Capítulo 138: Solo dilo

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Lu Xingzhi resopló. Podría haber desperdiciado todos sus años siendo soldado si ni siquiera hubiera podido arrojar algo precisamente desde esa distancia.

Bajó la cabeza y encendió un cigarrillo. Lu Xingzhi luego se apoyó contra la puerta casualmente con una mano en el bolsillo y tomó una bocanada con la otra mano sosteniendo el cigarrillo. Aunque sus ojos estaban en el suelo, su atención estaba en Zhou Weiqi.

Zhou Weiqi no conocía bien la personalidad de Jiang Yao. Por eso no pudo encontrar la manera de hacer que Jiang Yao dijera la oración que quería que dijera incluso después de meterse con ella durante tanto tiempo.

Notó que el que estaba fumando en la puerta lo miraba con impaciencia por segunda vez. Zhou Weiqi tragó saliva y murmuró en su corazón. Lu Xingzhi era tan tacaño. Solo tuvo unas pocas palabras más con su esposa, pero Lu Xingzhi lo miró como si fuera a robarle a su esposa.

"Jiang Yao, ¿echas de menos a Xingzhi?" Zhou Weiqi pensó un poco y decidió preguntarle abiertamente. "Solo di que lo extrañaste, no está cerca y no se lo diré si lo dices".

"¿Ya no quieres tu coche?" Jiang Yao no pudo contenerlo más y se rió. "¿De verdad planeas regalarme tu coche?"

"¿Eh?" Zhou Weiqi no esperaba que Jiang Yao mencionara el automóvil de repente. Después de pensar por un momento, asumió que Lu Xingzhi le había contado sobre la apuesta cuando estaba hablando con ella por teléfono. Por lo tanto, Zhou Weiqi ya no trató de ocultarlo, pero todavía tenía algo bajo la manga.

El plan de Zhou Weiqi era jugar a la víctima y decirle que estaba teniendo dificultades para quedarse con la familia Zhou. Se describió a sí mismo como un pobre cuyos padres ni siquiera se preocupaban por él. Había querido mudarse, pero su malvada madrastra ciertamente se aferraría a su dinero y nunca permitiría que su padre comprara una casa para que él viviera solo. Solo entonces le dijo la razón por la que quería la casa de Lu Xingzhi en Golden Harbour para vivir.

Después de escuchar lo que Zhou Weiqi tenía que decir, Chen Xuyao ​​pensó que Weiqi era tonto. Quizás su cabeza había sido golpeada por el panel de la puerta antes o se había lastimado la cabeza cuando cayó al piso hace un momento.

Ambos no interactuaron mucho con Jiang Yao y no tenían idea de su personalidad.

Aunque una casa en Golden Harbor puede no parecer un gran problema para Lu Xingzhi, una casa en Golden Harbor, ciudad de Jindo, podría costar hasta seis dígitos. Mucha gente no pudo pagar una casa allí en toda su vida.

Incluso si Jiang Yao no tuviera idea del mercado inmobiliario en la ciudad de Jindo porque vivía en el sur, cualquier mujer que supiera hacer matemáticas no permitiría que su esposo regalara una casa tan fácilmente.

Por lo tanto, después de que Xuyao ​​escuchó lo que Weiqi había dicho, creyó que Weiqi no recibiría ninguna ayuda de Jiang Yao. Afortunadamente, Xingzhi inicialmente planeaba darle la casa a Weiqi.

Sin embargo, estaba preocupado por lo que sucedería después de que Xingzhi le diera la casa ¿Jiang Yao se pelearía con él después de que le dijera sobre eso?

Zhou Weiqi no sabía lo que estaba pasando por la mente de Xuyao. Después de que terminó de jugar a la víctima, dijo: "¡Xingzhi dijo que me daría su casa si dices que lo extrañaste!"

Al escuchar eso, Xuyao ​​fumó su cigarrillo y puso los ojos en blanco hacia Weiqi a su lado, a quien pensó que era un muñeco.

Jiang Yao, que estaba al otro lado de la línea, se sorprendió porque era todo lo contrario de lo que Lu Xingzhi le había dicho hace un momento.

Lu Xingzhi le dijo que si decía que lo extrañaba, el nuevo auto de Weiqi le pertenecería, pero Weiqi estaba diciendo que si decía eso, la casa de Lu Xingzhi le pertenecería a él.

Jiang Yao contempló lo que acaba de decir Weiqi y lo relacionó con la situación actual. Ella salió con una respuesta en su corazón. Había una mayor posibilidad de que lo que dijo Weiqi fuera cierto, y en cuanto a Lu Xingzhi ...

Jiang Yao creía que solo quería escucharla decir que lo extrañaba a propósito. Ni siquiera quería el auto de Weiqi y estaba planeando darle la casa a Weiqi desde el principio. La casa pertenecería a Weiqi independientemente de si ella dijo la oración que él quería escuchar.

|1| No puedo apartar los ojos de ti ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora