y se ha puesto a llover, así que tampoco he fumado. Y no puedo volver a mi casa"

"¿Por qué?" Cuestiona Louis, sosteniendo el paraguas para los dos, aunque Harry esté empapado de pies a cabeza.  "¿Por qué no puedes?"

"Porque no quiero"

"¿No quieres ir con tus padres?"

"No vivo con mis padres, vivo solo. La beca de la Universidad se ha adelantado por mis buenas notas, me comprado un apartamento cerca del centro" Contestó Harry con simpleza "Fui a la casa de mis padres a recoger unas últimas cajas"

"¿Así que prefieres estar bajo la lluvia, solo y como un perro a estar en tu casa?"

"Sí"

"¿Por qué eres tan raro?"

"¿Por qué no paras de hacer tantas preguntas tú?"

"Soy curioso"

"Bueno, yo soy raro entonces"

Ellos quedaron en silencio, un silencio cómodo. Harry miraba tranquilo el asfalto mojado y Louis miraba a Harry, percatándose de las masculinas facciones de él. Harry era mucho más masculino, fuerte y alto que él sin duda. "¿Así que pasarás la noche aquí bajo la lluvia, no irás a tu casa? Tu compañero de piso puede preocuparse"

"No quiero ir porque no quiero sentirme solo. Estar solo entre cuatro paredes me estresa" La respuesta salió con normalidad, sin pena ni tristeza. Sonó a una voz acostumbrada a ese sentimiento, nada nuevo o irrelevante. Louis se sorprendió, porque no era una respuesta que esperase "¿Y qué pasa contigo?"

"¿Qué pasa conmigo?" Repitió Louis desconcertado.

"Sí, ¿vas a mojarte bajo la lluvia estando con el chico al que odias solo porque está deprimido?" Inquirió burlón, aunque no había burla realmente, más bien lástima disfrazada en una sonrisa socarrona.

"Yo no te odio.." Murmuró sincero, porque era cierto que no lo odiaba. Era más, le atraía desde hace tiempo; tal vez por eso descargó todo ese amor comprimido en discusiones, Harry adoraba hacerlo enfadar.

"Aún recuerdo ese lápiz azul tuyo en mi ojo, Tomlinson"

"¡Te dije que no quería darte, se lo pasaba a Tyler!"

"Dudo que tu lápiz se desviara unos sesenta grados"

"¿Ahora de repente eres bueno en mates?"  Bufó irritado sin encontrar argumentos con los que defenderse. Harry sonrió al verlo bajar la mirada tímido.

"Tengo que serlo, estoy estudiando arquitectura."

"En ese caso me encargaré de que no hagas mi casa"

"Sabotearé la obra que cualquier empresa te esté haciendo"

Louis soltó una risa de lo absurdo que había empezado a terminar esa conversación que comenzó como una charla seria. Harry sonrió aún más al escuchar la risa de Louis, esa que sonaba tan bien en sus oídos como al melodía más alegre que había escuchado.

"¿Sabes?" Louis lo llamó "La tormenta empeorará por la noche, puedes venir a mi casa a dormir si así no te sientes solo.."

"¿Me estás invitando a una cita en casa, de esas en las que terminan follando?"

"¡Oh por Dios, por supuesto que no, Harry!" Louis golpeó sus hombros avergonzado y nervioso, Harry se carcajeó y pidió disculpas "Idiota"

"¿Estás seguro de que quieres que moje tu alfombra de bienvenida? Tus padres pueden confundirme con una zarigüeya empapada"

"Te conozco desde los dieciséis, has venido a mi casa muchas veces ya. Mi madre no es así, ella adora al que sea, hasta al cartero amargado"

"Sí, tu madre es muy simpática. El otro le día la vi ofreciéndole un trozo de tarta al barrendero"

"¿Eso es un sí entonces?" Louis murmuró.

"Claro," Harry contestó "simplemente no me patees las bolas mientras dormimos"

"Quien sabe, tal vez se me escape una patada esta noche accidentalmente"

"Si haces eso, te tiraré al suelo, enano"

"Si me haces algo, gritaré"