INTELIGENCIArtificial

0 0 0
                                    

Más de tres décadas después, aún pervive el miedo y la incertidumbre del tiempo que tomará a Chenóbil curarse del todo. Ahora, Demyan es todo un hombre y no se decide a salir de Crimea. Poco a poco fue comprendiendo lo que aquel día de abril significó para su país, su gente y las próximas generaciones. Fue afortunado, como en su día le dijo su abuelo, de estar lo suficientemente lejos para sortear lo que sobrevino en los años posteriores. No necesita tener un coeficiente muy elevado para reconocer que el accidente pudo evitarse.
Una máquina tampoco lo hará.

FIN

MICROreflejos-2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora