Capitulo 25: Demasiado Cielo

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La canción que acompaña este capítulo es Demasiado Cielo de Pandora... ¡Qué lo disfruten!

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Había pasado dos meses desde la última vez que Ángel y Maura se vieron las caras. Sentada en la playa, mientras acariciaba su vientre, se dedica a recordar todo lo sucedido...

Ella se despertaba ese día rogando que todo lo ocurrido fuera una pesadilla, toda la noche se la pasó llorando, ni siquiera sabía en qué momento se había dormido. Se levantó con todo el esfuerzo del mundo, debía ir al control. Ella no quería seguir pero debía hacerlo, ya no estaba sola, tenía que pensar en esa personita que vendría al mundo para llenarla de luz.

Se dio un baño, se vistió pero se frustró al darse cuenta que su pantalón de jean ya no subía.

-¡Por eso te cambió por otra!-Le gritó su subconsciente pero Ella negó con la cabeza, tratando de esfumarse aquellos pensamientos que solo lograban destruirla más.

Tomó una calza negra y se la colocó, una blusa de color lila, muy suelta y unos zapatos bajos, sin taco. Se maquilló ligera para disimular lo que había llorado.

Bajó las escaleras y se marchó sin desayunar, lo que menos quería era llegar tarde y no habia tiempo.

Llegó a la clínica y esperó unos momentos hasta que la atendieron, se sentía súper extraña de entrar sola, esta vez. Recordó, sin pretenderlo, los momentos vividos en el embarazo de Marina y la tristeza la atacó con más fuerza. Necesitaba a Ángel, necesitaba su mano sosteniendo la suya.

-¿Cómo te has sentido, Maura?

-Pues bien... Solamente ayer sentí punzadas pero creo que fue por una discusión que tuve.

-Maura, sabes que tienes que estar tranquila y no alterarte-La regañó-Súbete a la camilla y descubrete el vientre, vamos a ver que todo esté en orden-Ella así lo hizo y aprovechó para hacer la pregunta que venía rondando por su mente.

-Doctor, mi vientre está muy abultado, ¿Por qué puede ser?

-Por tus embarazos anteriores-Dijo seguro, colocando el gel frío y comenzando a pasar el aparato, hasta que sonrío-O quizás porque son dos-La sonrisa de Maura se desvaneció y las alarmas se dispararon en su cabeza.

-¿Qué?

-Sí, Maura, estás esperando gemelos. No lo notamos antes porque seguro uno tapó al otro pero aquí se ven los dos-Veía la pantalla anonadada, se le había ido completamente el habla. Eran dos, ¡DOS! Inevitablemente, comenzó a llorar.

-¿Están bien?-Preguntó preocupada.

-Todo en orden pero tienes que estar lo más tranquila posible. Vamos a escuchar sus corazones-Tecleaba algunas cosas, mientras la morena asentía-Aquí está el primero-Un latido comenzó a retumbar, logrando que la sonrisa vuelva al rostro de Maura-Y aquí está el otro. Como te lo dije, todo está en orden.

Un nuevo comienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora