십사

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Para sorpresa de Sana, Jeongyeon resultó ser una persona completamente diferente, era terriblemente amorosa y sensible, por ello se dió la tarea de cuidarla y protegerla siempre.

Jeong estaba llena de inseguridades y temores, pero Sana se había encargado de cubrir todo eso con su cariño más sincero hasta que, irremediablemente, ambas cayeron enamoradas.

No había transcurrido mucho tiempo, pero fue suficiente para que un fuerte y adorable lazo se formara entre ellas. Habían compartido y confiado tanto la una en la otra como para conocerse a la perfección, y hasta pensar en su futuro.

Sana jamás había pensado en él de esa forma, solo había anhelado el final, el momento de su muerte. ¿Por qué habría querido pensar en el futuro si sus primeras seis vidas habían resultado tan fastidiosas.

Con Jeongyeon y su sonrisa, la séptima vida había cobrado sentido. Sana tenía un propósito y su maldición no lo echaría a perder.

No su maldición.

'¿Qué tienes ahí?'

Con curiosidad, Sana se acercó a su novia, arropándola con un suave abrazo desde su espalda.

'Mi orden de pago, si voy ahora al banco podré dejar el pago y volver temprano para ayudarte con la cena'

'Oh, suena bastante bien. ¿Quieres que te lleve? Puedo dejarte ahí, ir a hacer las compras mientras terminas y después volvemos juntas. ¿Qué opinas?'

Asintiendo animada, Jeongyeon dejó un beso en la frente de Sana qué esta le regresaría en los labios inmediatamente.

'¡Vamos entonces!'

20 minutos después Sana se despedía efusivamente de la rubia desde el auto y se marchó hasta que la vio entrar. Por alguna razón se sentía muy emocionada, su ánimo estaba por las nubes y lo reflejaba en todos lados, en los refrigeradores, los estantes de cereales, los mostradores de vino, junto a las verduras...

Sana relucía como nunca antes, y todo lo hacía con ella también.

'¡Chae! Qué bien que llamas, ¿crees que sea buena idea llevar vino rosado para la cena?'

La efusividad de la chica dejó en silencio a Chaeyoung.

'¿Sigues ahí, unnie?'

'Unnie, no te muevas de ahí, ¿de acuerdo?'

'¿Qué? ¿Por qué? Tengo el tiempo contado, iré por Jeong en cuanto termine las compras'

Chaeyoung suspiró profundamente, ahora preocupando a la mayor.

'¿Ya no vendrás a cenar?'

'No es eso, Sana...'

'Aguarda, otra llamada está entrando. ¡Es Jeongyeon! Espera'

Rápidamente cambió la llamada y saludó.

'Hey. Casi termino, ¿ya saliste de la fila?'

'Disculpe, señorita, habla el oficial Kang'

Esa simple llamada lo cambió todo y esfumó la luz de Sana. Cualquiera diría que al arribar Sana al hospital ahuyentaba la luz, la repelía. Chaeyoung le temió por primera vez.

'¿En dónde la tienen? Quiero verla en este momento'

Chaeyoung tuvo que retenerla y la hizo enfurecer.

'¡Suéltame!'

'Calma, Sana. No puedes entrar allí, están en quirófano justo ahora'

'¿Qué fue lo que sucedió?'

Para distraerla Chaeyoung le contó todo a Sana, cómo Jeongyeon le había mentido sobre el pago al banco para hacer otras cosas a sus espaldas, Chae no estaba segura de qué haría hasta que recibió la llamada de la rubia que acababa de salir de una joyería.

'Estaba empezando a explicarme cuando escuché un golpe muy fuerte, la llamada se cortó... No supe que hacer y por eso te llamé'

Un carraspeo llamó su atención, un médico se disponía a darles información de la joven y traía una bolsa de papel consigo.

'¿Ha salido ya? ¿Puedo verla?'

El doctor hizo una mueca y suspiró.

'Temo que la intervención fue bastante complicada para la señorita Yoo. Sufrió una contusión muy fuerte en el cerebro y el impacto dañó severamente sus pulmones. Lo lamento, pero la señorita Yoo no resistió'

'¿Qué?'

Chae ya había empezado a llorar, pero Sana aún se negaba a comprender las palabras del médico.

'La señorita Yoo ha fallecido, lo siento'

*

Weno, creo que ya está muy claro el porqué Sana no dice nada de su vida pasada, ¿verdad?

¿Se la esperaban así o pensaban en infidelidades?

Anygays, mañana les traigo la siguiente parte del triste pasado de Sanita.

Gracias por leer, Bais.

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𝐶𝑢𝑝𝑖𝑑... ℎ𝑖𝑡 𝑚𝑒! | 𝑆𝑎𝑖𝑑𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora