13 || Merecer

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El día anterior aún eclipsaba a Adrián. Cada vez que estaba en silencio podía oír los llantos de Sabine; cada vez que cerraba los ojos podía ver a esa familia destrozada.

Adrián revolvió el café con una cucharilla. No había podido dormir, y su cuerpo estaba totalmente exhausto. De hecho, había llegado un punto en que Adrián estaba siempre exhausto.

— Podría prepararte una taza de café del bueno, —rompió el silencio la asistenta de su padre. Él se giró para mirarla y se encogió de hombros.

— Estoy bien... pero gracias igualmente. —No se merecía café de verdad. No se merecía nada porque él estaba vivo y Marinette, muerta.

Adrián no se veía con fuerzas de abrir el diario, que reposaba en su escritorio; un recordatorio persistente de lo que había perdido.

Always, Marinette (traducción al español castellano) - Por siempre, MarinetteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora