Mizpah [Michaeng] | TRADUCCIÓN

Capítulo Especial <125>

Mina había vuelto a casa después del trabajo, consiguió un trabajo estable que era suficiente para satisfacer sus necesidades. Ella trabajaba como profesora de baile en una conocida academia de baile en Seúl. Enseñaba distintos géneros pero se centraba más en enseñar ballet a los estudiantes.

Primero fue a buscar a Youngie a la casa de sus padres en frente de su casa. Esa era su rutina, quien llegara a casa primero debía recogerlo. Apenas entraron en la casa, la soledad los envolvió.

Mina primero arregló sus cosas en el sofá y lo dejó en el suelo, "Cómportate, ¿sí, Youngie? Mami estará en la cocina." Youngshin con 3 años de edad asintió sonriéndole a su madre. Mina puso el peluche de dragón en su regazo.

"¡Lagarto!" Él gritó cuando vio el esponjoso dragón azul. Mina rió por su hijo, encontró sus payasadas lindas y divertidas, a veces, comparándolo con Chaeyoung ya que compartían similitudes cuando se trataba de este tipo de cosas - llamando al dragón lagarto, a lo cual Chaeyoung lo llamaba así.

Una vez Chaeyoung llegó a casa con otro peluche en su mano, un animal desconocido y verde, con un raro cabello rosado encima. Ella se lo mostró a Youngshin y lo que es más sorprendente es que lo llamó "Bopa". Créanlo o no, la mayor parte de los peluches que compraba para Youngie tenían nombre.

Revisó la hora y vio que ya era casi el final del turno de Chaeyoung. Ella sonrió al pensar en su esposa volviendo a casa. Ya la extrañaba. Ella continuó preparando los ingredientes para su cena mientras que esperaba a Chaeyoung y miraba a Youngshin de vez en cuando.

Luego de una hora, Chaeyoung llegó a casa con la cara cansada, círculos negros debajo de los ojos y la ropa un poco desordenada, pero aun así logró sonreír a pesar de su día agotador. Apenas entró a la casa y mientras se quitaba los zapatos, escuchó una tierna vocecita llamarla.

"¡Mamá!"

Chaeyoung levantó su cabeza y vio a su hijo corriendo hacia ella. Ella se paró firmemente y abrió sus brazos, lista para recibir un fuerte abrazo de su pequeño. Pronto fue envuelta en pequeñas manos que no envolvieron ni la mitad de su cuerpo, pero lo suficiente para llevarse todo su cansancio. Ella sonrió mientras cerraba sus ojos para saborear ese tierno lado de su hijo.

Ella se alejó y acarició su cara. "¿Cómo estás, chico?" El pequeño niño sonrió ampliamente. "¡Estoy bien, Mamá! ¡Mira! ¡Tuve una estrella!" Él levantó su mano izquierda y le mostró la parte trasera de su palma con una estrella dibujada con una palabra de aliento que decía '¡Bien Hecho!'. Chaeyoung sonrió y le dio un beso en la frente.

"Buen trabajo, compañero. ¿Se lo mostraste a Mami?" Ella preguntó levantándose y adentrándose en la casa. Ella vio a Mina en la cocina preparando su cena. Se entregaron una larga y cálida sonrisa.

"No lo he hecho pero lo haré." Él dijo con un tono emocionado. Chaeyoung se agachó, nivelando su cuerpo mientras Youngshin la arrastraba hacia la cocina. "¡Mami!" Mina sonrió, dejó de cortar las verduras, se limpió las manos en la superficie del delantal que llevaba puesto y se agachó.

"¿Qué sucede, bebé?" Ella preguntó sonriendo.

Youngie levantó su mano izquierda y le mostró la parte trasera de su palma para ver la gran estrella dibujada. Mina sonrió y acarició su suave cabello negro. "Wow, tienes una gran estrella ahí. Bien hecho. Y por eso obtendrás una recompensa luego."

"¿En serio, mami?" Él saltó, dejando ir la mano de Chaeyoung - quien estaba escuchando su dulce conversación.

"Sí, te daré cinco galletitas de postre, ¿qué te parece?" El chico saltó incontrolablemente. Sus madres rieron por él haciendo que Chaeyoung lo detuviera para evitar que ocurriera un accidente.