Secretamente Enamorado

Conquista

Los personajes no me pertenecen son de la gran Rumiko Takahashi esto es sin fines de lucro solo diversión por y para los fans.

Para considerar: este fics está clasificado para mayores de edad, se encontrarán con humor y muchos tintes picantes. Si no es de tu agrado abstente de leer.

Disfruten la lectura...

Ahí iba yo, sentado detrás de la mujer que me traía babeando hace años... aun no me lo creía, conseguí el empleo y una cita que nunca imaginé. La abrazaba como si fuese mi único salva vidas.

La brisa pegaba contra mi rostro y pronto estuvimos frente a nuestro edificio, ella me sonreía divinamente y es que las mejillas me ardían de pura emoción, sería el día, el gran día en que este Saotome atolondrado dejaría la pureza... bueno la castidad atrás.

Estaba tan nervioso que por un instante creí perder las llaves, las manos me sudaban y ella esperaba muy casual a mi lado. Al fin pude introducirla en la cerradura y abrir la méndiga puerta...

-Oh vaya tu apartamento es más soleado— dijo notando la calidez que había dentro.

-Bueno lo que sucede es que a la hora punta el sol...— ella me vio con atención y me explicación se fue al carajo, me quedé en silencio como un bobo...

-¿Estás nervioso? — dijo acercándose, solo asentí.

-Sabes algo, esto lo podemos dejar aquí no tengo problemas— habló muy normal.

-No, en realidad es algo que deseo hacer— dije rascando mi nuca.

-Es que no sé si deba ser yo la persona con la que compartirás eso ¿entiendes? Es decir no me malinterpretes, yo tengo experiencia y besas bastante bien para ser tu primera vez solo que no quiero que te arrepientas.

-Yo... eres la primera chica a la cual beso— dije avergonzado— sé que estoy algo grande ya para decir esto pero no tuve oportunidad en la universidad de conocer chicas— dije serio.

-Ok, hagamos algo ¿te parece? — puse toda mi atención, tomó de mi mano y me sentó en el sofá en el mismo lugar que por la mañana me había auto complacido pensando en ella— esto debe fluir... no ser tan estructurado, es algo que se siente ¿entiendes?

-No — respondí asustado.

-¡Oh por Kami! No seas tan cuadrado, solo déjate llevar como lo hiciste hace un rato— dijo sentándose a mi lado, sus ojos color chocolate brillaban y yo me derretía en ellos.

Me atreví de nuevo, la besé pero torpemente aunque ella me siguió el ritmo y lentamente nos fuimos echando sobre los cojines del sofá, mi mano derecha acarició su fina y delicada silueta me separé de sus labios unos instantes y ella se sonrojó.

-No me veas así—dijo tocando sus mejillas, entonces un retorcijón de estómago me incomodó, fruncí el ceño y ella lo notó — ¿Qué sucede? — preguntó en el momento en que un deseo por vomitar me acorraló, apenas alcancé a levantarme y llegar al baño.

Todo lo que bebí en el local de strippers estaba fuera de mi estómago en cosa de segundos, ella tocaba a la puerta y no podía ni responder me sentía pésimo.

Luego de un buen rato salí de allí tan blanco como una hoja de papel, ella me vio con pena...

-¿Tampoco bebes?

-No

-Ven aquí, dijo llevándome hasta mi alcoba ¿acaso ya la había visto? Me pregunté mientras caminábamos por el pasillo, me ayudó a recostarme y me arropó — duerme y recupérate — dijo muy gentil.