Capítulo 11

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Rastrear a Brandon debería ser fácil, y el resto de sus novios no eran cercanos a él. Así que Harry no debería sentirse de una forma u otra por eso, pero lo hace. Se alegra de que no tenga ningún enredo. Eso hace que mantenerlo en ese lugar sea fácil.

También significa que tal vez tenga una oportunidad con Louis.

No debería estar pensando de esa manera, pero también lo hace.

Se dijo una y otra vez que él es un trabajo, nada más. Pero la noche anterior había demostrado lo contrario. Louis se había corrido para Harry, se derrumbó en sus brazos mientras le daba lo que necesitaba. Y luego se desmayó, completamente agotado y cómodo. A salvo con él.

Dormía dulcemente a su lado mientras los pensamientos pasaban por la mente de Harry. Como lo que irá a hacer cuando encuentre a su acosador, qué decir cuando Frankie llame, y definitivamente llamará, y lo que hará cuando Louis se vaya. La sola idea de que el castaño se vaya y nunca regrese le pone los dientes en el borde.

—Amigo, baja la taza. La vas a hacer añicos —Winston le quita de las manos la taza de café vacía—. ¿Estás bien?

—Sí, solo estoy pensando.

Levanta una ceja ante sus nudillos blancos. —Intenta hacer menos de eso.

Cojea hasta el fregadero y comienza a enjuagar los platos para el lavavajillas. Toda la configuración ahí es perfecta: dos neveras enormes empotradas en la pared, muchos gabinetes, una amplia cocina y hornos dobles lo suficientemente grandes como para caber un banquete en el interior. Harry había elegido el azulejo para la pared, un azul que solía gustarle a su padre, el cual había pintado su viejo barco de pesca de ese color a pesar de que sus amigos le molestaban.

—¿Estás pensando en el barco? —pregunta Winston cuando ve a su hermano mirando el azulejo.

—¿Hay un barco? —Louis pregunta y termina su último bocado de tocino. —Y, dios mío, esto fue asombroso. Un chico podría acostumbrarse a esta comida. —se frota el estómago.

Winston deja caer algunos cubiertos en el lavavajillas.

—Sí, nuestro papá solía pescar.

—No pescó mucho —agrega Harry—. Pero todavía le encantaba estar en el agua. Hay un arroyo que atraviesa la propiedad. En la primavera, puede ser bastante grande cuando la corriente por la nieve llega hasta aquí desde las montañas. Flotaba allí todo el día, solo pescando en su pequeño bote —Louis sonríe. —Cuando cumplí los doce años, me volví demasiado grande para seguir con él. Casi se hundió el barco un par de veces antes de que se rindiera y me dejara pescar desde la orilla.

—Vaya, suena como un padre divertido —Louis coloca su mano sobre la de Harry. —Ustedes dos deben extrañarlo mucho.

—Lo hacemos —Winston asiente —Por eso esta casa tiene tantas cosas que nos recuerdan a él y a mamá.

—El azulejo —señala Harry—, ese es el color que pintó su barco.

Extiende la mano y pasa los dedos por el esmalte azulado crujiente. —Me encanta. Tu papá tenía buen ojo para el color.

—Lástima que no tenía buen ojo para elegir lugares de pesca —Winston sonríe y vuelve a los platos.

Harry se pone de pie y ayuda a Louis a hacer lo mismo.

—Entonces, ¿qué vamos a hacer hoy? —pregunta Louis con una sonrisa.

—¿Necesitas practicar o algo? —Winston da vueltas, con burbujas de jabón en sus manos —Conozco todos los movimientos de baile de tu tour y puedo respaldarte totalmente con la voz si...

obsesión ও larryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora