La ruedecilla de su ratón no paraba de girar, sus ojos viajando de nombre en nombre, agregando a aquellos que le parecían interesantes. O más bien, aquellas…
Sí, Samuel era un hombre apasionado por las mujeres. Siempre que estaba solo en su apartamento chateaba con al menos cuatro chicas a la vez. Les hacía reír, y conseguía que cayeran perdidas de amor por él, pero nunca llegaba a nada más. La mujer de su vida ya estaba a su lado.
– Cariño, se te van a caer los ojos si sigues en el ordenador –Allí estaba ella, alta y hermosa, pelo castaño y ondulado por la mitad de la espalda y ojos verde hoja, brillantes y llenos de amabilidad. Era simpática, divertida, amable, cariñosa, inteligente y un poco atrevida, lo cual volvía loco a Samuel. Él pensaba que no podía pedir nada más, que su vida ya estaba completa con aquella joven, y fue por esa razón que hacía un año atrás había decidido unirse en matrimonio con ella. Ambos vivían juntos en un pequeño e iluminado apartamento de Madrid, compartiendo su día a día y, en general, su vida.
– Solo estaré un rato más, no te preocupes cielo –Sonrió y su esposa hizo lo mismo, marchándose luego al salón para continuar con su programa de televisión.
Samuel continuó con su tarea hasta que sus ojos se pararon en un nombre de usuario.
– ¿Willyrex? ¿Acaso es un dinosaurio o algo…? –dijo en voz baja para sí mismo. Rara era la vez que agregaba a hombres en aquel lugar, pero su nombre le había parecido extraño, por lo que decidió enviarle una invitación.Willyrex no aceptó su solicitud de amistad en una semana, por lo que cuando Samuel se fijó en la notificación que le confirmaba esa noticia, realmente se sorprendió. Ni siquiera recordaba cuando ni por qué lo había agregado, pero no le importó. Simplemente le habló.
Vegetta777 se ha conectado.
Vegetta777: Hola :)
Willyrex se ha conectado.
Willyrex: Hola
Bueno, al menos le había contestado. Le tocaba ser amable.
Vegetta777: Qué tal?
Willyrex: Bien, ¿y tú?
Vegetta777: Genial :D
Vegetta777: Eres nuevo por aquí?
Willyrex: Sí, me registré hace unas semanasSamuel sonrió antes de hacer su siguiente comentario.
Vegetta777: Se podría decir que te estoy estrenando? ;)
Vegetta777: Es broma jaja
Vegetta777: Dime, cuántos años tienes?
Willyrex: Tengo 17Un poco menor para su gusto… y masculino, también.
Willyrex: ¿Cuántos tienes tú?
Vegetta777: Veinticinco, ahórrate la broma fácil
Willyrex: Tranquilo, tranquilo jajaja
Vegetta777: Me caes bien, chico ;)Realmente no sabía muy bien de qué hablar con él, pues todas las conversaciones que había tenido (o, al menos, el noventa por ciento) habían sido con mujeres. ¿De qué hablaría con un hombre?
Decidió hacer preguntas generales, aquellas que se utilizarían en cualquier situación.Vegetta777: Estás estudiando, entonces?
Willyrex: Sí, estoy en el instituto. Tú trabajarás, supongo
Vegetta777: Eso es, trabajo de funcionario en una empresa de videojuegos, son mi pasión
Willyrex: ¡¿En serio?! ¡A mí me encantan los videojuegos!Bien, ese era un punto a su favor. Por raro que sonara, era difícil encontrar personas que jugaran a videojuegos en su tiempo libre. Trabajaban con ellos todo el día, Samuel supuso que lo menos que querían cuando llegaban a casa era seguir viendo videojuegos.
Vegetta777: Qué juegos te gustan?
Willyrex: Pues últimamente me he estado viciando bastante a Minecraft. Es una maldita adicción…
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On-Love (Fanfic, Wigetta)
FanfictionCuando todo lo que vemos es oscuridad, cuando la más profunda soledad nos asola, un fino rayo de luz puede salvarnos la vida. Tal vez deberíamos aferrarnos a él, pero hemos recibido tantos golpes que nos asustamos y nos alejamos. No queremos ser her...