LIKE A PRAYER│DEAN WINCHESTER

━━ 08. fake smile

◖𓈈﹗ ﹙ capitulo ocho ﹚
❛ ▬▬ SONRISA FALSA. . . ❜

                   Conducir debajo de una lluvia imperiosa por las calles de la ciudad parecía ser una de las cosas que Dean disfrutaba tanto como las carreteras solitarias acompañado solo por la luz de la luna sobre sus hombros. Los árboles se agitaban de la misma forma que el cuerpo del cazador temblaba después de horas bajo la lluvia. Había visto sus labios morados y la nariz enrojecida, se aferraba a al volante y de vez en cuando cambiaba de estación de radio buscando una canción que complaciera sus oídos. Lilith lo tomó de la mano cuando el semáforo estuvo en rojo y curó su cuerpo espantando momentáneamente el frío y evitando alguna enfermedad consecuente.

      —¿Nuevo cabello eh? —se dirigían al motel dónde estaban Sam y Bobby—. ¿Tratando de ser un elfo? ¿Y tus cejas qué? ¿Se fueron a por cigarrillos y no volvieron?

      Eso la hizo musitar una sonrisa, Dean era un tonto y no podía creer que había visto El Señor de los Anillos y luego tuviera la audacia de llamarla Nerd.
      —¿No te gusta?

      —Nah, te queda lindo a ti.

      —¿Te molesta si enciendo un cigarrillo? —la ansiedad estaba matando su mente Ella sabía que pronto se aproximaría una discusión sobre demonios y poca sería la verdad que diría. Lilith no esperó a una respuesta, abrió su bolso y rebuscó entre heroína y otras drogas el paquete de cigarrillo. Bajó la ventanilla para que nuevo aire entrara.

      —Así que están de vuelta... y las drogas. Lilith... —musitó como si le hubieran sido concedido la verdad absoluta—. ¿Qué estabas haciendo en el infierno? Te vi, eras tú.

      —Quería verte —respondió dando una calada al cigarrillo y descargando el aire afuera de la ventana. Las luces pasaban muy rápido y los carteles neones con publicidades le parecían un mejor escenario que el rostro de Dean.

      —¿Cómo hiciste? —Ahora, el cazador no estaba para rodeos o que la mujer buscara evitar mentirle.

     —Brujería.

      —¿Vamos a empezar con mentiras?

      La garganta se le había cerrado junto con una cabeza latente y dolorosa, desesperada por volcarse en la droga que estaba en su bolso, resguardada y lista, esperándola paciente porque estaba segura que volvería con la boca babeada y el corazón acelerado. La mujer deseaba ser capaz de manipular el tiempo de una forma que sobrepasaba los límites del poder de cronoquinesis de las brujas naturales. Ser la señora del tiempo absoluto, sin principio y fin. Tomaría su cuerpo del cabello y lo ubicaría unos años en el futuro para ahorrarse este tipo de problemas con Dean. Viviría en un tiempo-espacio en el que finalmente era feliz o, simplemente, repetiría una y otra vez los diecinueve años de su vida antes de la desaparición de su madre.