Anime boy ִֶָ 𝗖𝗵𝗮𝗻𝗹𝗶𝘅

O14

Chan estaba almorzando con Jisung, su compañero y amigo, Bangchan creía que era tierno. 

Estaban conversando acerca de la clase cuando vio a los chicos acercarse a ellos, Felix tomó asiento feliz junto a él, con Minho y Hyunjin. 

—Hola Lix. —Sonrió el mayor, recibiendo gustoso un beso de este en la mejilla. 

Saludo al resto de manera despreocupada, provocando que Hyunjin se burlara de él. 

A Jisung también le agradaba el chico alto, pero no tanto como Minho, especialmente porque estaba todo el día sobre él.  Cuando se conocieron, Minho pareció haberse enamorado a primera vista. 

Chan sabía que a su amigo igual le gustaba un poco la atención del mayor. 

—Jinnie aceptó darle clases a Jeongin.—Hablo lee menor, pateando feliz el suelo mientras comía su flan. 

—¿En serio? que bien, debes cuidarlo, es como nuestro hijo. —respondió Chan, apuntándole con el tenedor de plástico. 

Hwang se alzó de hombros, comenzando a comer su almuerzo. 

—No entiendo por qué Felix no puede enseñarle. 

El nombrado rodó los ojos. 

—Cuando voy a casa de Chan estoy ocupado en otras cosas, no lo entenderías, no puedo enseñar. 

—Ya me imagino que no puedes salir de sus piernas. —Hablo Minho para a continuación rodar sus ojos, cambiando rápidamente la expresión a una más alegre cuando Jisung río. 

Felix sonrió, colocando su lengua contra su colmillo. A chan le asustó un poco ello. 

—Exacto, además tú eres bueno en eso, y Innie es un amor, te lo prometo. —Habló Felix asintiendo, y luego tomó un poco de flan en la cuchara para llevarlo a la boca de Bang.

Felix usualmente hacía eso, alimentarme sin preguntarle, había intentando quejarse una vez, pero el mayor comenzó un berrinche bastante terrible. No le quedaba otra que aceptar. 

— No se como comparten saliva tan fácilmente.  —Hablo Jisung, haciendo una mueca de asco. 

— Sabes cómo funcionan los besos, ¿No? —Indago Hyunjin. 

—Cuando una persona te gusta, hasta su baba te encanta. —Agregó Minho, sacando su lengua para pretender que le lamía la mejilla. Han le golpeó con su codo. 

—Estoy de acuerdo. —Asintió Chan, observando a Felix con una sonrisa, el menor se había sonrojado un poco. 

Felix era hermoso. 

Y su baba era rica.