XIV

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El chasquido de la cámara no sobresalta a Louis,está cómodo a pesar de las cuerdas perfectamente ajustadas alrededor de su cuerpo semidesnudo y de que Harry se agacha y corre a su alrededor con la cámara, soltando risitas ocasionales que brotan de sus labios.

- Dobla la pierna un poco así... - murmura Harry, con una de sus manos en la rodilla de Louis y levantándola a su antojo, apartándose con una sonrisa levantando de nuevo la cámara, a lo que le sigue el clic de la imagen capturada. - Perfecto.

Louis se levanta sobre los codos cuando Harry se acerca, una sonrisa se abre en su rostro al ver las últimas fotos tomadas en el pequeño visor de la cámara.

Todo esto fue una insistencia de Louis, que no pudo dejar de pensar en las fotos durante la última semana. Cada vez que iniciaba el tema con Harry, éste siempre se echaba atrás diciendo que no tenía malas intenciones con las fotos y que sólo lo haría si Louis estaba seguro. En cualquier caso, Louis se alegró de la actitud de Harry, sabiendo que probablemente gran parte de su reacción se debía a él, pero eso no le hizo desistir.

Una vez que Harry se rindió, planearon todo, desde la iluminación hasta la sábana de seda blanca, que según Harry, realzaría el tono de su piel. Hay varias velas encendidas repartidas por la Sala de Juegos, la característica iluminación amarillenta en contraste con las paredes oscuras es más de lo que esperaban, las llamas proyectan sombras cada vez que Louis cambia de posición. Las cuerdas son finas y de color beige, sus diversos nudos van desde el cuello, recorriendo su torso hasta terminar en sus rodillas. Las posiciones de las fotos están estratégicamente elegidas para no mostrar la entrepierna de Louis y así resaltar las curvas y los matices de su cuerpo. Está más que claro la inclinación de ambos por el arte, aunque sea en diferentes formas y niveles, contribuyen así a la estética artística de las fotos.

Louis respira profundamente, con los ojos cerrados y el torso levantado de la cama, con los pies arrastrándose por la suave seda y una sonrisa de satisfacción abriéndose paso en sus labios.

- ¡Oh, no te muevas! - dice Harry, la sonrisa de Louis se ensancha aún más mientras trata de mantenerse en su posición, el sonido de la cámara apagándose es el único sonido en la habitación hasta que Harry dice- Está bien, puedes seguir respirando.

Louis se ríe, apoyando de nuevo el torso en la cama, con la cabeza cayendo de lado sobre la sábana. Harry está en el borde de la cama, con una de sus rodillas apoyada y la mirada puesta en la cámara que tiene en sus manos, con una leve sonrisa en los labios mientras mira las fotos. Louis se muerde el interior del labio inferior, con las yemas de los dedos recorriendo la cuerda que le rodea el cuello mientras mira a Harry, que lleva el pelo recogido en un moño, con mechones sueltos enmarcando su cara, más a la vista sin la larga melena que le rodea, su figura alta y fuerte con una sencilla camisa blanca y unos vaqueros claros.

Harry, cómo atraído por los ojos de Louis, levanta los suyos de la cámara y se encuentra con los azules. Con movimientos lentos baja la cámara y sonríe, el tipo de sonrisa que se apodera lentamente de su rostro y sube a sus ojos, denotando una juventud y belleza que las expresiones serias no dan.

- ¿Estás cómodo?

- Muy cómodo- Louis sonríe, rodando hasta estar boca abajo con los brazos alrededor de una almohada contra su pecho. Harry levanta la cámara y rápidamente hace una foto de Louis tal y como está. - ¿Y tú?

- ¿Si estoy cómodo?

Louis se encoge de hombros, sus ojos bajan rápidamente a la sábana que le rodea y vuelven a los cálidos ojos verdes. - Y cualquier otra cosa que sientas, supongo.

Harry sonríe, sus ojos bajan a las manos, apoyando la cámara en el colchón mientras se apoya con la otra mano en la sábana, el movimiento proyecta una sombra parcial sobre Louis. - Sí, me siento cómodo. Y muy contento, diría yo. La vista es muy bonita.

S&M • l.s. au!bdsm. TraducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora