Luz en la oscuridad

1.1K 152 147
                                    

Gongyi Xiao había sido el discípulo principal del palacio Huan Hua desde hacía ya tantos años que había sido considerado el digno sucesor del maestro Lao Gongzhu. Tenía un futuro prometedor al tener todo el interés de la pequeña maestra lo cual conllevaba a un matrimonio exitoso y con ello una sucesión poderosa.

Hasta ahora.

Con la llegada de Luo Binghe y su pronta traición hacia el viejo maestro, todo cambió de una forma que Gongyi Xiao cayó en una vorágine de sucesos tan rápidos que ni siquiera podía pensar en lo que sucedería a futuro, su futuro.

Y no es que tuviese miedo de no casarse con la joven maestra porque ciertamente no se sentía enamorado, pero ver como el palacio al cual sirvió por tantos años de golpe se llenaba de demonios poderosos le causó tal conflicto que no sabía cómo reaccionar realmente.

Su lado lógico y cultivador le decía que luchara por el palacio, luchara contra los demonios y se hiciera un lugar en el mundo de la cultivación pero lo que realmente pasaba era que estaba solo, ahora era él contra todo el mundo demoniaco y ante ello bastaba un solo suspiro para que dejara de existir.

Por otro lado estaba el conflicto interno entre Luo Binghe y las severas acusaciones hacia su propio Shizun, mismo que yacía encerrado en las profundidades del palacio.

A eso se sumaron lentamente las bodas oficiadas en el pabellón principal con las cinco mujeres de especial interés para el demonio y que el ex discípulo principal catalogó como chicas hermosas pero superficiales.

En primer lugar se encontraba la bonita pero poco inteligente Ning Yingying; Gongyi Xiao se llevó una gran sorpresa al verla tan sonriente y animada pero también tan esperanzada de ser la única esposa de quien solía ser su mejor amigo, más se llevó la decepción al ver que no, que quien consideraba su amor de infancia tenía ambiciones más grandes que el compromiso con una sola mujer.

A los ojos de todos, hermosa y tierna; ante Gongyi Xiao no era más que una marioneta dispuesta a servirle al cascarón de un hombre que hacía mucho había dejado de ser humano.

En segundo lugar se encontraba la hermosa y resplandeciente Liu Mingyan, mujer cuyo poder era superior al de las demás, guerrera excepcional y al parecer la más pasional de las cinco ya que había sido ella quien por voluntad propia había decidido casarse con el joven tras unirse a su lado para derrotar a Shen Qingqiu.

En simples palabras, una marioneta más; una guerrera con fuerza suficiente para derrotar a quien quisiera pero demasiado estúpida para haberse dejado influenciar por las palabras de una mujer que ni siquiera conocían y había dado un veredicto sobre el pasado de quien solía llamarse Shen Jiu para desatar con ello el rumor de que él había sido el asesino de Liu Qingge; aún si ella no supiera ni siquiera quien era este.

En tercer lugar se encontraba Qiu Huaitang, la mujer que había llorado en público acerca de su pasado con Shen Qingqiu, directamente acusó al maestro de haber sido el asesino de su familia y quien le había arrebatado la vida a su valioso hermano Qiu Jianluo.

Ante Gongyi Xiao aquella acusación sonó tan dramática y carente de real sentimiento pero lastimosamente fue precursora a que Luo Binghe tomara ese pretexto para encerrar a Shen Qingqiu en la prisión de agua, manchando con ello su reputación y siendo señalado como una escoria ente el público.

En cuarto lugar estaba la demonio Sha Hualing; no había palabras concretas para describir lo que esta joven era. Belleza inigualable manchada por su pensamiento idiota y sumisión entera para servir a un hombre cuyo propósito era simplemente aprovecharse de que la demonio era alguien demasiado importante en el mundo demoniaco.

Gongyi Xiao podía ver como la pobre demonio estaba enteramente a disposición de cumplir cualquier orden que dictaba Luo Binghe, era demasiado ciega que había preferido traicionar a su padre para estar con el demonio más fuerte del mundo a combatir junto a su especie para ser al menos una princesa poderosa que bien podía aliarse solamente con el gran demonio sin necesidad de abandonar ni perder su trono, pero bueno, él no era nadie para juzgar, no cuando las acciones ya habían sido concretadas.

Pequeño loto negro «BingJiu»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora