Un orgasmo más.

Capitulo XII

Decidí tomar aire fresco, hoy no tendré clases y me he despertado muy temprano, odio cuando eso pasa, pero no sé que pasaba, hoy sentía que estaba bien, no había problema de dar unas cuantas vueltas antes de ¿Desayunar? que sé yo, Edward tenia que trabajar con su padre en la mañana, asi que habiamos quedado en vernos en la noche. Trate de despertar a Iliana pero debe haberse trasnochado o salio más temprano y no me di cuenta pero su cuarto está cerrado.  Logro escuchar un sonido lejano, me guío hasta el origen de él y pues claro, provenía del cuarto que ahora es de Gabriel, ya había llegado y no me había dado cuenta, me acerco aun más y logro escuchar bien es la fabulosa canción One more night de Marron 5..

"Now you're stuck on my body
On my body like a tattoo
And now i'm feeling stupid
Feeling stupid crawling back to you" - Tarareo mientras empiezo a entender todo, sus problemas no tienen nada que ver con la familia de él.

Toco su puerta 3 veces, y no me escucha, asi que toco 5 veces más y abro, esta allí tirado en su cama, guía su vista hacia mi y sonríe; se que lo conozco tanto como para apostar todo el dinero del mundo a que esa sonrisa es completamente falsa, me acerco hasta el equipo de sonido, le bajo un poco de volumen y tomo asiento en su cama.

-Pasa algo? - Lo miro como tonta e imito la sonrisa que hace unos segundos tenia él.

- No, claro que no, tonta - Mira hacia otro lado - No sé si contarte.. - Calla y suspira profundamente.

- Por que no? No que somos grandes amigos? - Lo ánimo sabiendo que es un intento fallido.

- Lo sé, lo sé - Me ve y en 15 segundos voltea su vista nuevamente, ahora si empieza a preocuparme, ¿habrá embarazado a alguna de esas "amiguitas" que tiene? ¿Tendrá algún problema muy fuerte con su novia? ¿Se enamoró? Empiezo a realizar diversas pregunta en mi cabeza, y él sin fijarse si estoy o no prestando atención, prosigue - Esa maldita  perra - Mis ojos se vuelven platos y no comprendo aun nada. Creo que es todo lo que va a decir, pues sin más que eso sale del cuarto y me deja atrás, allí con aun muchas más dudas que antes, salgo tras él..

Está en la pequeña barra de la cocina, sentado tomando un jugo de naranja quizás.

- No quiero hablar, bien? - Dice, y sin mas me encojo de hombros a modo de disculpas y corro a mi cuarto.

Despues de pasar toda la mañana pensando, sin querer si quiera levantarme a almorzar, para no incomodar a nadie, se me ocurre la brillante idea de ir a un centro comercial que esta algo cerca, debería de comprar ropa nueva y la verdad estoy de ánimos como para todo hoy a pesar de esos pequeños problemas en los que trato de meterme y no tienen nada que ver conmigo...

Salgo de la ducha y de inmediato empiezo a escoger la ropa, para dar chance a que mi cabello se seque, hace tiempo que no me hago ondas... Tomo un blue jean claro, una corset azul rey, de esos que dan forma a tus senos, una chaquetica negra abierta que da a dos dedos arriba de mi ombligo, unas zapatillas del mismo color que mi corset, coloque una bandana animal print en mi cabello, mientras que de la mitad de mi cabello a las puntas hice unas no muy pronunciadas ondas..

Me encamino al centro comercial, al llegar me guío hacia una librería que ha llamado mi atención, al entrar noto la mirada de alguien pero no le presto interés, me voy hacia la parte de novelas, especialmente géneros de realismo mágico llevo años buscando el libro Cien años desoledad de Gabriel Garcia Marquez, con suerte tal vez lo encontraré.

A lo lejos puedo ver que queda solo uno, y me acerco a él justo en el momento que tiendo la mano para agarrarlo, alguien detrás de mi imita el mismo movimiento.

Volteo con una sonrisa tímida que de inmediato comienza a desvanecerse, mientras en mis ojos se asoman lágrimas que no sabría de que sentimiento provienen si ira, tristeza, miedo...

Él da un paso atrás y ríe, estoy tan vulnerable, pero aun asi mi mano toma su propio control y choca contra su pómulo.. Voltea la cara y su mano de inmediato toma posición en su pómulo, me mira fijamente su mirada es confusión... Y antes de dejarlo hablar.

- Jamás pensé que fueras tan infeliz, como se te ocurre? - Titubeó sin lograr terminar de decir lo que realmente quiero, y sin darme cuenta ya mis ojos eran el Salto Ángel y mis mejillas, para que hablar de ellas.. Mi respiración se cortaba y yo solo quería seguir maldiciéndolo pero las palabras no se atrevían a salir... Inhale y exhale provocando en mí seguridad y continúe - No te creí capaz, pero ya veo que jamas te conocí y no sabes cuanto te odio, todo te pareció gracioso no? Jugaste con mis sentimientos y aun asi tienes el descaro de aparecer y acercarte como si nada? No quiero volver a verte - Tomo el libro y me marcho, mientras él solo observa como me voy, supongo que ya tengo mi alma en paz.

Después de pagar lo mas rápido el libro, tratando de mantener una grande y fingida sonrisa por todo el mall, me encuentro a una muy vieja "amiga", que por cosas del destino no quería ni siquiera ver, pero bueno ya me había visto y debía saludar, no?

-Hola Day, cuanto tiempo - Me sonríe y puedo notar que no se alegra tampoco de encontrarme asi que solo sonrió y asiento, y continuo mi camino...
Lo menos que quiero es tratar por hipocresía a alguien en estos momentos.

Me detengo en una joyería y observo los anillos de compromiso y sus pequeños diamantes, los solitarios, y mi mente empieza a hacerme una mala jugada, sin pensarlo dos grandes lágrimas recorren mi mejillas, labios, cuello y se pierden. Tomo aire, y sigo haciéndome daño, hasta que de un momento a otro, siento una mano en mi hombro.

No me giro, puedo verlo claramente desde el espejo que esta en la vitrina que se encuentra dentro del local.

-Que haces aquí? Fui clara ya,  Dylan - Mis labios empiezan a temblar y yo me voy volviendo nada al terminar de pronunciar su nombre. Esquivo su mirada tras el espejo.. Su rostro no cambia, su mirada sigue tan confundida como antes...

- Dayanna, yo - Suspira - No entiendo tus actitudes, no entiendo absolutamente nada - Ahora es el quien evita mi mirada, se coloca a un lado de mi - Todo esto es...  Te he estado buscando, he preguntado por ti - Su voz se quiebra, y algo dentro de mi empieza a caer o quizás soy yo.. Qué acaso todo ha sido un sueño?

- Callate ya - Logro decir y me pongo frente de él - La carta, la rosa, o es que acaso fue una estupenda broma? - Sus ojos se abren como platos y comienza a decir repetidas veces que "no" con su cabeza, pasa ambas manos por su cara hasta detener una mano en su frente y la otra a un lado apoyándose de la vitrina. - Para eso me buscabas? Para ver si estaba súper mal con tu sorpresa? Pues bien, aqui me ves - mi voz se quiebra y no resisto mas, comienzo a ver todo borroso...