"Cuando fui conciente de ti" (Bakugo y Tsuyu)

"TÚ SÍ ME GUSTAS"

Los combates siguieron y terminaron, todos se dirijan a sus vestidores cuándo Bakugo detuvo a Tsuyu.
-Tenemos qué hablar (dijo serio)
-¿Qué sucede Bakugo chan?
-A-a solas.

Esto hizo que tanto Deku como Uraraka se sorprendieran, pues nunca habían visto a Bakugo titubear.

-Iremos a cambiarnos Tsuyu chan, ven cuando termines, (se despedía Uraraka llevándose a Deku quien seguía en shock por ver a Kacchan titubear)
-¿De qué quieres hablar Bakugo chan?
-Tsk, lo de hace rato, en el combate, no te hagas ilusiones, yo, yo sólo quería la estampa. (Desviaba la mirada de esos grandes ojos de la chica)
-Mmm, eso lo sé kero, tú nunca tocarías a una chica así, y mucho menos a mí, sólo estaba bromeando allá. ¿Pero por qué viniste a decírmelo? Creí que lo dejarías y ya.
-¿Uh? Sólo no quería que te hicieras una idea errónea, n-no soy un pervertido. (Eso último lo dijo casi para sí mismo)
-Kero, no pienso que lo seas, lo que dije sobre ti allá adentro fue verdad, eso es todo lo que pienso de ti, no eres un pervertido, eres un chico muy agradable Bakugo chan. (Sonreía de una manera pura y tranquila)
-Tsk, no mientas, todos piensan que soy difícil de tratar, no me toleran, por eso me repelen. (dijo algo decaído)
-Mmm, creo que en parte es tu culpa, aunque sólo la mitad, la otra mitad es porque no se toman el tiempo de conocerte, ahí tienes a Kirishima, es un buen ejemplo, kero.
-¿Eh? Ese imbécil es un caso perdido, tú no me agradas, así que no tendría que agradarte yo a ti, estúpida.
-Pero tú sí me gustas Bakugo chan, kero (habló ingenuamente)
-¡¿Eh?! ¿Q-qué demonios dices? ¿Cómo que g-gustar? ¿En qué sentido? (Dijo algo sonrojado, no podía creer que una rana lo hiciera sentir nervioso)
-Veamos, creo que primero fue querer como amistad, pero...

Bakugo sintió ese pero como si fuese tan pesado y pausado, sintió su corazón latir algo incómodo.

-Pero desde hace unos días creo que me gustas sentimentalmente hablando Bakugo chan, no estoy segura, nunca me sentí así por otra persona, nunca tuve interés en alguien más kero.

Bakugo se quedó callado.

-Como dijiste, no hay necesidad de que te agrade, mucho menos que me respondas esto kero, ah, es liberador decirlo, gracias Bakugo chan, creo que ahora me gustas mas, kero. (Dijo sonríendole calmadamente)
Bueno, nos vemos, fue divertido pelear contigo hoy, me sirvió bastante. (Se preparaba para irse cuando sintió el agarre de la mano del chico)
-¿Kero?
-Hoy, yo, esto... ¿Puedo ir a tu habitación?
-¡¿Kero?! ¿Para qué Bakugo chan? (Dijo ruborizada y sorprendida)
-Tsk, la charla no se termina hasta que yo lo diga, ya es tarde y te tienes que cambiar, ahg, por eso, sí, por eso... (Miro nervioso a la chica y vio que esta tenía un pequeño moretón en su mandíbula) -t-también, yo te hice este, creo, debo hacerme responsable (rozó casi sin tocar la mejilla de Tsuyu)

Tsuyu se sentía muy nerviosa, no era el Bakugo que conoce, y eso no podía ponerla aún más nerviosa, solamente se limitó a asentir con su cabeza y se retiró dando saltitos.

-Mierda, esa anfibia estúpida. (Tapó su rubor con su mano derecha)

Dieron las 9:00 de la noche y casi todos se encontraban en sus habitaciones, mientras algunos estaban viendo televisión en la sala de estar, entre ellos Kirishima y Bakugo, a Kirishima se le hacía raro que este estuviste tan despierto a esa hora, no era normal.

-¿Bakugo? ¿No tienes sueño?
-Mm, algo.
-¿Por qué no te haz ido a dormir?
-¿Qué te interesa pelo de mierda?
-Oye, sólo quería saber, ya suenas como el Bakugo normal, ¡Bueno! Yo sí me iré, mañana toca entrenamiento matutino. (Se levantó alzando sus manos)

-~Creo que ya es buen momento~ (pensó para si mismo, se levantó y se dirigió con cuidado al cuarto de Tsuyu, cuando llegó a la puerta se detuvo, como si quisiese huir, pero se armó de valor y tocó)

Tsuyu abrió la puerta, esta ya estaba en su típica ropa para dormir, que era una blusa holgada y larga, que sí no fuese porque traía unos shorts pareciera que esta no traía nada.

-Pasa, Bakugo chan.
-Mm.

Bakugo entró y cómo se lo indicó Tsuyu se sentó en el suelo, miraba la habitación, la verdad la imaginaba más rara, creía que ahí adentro tendría un estanque o algo pantanoso, pero era una habitación normal, tranquila, olía bastante bien.

-¿Quieres algunos bombones? Sato San me los regaló cuando hizo demasiados para sus prácticas. (Le acercó una bolsita color rosa para que se sirviera)
-Tsk, no es sano comer azúcar a estar hora.
-Yo creo que son ricos, comeré otro más. (Le hizo caso omiso a su comentario)
-Ah, cómo quieras, ¿Dónde tienes el botiquín de primeros auxilios?
-¿Para que lo quieres Bakugo chan?
-No es obvio, voy a tratar tus heridas.
-Mmm, pero no estoy tan herida, kero.
-¡cállate y dime dónde está, mierda!
-Justo ahí, abajo de la cama. (Señaló haciendo que este lo tomara y buscará entre la caja algún desinfectante y banditas)
-Ven acá, hizo que se sentara en la cama mientras el seguía en el suelo, así podría ver mejor su mentón.
-Mira hacia arriba, tienes otro rasguño en el cuello.

Tsuyu obedeció y se quedó quieta ante las órdenes de Bakugo. Mientras este en un olvido se quedó admirando su cuello, era muy delgado, su piel era tan suave y blanca, ¿Todas las chicas eran así? O tan sólo era esta tan irreal, siguió pensando en eso hasta que un pensamiento por su cabeza paso, ~¿Cómo sería besarlo?~ tras esto se dió cuenta y saltó hacia atrás algo nervioso.

-¡Kero! ¿Qué sucede Bakugo chan?
-N-nada, ya acabé, sólo, trata de no tocarte demasiado. (Trataba de ocultar su sonrojo)
-Muchas gracias Bakugo chan, mi héroe. (Sonrió y ladeó su cabeza un poco)

Este gesto, el decirle que era su héroe le dió un vuelvo al corazón, y estando aún hincado en el suelo entre a ella mandó todo a la mierda y se acercó despacio a su cara.

-¡Mierda! N-no digas esas cosas tan a la ligera, harás que haga cosa extrañas.
-¿Kero? (Tsuyu estaba nerviosa, veía como este se acercaba a su rostro pero no le importó, incluso ella se acercó más)
-S-si no quieres, es mejor que me des un buen golpe.
-Pero s-sí q-quiero Bakugo chan. (Habló muy sonrojada, lo que hizo que Bakugo se sonrojara aún más porque todo este rato él era el único que se ponía extraño, cuando ella seguía normal, con esa estúpida reacción toda neutral)
-Bueno, ven.

La tomó de la barbilla hacía abajo mientras acerbaba sus labios a los de ella, comenzando un leve beso, era una piel tan suave, no se comparaba con sus ásperos labios, no, los de ella eran delicados y finos, empezó a sentir placentero presionarlos contra los suyos y tan rápido como pudo el beso empezó a sentirse húmedo, lo que dió paso a qué la lengua del chico empezara a lamer sus labios.

-Y-yo no sé, c-cómo Bakugo chan (jadeó un poco separándose de él) -no sé, cómo b-besar así.
-¿Eh? yo tampoco, nunca había besado a alguien. (Dijo limpiándose un poco de saliva del labio)
-¿Kero? Pero lo haces tan bien. Creía que eras bastante popular con las chicas. (Dijo sorprendida)
-¿Ah? JAJAJA, así que te está gustando, ¿Mh? No, la mayoría me odia, como sea; tsk.
-Eres un presumido Bakugo chan.
-Bueno bueno, solamente déjame, déjame be-sar-t (no acabó de decirlo cuando poco a poco se volvía a unir a ella con sus bocas)

-Bakugo chan, ¿Esto significa que correspondes a lo que siento? (Preguntó nerviosa al posible rechazo)
-Tsk, ¿Qué acaso tengo que demostrártelo de nuevo? (Dijo burlón)
-Sí por favor.
-¿Eh? Veo que ya perdiste la timidez uh, veamos cuántos más puedes aguantar.
-¡Kero!

Se dieron un beso más para después quedarse mirando el uno al otro por un buen rato hasta que se hizo más tarde y Bakugo tuvo que irse, no sin antes besarla un poco más en la puerta mientras lo despedía.

Estaban en un nuevo comienzo, comienzo pequeño a lo enorme que se venía, pero al menos estaban empezando bien.