열 두번째

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Sin duda el cupido no podía abandonar su sorpresa ante el resultado del flechazo a Momo.

¡10 meses habían transcurrido ya!

Sana no entendía cómo ese tiro pudo resultar tan bien, y nuevamente no sabía cómo sentirse al respecto.

Al parecer su trabajo estaba concluido, lo que significaba que ella debía marcharse, pero eso aún no sucedía.

Y debía suceder, pero no estaba tan segura de querer que eso pasara.

Sentada en una nube junto a su amiga Jihyo, observaba a Momo trenzando el cabello de Dahyun.

'Unnie, ¿qué se supone que hago aquí si ellas dos ya están juntas? La flecha ya hizo su trabajo, debería haberme marchado ya'

Jihyo se encogió de hombros, pensando en las posibles explicaciones.

'Tal vez falta algo que hacer, falta el cierre. Qué alguien le final'

'¿A qué te refieres?'

'¿Ya te dio ella la pauta de que no te necesita más? ¿Se ha despedido?'

El cupido frunció el ceño tras pensar en aquello, su no latiente corazón se contrajo dolorosamente en su pecho y sintió escozor en sus ojos.

'Una despedida... no, eso no pasará'

La sentencia de Sana preocupó al ángel que le acompañaba.

'Sana...'

'Dahyun no es la clase de humano que se despide tan fácil de alguien que le agrada. Por eso lo digo'

'Y Minatozaki Sana jamás ha tenido que enfrentarse a una por qué...'

Jihyo fue fulminada por los resplandecientes ojos del cupido.

'No te atrevas a decirlo'

'Te molesta porqué es verdad. Y porque ya notaste que ésta vez no podrás hacerlo'

'Puede que ésta vez no quiera hacerlo... hay algo en Dahyun que me tiene atada a este estupido arco'

Mientras una lágrima involuntaria escapa de Sana, Dahyun detiene a Momo y se prepara para enfrentarla.

Holiii, gracias por venir a leer.

Disculpen la demora, he estado algo ocupada.

De cualquier forma espero que hayan disfrutado este cap.

Si tienen comentarios, teorías o peticiones me gustaría leerlas.

Gracias por sus votos, me animan mucho.

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𝐶𝑢𝑝𝑖𝑑... ℎ𝑖𝑡 𝑚𝑒! | 𝑆𝑎𝑖𝑑𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora