¿Me amas? Levi x Erwin

12

Cap. 12

Tras la puerta de mi habitación se escucharon unos pasos seguidos de unos tres toques de nudillos en la madera.

Me removí en la cama quejándome, ya llevaba un rato despierta, pero no quería levantarme de mi cómoda cama, saqué una mano de debajo de las sabanas buscando en la mesita de noche mis anteojos.

-Hanji ¿estás ahí? - pregunto una voz ronca tras la puerta.

- ¿Dónde más podría estar a esta hora de la madrugada? - refunfuñe para mí misma lo suficientemente bajo para que no me escuchara el comandante Erwin hasta encontrar la fría sensación de mis dedos en el vidrio de mis anteojos- Claro, voy en un momento.

De una patada lance las sabanas destapándome y colocando mis anteojos en mi rostro, me talle los ojos y aprese mi cabello en una coleta rápidamente intentando no verme tan desaliñada debido a mis seguidos desvelos.

Me levante de la cama con pereza y me encamine a la puerta donde me esperaba un ya aburrido Erwin.

- ¿Qué es lo que sucede comandante? - pregunte al abrir la puerta y asomando la cabeza por una rendija sin mostrar el desordenado interior de mi habitación.

-Bueno, quería informarte que Levi esta un tanto lesionado, por lo que no podrá asistir a la práctica de hoy, y que quiero que la atrases para mañana- una gran cantidad de ideas se arremolinaron en mi mente tras escuchar lo que había dicho, una sonrisa pervertida se dibujó en mi adormilado rostro dejando atrás la pereza.

-Así que está lesionado eh, ¿lo hicieron muy duro anoche?

Las mejillas del comandante se coloraron rápidamente y desvió la vista, así que eso es, claro Levi no se pudo haber lesionado de repente de la noche a la mañana, lo que obviamente me dejaba saber que Erwin tenía algo bastante grande además de sus hombros y su espalda, y claro además está el pequeño tamaño de mí amigo, lo que me da a parecer que el pobre de Levi no podrá caminar por un rato, mucho menos estar en la práctica del día de hoy.

-Esto...- El comandante no sabía que contestar ante mi pregunta, mientras yo le observaba con una sonrisa disfrutando de su incomodidad ante mi manera tan rápida y directa de descubrir que fue lo que sucedió.

Tras un incómodo silencio me despedí del comandante y cerré la puerta para echarme a la cama nuevamente, pero un rato después me di cuenta que no lograba dormir, por lo que maldije a Erwin y su lisiada por interrumpir mi descanso.

Me levante y me di una ducha para luego ir a hablar con los demás compañeros y decirles que la practica era pasada para mañana, a excepción del entrenamiento de Eren, de el que se encargaría Levi como lo hacía normalmente, nadie se quejó ni pregunto el por qué así que me tranquilice y me dedique a mi trabajo como un día cualquiera.

El dolor en mi espalda baja se había calmado desde que me desperté por primera vez debido al dolor, Erwin no se encontraba a mi lado, por lo que le busque con la mirada por la habitación, pero no se encontraba ahí, extrañe sus brazos a mi alrededor, estire mi cuello hasta dar con la almohada de Erwin que se encontraba a mi lado, enterré mi cara con pereza en esta aspirando el ya bastante conocido aroma de mi pareja, un rato después me levanté de la cama y me fui a dar un baño.

El agua fría de la mañana calló sobre mi rostro bajando por mis hombros y recorriendo todo mi cuerpo hasta llegar al suelo haciendo que me recorriera un escalofrió por el cuerpo debido a la baja temperatura del líquido, pase los dedos por mi cabello intentando recordar cuando fue la última vez que me di un baño solo, supongo fue justo antes de la noche en que Erwin borracho se decidido por escabullirse en mi baño y convencerme de tener sexo con él de una manera un tanto peculiar.