V

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Louis sostiene la taza rosa en sus manos, aprovechando el calor del té para calentarse un poco. No está de humor para el té, de hecho, planeaba llegar a su apartamento e ir directamente a su cama y aparecer después del mediodía. Pero en cambio vino a la cocina y después de un minuto parado contra la isla, decidió hacer un poco de té, luego está nuevamente apoyado en la isla con la taza rosa de Perrie en la mano y la impresión de que el collar le pesa tanto en el cuello como un ladrillo.

Ahora es el sumiso de Harry e incluso tiene su collar, aunque es algo más simbólicamente que solo un collar, todavía es algo que está ahí para recordarle su decisión, incluso Harry tiene uno. No es que Louis se arrepienta de esto, solo necesita aceptarlo, ver "caer el veinte" para realmente darse cuenta de que él es el sumiso y Harry es su dominante. Necesita aceptar que ahora alguien lo tiene efectivamente bajo control y para alguien que siempre ha tenido el control total sobre su vida y está orgulloso de ella, es un callejón sin salida que superar.

- ¡Buenos días Louis! - Louis se asusta, casi tira la taza en sus manos por todo el mostrador y mira a Perrie, quien sonríe y tiene el pelo revuelto cuando entra a la cocina. - ¡Me alegra que me hayas escuchado después de la tercera vez que te llamé!

- ¿Necesitabas darme este susto? - Louis suspira, tratando de calmar su corazón y mirando el reloj de la cocina, que no pasa de las siete y media de la mañana. - Buenos días, ¿alguien te echó de la cama o ahora te despiertas temprano los lunes?

- Me ascendieron, ¿lo olvidaste? - Dice, mirando seriamente a Louis quien rápidamente lo niega, porque no olvidó que su amiga pasó de asistente de maquillaje en Vogue a una de los principales maquilladores, simplemente no lo recordaba en ese momento. Esto pareció convencer a Perrie, quien llena una taza de té y se inclina en el banco de la isla frente a Louis, tomando un largo trago antes de hacer la pregunta que Louis ha estado esperando desde que entró por la puerta de la cocina: - ¿Y? ¿Qué tal el fin de semana?

- Fue... Bueno, creo. - Solo dice Louis, pensando en los dos días frustrantes que literalmente lo llevaron a llorar, pero al pensarlo ahora, le gustó. - Sí, estuvo bien.

- ¿Sólo eso? - pregunta Perrie. - ¿Sin detalles? ¡Quiero detalles!

- ¿Qué? ¡No! ¡No contaré mi vida sexual en detalle! - Perrie levanta las cejas y Louis suspira, porque sabe que lo dirá, obviamente no con detalles. - Fue... Bueno, Harry es muy bueno en lo que hace y fue muy comprensivo. En algunos momento quería matarlo, pero en otros solo quería que dejara de jugar y me hiciera venir como nunca... Pero de todos modos, estaba bien.

- Hm... - acepta Perrie, sacudiendo la cabeza mientras coloca su tasa en la encimera. - Eso parece suficiente. ¿Y entonces? ¿Eso es todo? ¿No fue este fin de semana una especie de prueba?

- Ah, sí... - Louis duda sobre contarle a Perrie que él aceptó la propuesta de Harry de ser sumiso y enseñarle sobre BDSM, es uno de esos momentos de "ponerse al día" para Louis, no sabe muy bien qué pensará él mismo cuando lo haga. Luego dice que se joda esa paranoia y saca el collar de debajo de su camisa y dice: - Acepté ser sumiso con él, ahora él es mi dominante, pero no ha cambiado nada porque realmente no me siento más sumiso.

- Oh... - dice Perrie, acercándose y deteniéndose junto a Louis, tomando el collar entre sus dedos y girando el colgante. - Es hermoso y es un Pandora, ¿sabes? - Louis niega con un gesto. No estaba muy interesado en la marca sino en lo que significa. - Pero, bueno, no es así como funciona, ¿verdad? No es como si te pusieras el collar y te volvieras sumiso por arte de magia, ¿verdad?

- Um, sí, no lo sé. - Louis niega con la cabeza. - Eso no es todo, es raro, ¿sabes? Nunca me vi a mí mismo siendo dominado y mírame ahora.

- Louis, cálmate, ¿de acuerdo? ¡No hay necesidad de asustarse! Y no lo niegues, ¡te estás volviendo loco! - Perrie lo interrumpe antes de que pueda negarlo. - ¿Y le hablaste de eso?

S&M • l.s. au!bdsm. TraducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora