Lo que esconde el antifaz (Finalizada)

Armario Dorado - Parte 2

Era una de las tantas noches en las que "Jīnzi" decidía aparecerse en Internet, se acomodaba la camisa blanca, se arreglaba el cabello, se maquilló los ojos de negro para hacerse más misterioso a través del antifaz que se colocaba.
Se miró frente al espejo una vez que estaba listo para conectarse y situó su pequeño escritorio para que su webcam diera hacia una blanca pared, encendió una pequeña lámpara con led's en tonos azulados.

La habitación en la que estaba era un desastre salvó por esa blanca pared en dónde realizaba sus transmisiones, la iluminación del lugar aunado al aro de luz hacía que su blanca camisa se transparentara un poco para mirar lo que ésta oculta.

En ocasiones anteriores Jīnzi no jugaba tanto, pero le encantaba mirar e incitar a otros hombres, pero esa vez había tenido un día demasiado agotador, estaba un poco estresado así que solamente quería desquitarse un poco con algo de adrenalina y excitación.

Estando en aquella plataforma, se retocaba la tinta roja que usaba en sus labios, lo cual estaba fascinando a propios y extraños, posteriormente a ello, abrió un pequeño cajón a su lado donde guardaba diversos dulces y caramelos de todo tipo. Sacó una paleta/lolipop y mientras cambiaba de un "extraño" a otro, jugaba con ésta en su lengua, hasta que de pronto su pantalla esta vez lo conectó hacia un chico vestido totalmente de negro, llevaba una chaqueta deportiva de una reconocida marca, cabello corto y un par de gafas negras que cubrían sus ojos. Aquel joven había despertado su atención, especialmente sus facciones, tenía un rostro delgado y algo alargado, nariz grande pero no tosca, labios carnosos que le hicieron morderse los propios y entonces sus ojos bajaron hacia lo que considera su perdición: una muy pronunciada manzana de Adán, una nuez perfectamente mordible, algo que definitivamente necesitaba.

No quería que ese chico escapara, era como si la suerte o los astros se alinearan a su favor, no podía desperdiciar esa oportunidad, y entonces sin pensarlo ya le había escrito.

"¿Puedes mostrármelo?"

No había respuesta, pero no quería perderlo, sin embargo la reacción contraria parecía tener resultados favorables, por lo que decidió ejercer presión.

"¿Jugarás un poco o podemos decirnos adiós?"

Siete palabras lograron terminar de atraer la atención contraria hacia él gracias a qué también en ningún momento dejó de lamer y chupar el dulce que tenía en la boca, entonces los ojos de "Jīnzi" se fueron hacia donde la cámara enfocaba: el miembro contrario perfectamente marcado a través de aquel boxer. Internamente celebraba su victoria pues no pensó en poner a aquel tipo atractivo tan cachondo, además otra pequeña debilidad para Jīnzi es que casi babeaba al notar la mano contraria que masajeaba su propio miembro, ésta estaba llena de venas que resaltaban sobre su piel, quitándose la paleta de la boca, Jīnzi finalmente sonrió levemente para mostrarle a aquel chico su miembro, comenzando a tocarse; instintivamente ambos observaban como se tocaban el uno al otro mientras los gemidos de ambos lograban delatar cuan excitados estaban hasta finalmente llegar al clímax y manchar sus asientos.

"Jīnzi" estaba más que satisfecho con aquel joven, quizá más que otros días, pues los pequeños espasmos placenteros que éste logró provocarle aún podía sentirlos con tan sólo pensar en ese rostro semi cubierto, casualmente casi como el suyo llegando al clímax en aquel momento, sin embargo era Xiao Zhan, el chico tras el dorado antifaz, quien no se explicaba el por qué una parte de si mismo deseaba volverlo a ver, sintiendo alegría y adrenalina a tope como nunca lo había hecho cada vez que ambos lograban conectarse tan solo para satisfacer sus más bajos deseos.

Aquel día en Chongqing, Xiao Zhan esperaba comer sus fideos favoritos y una de las razones por las que siempre iba con sus amigos a tocar en el mismo local callejero, sin embargo ese día recibió una pequeña noticia por anticipado: el último tazón de fideos fue comprado por Wang Yibo, el joven promesa más famoso de China, lo cual fue motivo suficiente para "irrumpir" en medio de las grabaciones de aquella mini sección que se filmaba.

"—Buenas tardes a todos, somos egresados de la Universidad de Artes (...) De antemano una disculpa si esto llegara a ser una molestia para algunas personas presentes"

Sin embargo, fuera de que sea algo que "perjudicara", por el contrario, aparecer junto a su grupo en aquella sección del programa cuando fue transmitido, logró que su popularidad aumentara en weibo, logrando no solo que aquel pequeño local aumente sus ventas, sino que incluso las mini presentaciones en estaciones del metro tuviesen más audiencia, logrando que Xiao Zhan y su grupo estuviesen entre los primeros lugares de la búsqueda caliente de l red.

Sin embargo, a pesar de todo, habían pequeñas dudas que inundaban la cabeza de Zhan, la manera en la que el famoso Yibo se había acercado a él cuando mencionó que

"—Siento que quizás nos hemos visto antes"

Si bien Zhan jamás había salido de Chongqing, en aquel momento solamente se había dedicado a trabajar durante el día y por las noches...era completamente diferente, por un momento abrió más los ojos pensando más en ese chico, pero era imposible que un famoso como él hiciera ciertas cosas, ¿Verdad?.
Pero ese día "¿por qué Yibo se acercó a darle una pequeña donación a su causa?"

"—Por favor, acéptalo o mi Director me mata"

Aquello aún no se lo explicaba, sobre todo porque por supuesto que no creía que el "Director" le había enviado a hacer aquello cuando había recibido elogios de éste en un principio.

Pero lo más abrumante, fue en una noche en la que se encontraba especialmente cansado, tan cansado que no podía tomar su lugar como "Jīnzi" en la red,sin embargo a las pocas horas había despertado en medio de la noche, sudoroso y agitado, dándose cuenta que había prácticamente mojado la cama con su propia semilla, sorprendido y sobre todo asustado porque su "alter ego" no sé había encontrado con el chico de gafas oscuras de Bumgle-TV, sino con el popular chico con mayor influencia en su país: Wang Yibo.