¿Quieres ser mi novia?

89 21 12
                                    

Los personajes no me pertenecen son de la gran Rumiko Takahashi esto es sin fines de lucro solo diversión por y para los fans.

Para considerar: este fics es AU, una lectura ligera y divertida con tintes picantes. Si no es de tu agrado abstente de leer.

—O—

Hoy oficialmente se cumplían dos meses desde que Akane y yo... bueno desde perdí mi castidad. Me sentía pleno, vivía solo, tenía un trabajo acorde a mi profesión, podía ahorrar para mis planes futuros, mi vecina ahora era algo más... y es precisamente ahí donde me quiero detener.

¿Qué somos? Fue lo que pregunté, Akane me sonrió y con un tímido beso en los labios respondió. Pero no era suficiente, yo quería algo más, quería presumirla al mundo incluso a mi madre quien sufriría un micro infarto cuando le dijese que la misma chica que la echó de casa hace un mes atrás es alguien muy importante en mi vida.

Pero estaba lleno de temores y mis amigos se dieron cuenta de ello...

-Tú solo dile lo que sientes— decía Ryoga atiborrándose la boca de papas fritas.

-Saotome, hazte de rogar no le des todo servido en bandeja— discrepaba Mousse bebiendo de su cerveza.

-No le hagas caso a este idiota, tú solo sigue a tu corazón— arremetía un romántico Hibiki.

-Es que ella sabe lo que siento, pero quisiera que sea lo que sea que tengamos tuviera un nombre— dije pensativo.

-Solo haz una propuesta romántica — decía el ojimiel.

-Que no, ella ya se acostumbró a tenerte al lado... solo toca a la puerta y corres por ella— agregaba Mousse.

-Yo la quiero de verdad, si ella me necesita claro que correré y si pudiera volar también lo haría— dije firme.

-¡Esa es la actitud!--- exclamó Hibiki chocando los cinco conmigo— tú no sabes nada del amor, ellos se quieren solo que no comenzaron como tradicionalmente se espera— inquirió Ryoga.

-¿Cómo es eso? — pregunté curioso.

-Bueno tú y ella comenzaron por el sexo— dijo muy campante mi buen amigo.

-Por eso digo, ella cree que eres su máquina sexual— hablaba Mousse.

-No seas idiota, Akane no es así— contesté molesto.

-No tiene nada de malo el hecho de que se comieran el postre antes de pasar por el romance— dijo Ryoga — pero ambos se han ayudado de alguna u otra forma, como cuando Akane te defendió de tu jefa acosadora y abusiva o cuando tú le ayudaste a estudiar y recuerdo cuando me dijiste que había corrido a tu madre de tu departamento sin chistar...

-Desde ese día que no he visto a Nodoka— dije más para mí.

-Pues aunque no parezca ella ayudó a que tu madre deje de verte como un niño porque evidentemente no lo eres— concluyó Hibiki.

-Tiene razón es buen punto— agregaba mi amigo cegatón.

-Bien, dejaré mis dudas de lado y le preguntaré— dije poniéndome de pie.

-Y si dice que ¿no? — habló el chino preocupado.

-Todo será como siempre, seguiremos siendo vecinos y...

-Todo saldrá bien, prepara una cena o invítala a un lugar bonito— agregó el ojimiel.

Y con eso presente me fui a dormir, esa noche mi mente estaba llena de emociones aunque bien en el fondo existía esa posibilidad quería confiar en que sería diferente.

Secretamente EnamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora