Un tigre en el armario

9. Nerves

Resumen: "¿Realmente era tuyo si me deseaba tanto?" [AtsuBeast].

Canción: Pacify her, Melanie Martinez.

~⭕️~

Mientras los ojos de Lucy caían en la silueta del muchacho albino que entraba a la casa, su lengua parecía chasquear un poco de la molestia al notar que esos ojos bicolores buscaban a una sola persona: su novio de chaqueta negra. Taconeó con un movimiento nada sutil de caderas hasta llegar con ambos. Atsushi sonreía, como siempre, y Akutagawa sentía el nervio por él, como siempre. Lucy sabía qué significaba ese extraño ambiente entre los tres, por supuesto, tonta no era, pero aceptarlo sería como aceptar que el azabache jamás la amó.

— Lucy, buenas, no esperaba encontrarte —dijo, entrecerrando los ojos con recelo. La pelirroja bufo molesta, haciéndose la digna.

— Tampoco, Nakajima. Akutagawa no me dijo que vendrías —informó, escuchando las risas del chico llegar. Atsushi sonreía, pegándose un poco más al brazo del mayor, apretándolo contra su pecho.

— Voy a saludar a Mark —opinó el tercero, que casi brinca en su sitio por ambos adolescentes peleándose como si fuera un trofeo. Era un poco bochornoso, algo estresante, no poder llegar solo a un lugar sin que esos dos se gruñeran como perro y gato.

Akutagawa se deslizó por un lado de Atsushi, rozando con su cadera levemente cuando Lucy se cruzó de brazos a su lado, imperturbable por la forma en la que Atsushi cambiaba su estado de ánimo por verla ahí, de vestido rojo pegado y tacones a la par, sin duda, era hermosa, y eso le venía mal. Se  tanteó el pantalón pegado que traía, y la camisa holgada que cubría su pecho.

— ¿Acaso lo espías por la ventana? —bromeó el albino, llevando sus manos a su cintura, estrecha y firme en ese corset blanco. Lucy le miró, sin huellas de relajación por cómo se le quedaba mirando a Akutagawa en esos pantalones negros.

— No tengo necesidad como tú —contestó a la par, irguiendo su pecho. Pronto, Mark llegó junto a Akutagawa con unos vasos desechables en la mano. El pelirrojo le ofreció uno a Lucy, de la misma manera que Akutagawa a Atsushi.

— Hey, Mark — saludaron al unísono, sin darle gran importancia. Hasta que el pelirrojo tomó las manos de la chica para alejarla del dúo.

— ¡Nos vemos en la cocina! —gritó a la lejanía, con una Lucy furiosa en sus brazos. Atsushi se volteó a Akutagawa.

— ¿Le pediste de favor que se la llevara?

— Le pedí de favor un minuto de paz.

Atsushi alzó una ceja. — ¿Quieres que me vaya? — Ryuunosuke negó, abrazándole de la cadera y recostando su cuerpo en la pared. El albino le pasó ambos brazos por el cuello. — ¿Ya le dijiste?

— No exactamente.

— Sí no le dices es evidente que va a seguir detrás de ti.

— Tampoco estoy seguro de eso. Lucy es demasiado perseverante con algunas cosas.

Atsushi le tomó de la barbilla para que le mirara, ese par de ojos con dos tonalidades le estaba viendo hasta las entrañas, como una fiera. — ¿Dices que eres suyo?

— Digo que no la va a calmar decirle. Probablemente se peleen más-.

Un suave beso en sus labios le mandó a callar, el menor en sus brazos se movía con maestría con la boca ajena, el beso escaló rápidamente hasta que ambos pidieron un descanso.

— Dile que se aleje de las cosas que no son suyas. ¿Realmente eras suyo si me deseabas tanto? —Akutagawa calló. La sonrisa de Atsushi lo dijo todo.

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No me van eso de pelear por un vato. Pero estaba pensando mucho en la canción la neta, no me la sacaba. Y no sabía que otra persona usar para eso.

FELIZ AÑO NUEVO!!!! Vamos a tener otro cap de Omegacember para finalizar el año!!