¿Me amas? Levi x Erwin

2

Cap. 2

Levi

Escuchaba los murmullos de mis compañeros a mi alrededor mientras comían el desayuno charlando y riendo, la única que no platicaba con los demás era Sasha, la cual se encontraba bastante ocupada engullendo su almuerzo con ferocidad y rapidez, aparte la vista reprimiéndome para no poner los ojos en blanco al verla comer de esa manera.

-Valla que te ves mal ¿Estás seguro de que duermes bien? - Hanji se sentó a mi lado sin siquiera preguntar o pedir permiso como ya estaba acostumbrada a hacerlo.

-No- respondí amargamente mientras removía la comida en mi plato sin hambre.

Hanji asintió y comenzó a comer su almuerzo.

-Sabes, deberías dormir un poco, si sigues así vas a terminar matándote y no se me ocurre una manera más tonta de morir para el soldado más fuerte de la humanidad.

-Es fácil para ti decirlo. - respondí poniendo los ojos en blanco.

-Quizá podrías dormir más plácidamente después de...ya sabes...tener sexo con alguien.

-Vete al carajo Zoe.

-No es mala idea, quizá podrías convencer a alguien quitando esa cara de amargado que tienes, bueno es probable que se espanten por tu tonta afición a la limpieza, o a lo mejor sí... Auch ¿Por qué hiciste eso? - se quejó después de que le diera un golpe en la cabeza que incluso hiso que sus gafas cayeran sobre la mesa.

-Sierra la boca cuatro ojos.

-Solo intento ayudarte a tener sexo maldito amargado- exclamo fingiendo indignación

-Vete al carajo, no quiero tu ayuda.

-Entonces crees que puedes hacerlo sin mi ayuda, bueno puedo conseguirte unos cuantos condones...

-Hola, ¿vas a comerte eso? - Me preguntó Sasha interrumpiendo a Hanji.

-Comételo- dije mientras me levantaba y dejaba a Hanji aun en la mesa y a Sasha devorando lo que se suponía hace unos segundos que era mi almuerzo.

Me largo del comedor dando zancadas y dejando a una molesta Hanji detrás de mi murmurando que soy un ingrato que no aprecia su ayuda y a una sonriente Sasha por así decirlo mientras devora mi comida.

después de eso el día paso con tranquilidad, una ves que empieza a atardecer me dirijo a mi habitación pensando que me vendría bien dormir un rato.

En mi camino paso por la oficina de Erwin, la puerta se encontraba abierta y no pude evitar entrar a echar un vistazo, Erwin se encontraba tras una gran pila de papeles y unas gafas se colocaban frente a sus ojos, lucia demasiado cansado así que me decidí por ayudarle un rato, cerré la puerta tras de mí y acerqué una silla para luego tomar un montón de papeles y comenzar a revisar y ayudarle.

-Yo lo hago, tú no te preocupes.

-Comandante déjeme que le ayude- Conteste mientras me acomodaba y Erwin me daba las gracias con la mirada.

Después de unas interminables horas al fin las hojas se acabaron y terminamos con el papeleo.

Me estire tensando todos mis músculos para luego relajarlos.

-Vamos a beber un poco, yo invito- Erwin me miraba mientras se quitaba los lentes y los dejaba en la mesa.

-Claro.

Fuimos a un pequeño bar cercano y nos sentamos frente a la barra.

Después de unas cuantas cervezas me sentía bastante relajado, todas mis preocupaciones se habían esfumado y platicaba alegremente con Erwin sin siquiera importarme el hecho de que le estaba hablando de tu y le llamaba por su nombre de una manera despreocupada.

Después de un rato y muchas más cervezas de parte de Erwin, yo no quise tomar muchas, aun sentía la extraña sensación de paranoia de que en cualquier momento los titanes nos atacarían, me sentía bastante cansado por lo que le dije a Erwin que fuéramos ya a dormir, el asintió y se levantó de su silla para luego desplomarse en el suelo, mierda, estaba realmente borracho.

Lo levanté del suelo y puse uno de sus brazos sobre mis hombros para ayudarle a caminar, con bastante esfuerzo lo llevé a mi habitación, ni loco lo llevaría hasta la suya, Erwin es demasiado grande para mi pequeño tamaño y aparte su cuarto se encuentra hasta arriba de la torre por lo que no me entraban ganas de subir las escaleras con Erwin sobre mí.

Durante todo el trayecto se la paso acariciando mi cabello mientras murmuraba cosas que no logre entender por más que me esforzara en intentar comprender las palabras que salían de sus labios, a medio camino él se inclinó y vomito a mis pies manchando mi blusa haciendo que tuviese que aguantarme las arcadas al sentir el asqueroso aroma entrar por mis fosas nasales, después de esto se levantó sin mostrar un poco de vergüenza a consecuencia de su estado, me sentí tentado a dejarle allí en medio del pasillo pero al final me convencí a mí mismo de continuar con mi camino ignorando el olor, al llegar a mi cuarto abrí la puerta con dificultad y él se separó de mi para lanzarse a mi cama mientras gritaba wiiiiii con un tono que me recordaba al de un niño, quien diría que el respetable comandante se ponía en ese estado después de unas cervezas.

Suspire y me encogí de hombros para luego quitarle los zapatos a Erwin mientras lo acomodaba en la cama y luchaba por convencerlo de dormir de costado, le acercaba un bote en caso de que volviese a vomitar, me resigne a dormir en el sillón, pero antes tendría que darme un baño, apestaba a su vomito.

Me metí al baño con una toalla en mis manos, llevaba un tiempo bajo el agua caliente cuando sentí un par de fuertes brazos que me abrazaban desde la espalda y una boca que besaba mi cuello con lujuria.