Lo que no dices.

4 0 0
                                    

Lo que no dices. Y lo que si.
Lo que haces, y lo que dejas de hacer.

Nada sería más placentero para mi que afirmar que escribo está nota a la nada desde la alegría, pero como se ha vuelto habitual desde hace algún tiempo, solo he venido a descargar mi tristeza, ya que el llanto no es una forma a la que quiera darme.

Y sé que es más liberador que convertir mis palabras en tinta sobre papel.
Pero.

Una imagen vale más que mil palabras.
Es cierto

Mil palabras. Un millon de ellas, no se comparan a mi dolor actual.
Y sólo he visto una imagen. Solitaria, sencilla. Una sonrisa en labios perfectos, una pose comida sobre arena calentada al sol. Y la Nada, floreciendo en un corazón. (Si, la Nada, en mayúsculas. Puede que otro día, o en otro momento, tenga ganas de explicar de qué hablo, pero hoy no parece ser el momento)
Claro que ese corazón no está en la imagen. No. Como lo estaría, si es el mío.
Aunque llamar corazón a la piedra que me destruye es algo peligroso, y no del todo acertado, es lo que es. O lo que era. El fuego que me quema no es fácil de ver, de sentir o entender.
En fin, de lo que hiciste, venir a mi hogar.
Y de lo que no, decírmelo.
Es estúpido, pero no lo comprendo.
No te hice daño, creo.
No quise alejarte. (Aunque sucedió, no me preguntes, no conozco el porqué)
Sin embargo, es claro que no quieres verme, o al menos habrías saludado.

Esto es estúpido.
No voy a entenderte hoy, si no lo hice en años.
Pero que te quede claro amigo mío, lector anónimo, que es cierto.
Las imágenes, dicen lo que las palabras no podrian jamás.

Un final adecuado para esta estupidez, este ataque de dolor, este escribir para olvidar, no tengo.
Solo diré una vez más, que no quiero seguir viviendo.  Simple y directo al grano, creo.

Quiero morir.
¿Y lo peor? No me atreveré.

La tinta de los poetasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora