La lluvia caía sin cesar y ella solamente veía como aquel vidrio se empañaba, era muy fría la mañana y su mirada se encontraba perdida viendo como cada gota caía sobre el pavimento mojado aquella tristeza estaba invadiendo por demás su alma y a la vez estaba ansiosa por escuchar la voz de aquel hombre que había despertado tanto sentimientos dentro de su ser después de tantos años y de tanto tiempo de estar sola,sonrío para sí misma al pensar que era muy idiota por haber soñado que tenía alguna posibilidad de despertar el amor en él,en ese hombre que poco a poco fue robando su corazón y sin darse cuenta ahora simplemente tenía que reconocer que que estaba perdidamente enamorada ,de sus aquellos ojos azules intensos que la volvían loca de aquella mirada brillante tal cual mira un niño inquieto esa sonrisa tierna y pícara que le hacía estremecer cada parte de su cuerpo lo echaba tanto de menos y tal vez muy en el fondo de su ser se sentía profundamente mal por haberlo alentado tanto tanto a ir tras esa chica de su pasado, por haberlo motivado a hacer aquel viaje por haberle dado valor y por haberlo empujado a que corriera los brazos de aquella que tanto había amado de manera casi obsesiva pero era un riesgo que tenía que correr y es que solo el verdadero amor busca la felicidad del ser amado,si Terry era feliz ella intentaría ser feliz.
-Hola Kate -dijo el hombre
- Richard ¿Cómo estás ?-saludo ella un tanto distraída
-¿Sabes cuando regresa Terry?
Tengo tantas cosas que hablar con él
Ella se quedó en silencio por unos instantes trató de no perder la compostura sin embargo era muy evidente que dentro de su ser estaba sufriendo,quiso sonreír y sonar natural,quizá debía hacer un chiste sarcástico como era su costumbre pero no podía
- No lo sé-respondió con tristeza
-Créeme que en verdad lo lamento- dijo Richard al entender el sentir de la joven
-No,no te preocupes creo que en estos momentos está muy feliz de haberse encontrado con Candy he hablado con él esta tarde y no cabía en sí mismo
Estaban sumergidos en su plática que no se dieron cuenta de que un hombre observaba con la mirada fija y con detenimiento escuchó las palabras dichas por la joven¡Terry es está con ella! con Candy pensó él en su mente y su corazón dió un vuelco se quedó estático por un segundos sin saber cómo actuar sentía la boca seca sus manos sudaban Terry con Candy repitió una vez más en su mente ¿Como era eso posible,?no podía estar le pasando eso bajo la mirada y continúa su camino pero aquella inquietud no le podía dejar que respirara con tranquilidad tenía que regresar tenía que volver a Chicago cuanto antes porque a veces era tan complicado porque a veces era tan difícil ser William Albert Andrew.
-William- saludo Richard al reconocer al hombre rubio
- Hola Richard Buenas tardes señorita saludo posando su mirada y que que lo veía con asombro había oído alguna vez hablar de William Albert Andrew pero jamás imagino que era aquel enorme hombre de facciones tan fina y elegante caminar su presencia sola la dejó por unos instantes perpleja
-¡Qué sorpresa encontrarte en Nueva York!- le dijo Richard un tanto emocionado
-Los negocios me han traído hasta acá-respondió algo distante-Pero mañana mismo salgo a Chicago a primera hora
- William es un gusto volver a encontrarse contigo ¿Sabes? Terry se encuentra ausente en este momento,se que le hubiese gustado verte
-Es una pena Richard esperaba encontrarlo,supe lo de Susana por los diarios,me imagino debió ser un golpe terrible para él
-Así es William más creo que al fin ha decidido continuar con su vida
Esperaba poder encontrarme con Terry pero creo que será en otra ocasión dijo William Albert bajando un poco la mirada compromiso es momento de que me retiré Fue un gusto volver a encontrar los viejos amigos con gusto saludarte William Espero que tengas buen viaje si yo también lo espero dijo saliendo a toda prisa del lugar
Sin dudar un solo segundo arribo a su limosina para dirigirse a su mansión tenía que comunicarse con la tía elroy tenías que saber que él estaba sucediendo qué es lo que pasaba con Candy si realmente aquel encuentro con Terry se hubiera dado lugar en algún momento tenía que saber si Candy seguía amando lo tenía que saber si seguía siendo de El Dios porque era tan testarudo porque no había querido solucionar las cosas desde hace tanto tanto tiempo y si perdía Candy si perdía la mujer de su vida que sería de él si perdía la única mujer que podría amar por el resto de sus días Pero y si Candy no lo amaba sí Candy realmente seguía Amando a Terry que sería lo mejor
Cómo deseaban esos momentos poder tener alas para volar como deseaba en esos momentos poder estar al lado de ella a tan sólo unos segundos poder verla y calmar todas esas emociones y esas ansias que tenía dentro de su ser pero tenía que esperar respiró profundo mientras descendía del vehículo para entrar a la mansión se encontró con George la entrada pero sin embargo no no no lo pudo ni siquiera hablar caminó directamente a ser teléfono para comunicarse con la tía elroy necesitaba escuchar a Candy necesitaba saber que todo estaría bien, sin embargo no hubo respuesta a su llamada, suspiró rodando los ojos,ese seria el viaje más largo de su vida.
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"El famoso actor Terry Granchester en compañía de muy hermosa joven disfrutando de el atardecer" murmuró entre sonrisas burlescas
-No es gracioso-musito el joven
-Vamos James tu guerra estaba perdida antes de iniciar
-Al igual que la tuya querida prima ,porque ¿Qué te hace pensar que William correria a tus brazos?
-Al menos yo tuve a William pero tu mi querido primo -sonrió dejando el periódico sobre el sillón -Que pena que me das
-No es la gran cosa-sonrió-Hay nuevos caminos que explorar
-¿En serio?¿ No te referirás a la finísima señorita de la Vega?
-¿Y porque no? Es una mujer interesante
- Interesada ,esa palabra la define mejor
-Lo que sea...es hora de dejar de jugar con los Andley
La chica sonrió con malicia,sabía que De la Vega solo tenía un objetivo fijo en su mente y era recuperar a William Albert Andley a costa de lo que sea
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El tiempo corre tan lento para quien tiene prisa por llegar,eso lo estaba viviendo en carne viva ¿Porque no existía un camino más veloz? Todo su ser estaba temblando y sus manos sudaban,un hueco en el estómago le hacía insoportable el poder respirar y sus ánimos estaban insufribles eso último lo había tenido que soportar George quien no se atrevía si quiera a hacer un comentario ni el más mínimo movimiento por temor a ser aniquilado por una mirada llena de furia,sonrío para sí mismo
-¿Qué es tan gracioso? -pregunto el rubio al percatarse del gesto
-Nada -diji George fingiendo asombro
-Vamos George- musito con fastidio-Dímelo ahora
-Solo que en todos estos años jamás te había observado de esta manera
-Siento que podría perderla para siempre
-Creo que deberías tener más confianza en ti mismo
-Es que George,tu no sabes....Yo estuve ahí cuando partió a New York con el alma ilusionada, con miles de sueños, yo estaba ahí cuando la vi regresa muerta en vida,cuando lloro infinitas noches por Terry Grandchester ¿Y si ella aun lo ama?
- Eso mismo me pregunto yo William
¿ Que ocurriría si ella aun lo ama?
-No puedo ni imaginarlo-se encogió de hombros en su asiento
-A veces uno debe luchar por lo que ama
-Eso lo se,pero que pasa si a quien amas no te ama a ti,se que suena poético dejar ser feliz....soltar y agradecer por la felicidad del otro ...pero duele el solo pensarlo
-Créeme que te entiendo perfectamente, pero al final de cuentas cada quien esta donde pertenece en aquel lugar que es su hogar
-Al menos tengo que intentar, saber si realmente lo que siente por mi es amor de verdad
-Si el amor es fuerte no tiene razón de temer mi querido joven William
-Toda mi vida he sido un hombre integro y seguro de mi mismo,pero en esta ocasión solo soy aquel niño lleno de miedos,ese mismo niño que huyo tratando de evadir sus responsabilidades
-Sin embargo yo te veo más seguro que nunca de ir tras lo que amas,eres muy valiente cuando tienes miedo
-George, no me pongas sentimental ¿Quieres?
-Amo William ese es mi trabajo
Ambos sonrieron mientras el vehículo seguía su veloz marcha,Albert sonrió para sí mismo,sin duda tener a George siempre era como un respiro para su atormentada alma,agradeció en silencio el poder conversar con alguien que lo conocía tan bien
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Mordió su labio inferior, había decidido caminar un poco por el jardín sin importar el frío intenso que sentía,tenia que tomar decisiones muy importantes en su vida,ella que en todo momento era como un libro abierto últimamente se sentía como en una encrucijada de sentimientos,de indecisión y de miedos
Observo los tallos de la dulce Candy ya marchita por el invierno,cerro los ojos y puedo escuchar por un momento la voz de Anthony resonando en su mente,cuanto tiempo había pasado y cuántas calamidades tuvo que sobrellevar después de aquella lamentable pérdida, muchas veces se sintió culpable por tan terrible suceso pero fue cuando abrió su corazón a Albert que descubrió la propia pena que el rubio sentía,ambos padecían de un terrible cargo de conciencia,fue entonces que se propuso en su corazón tratar de hacer siempre sonreír a Albert,su adorado y maravilloso chico de la colina,su vagabundo ángel guardián,sonrío de solo imaginar su dulce sonrisa.
Sin embargo era difícil recordar sin que Terry estuviera presente en sus memorias,su rebelde chico del San Pablo,de alguna manera le había ayudado a soportar su dolor,a seguir adelante, a saber que la vida continua y que siempre existirá la esperanza del mañana.
Verlo convertido en un hombre integro, decidido y capaz le daba una tranquilidad absoluta a su corazón,ella siempre deseeo que Terry fuera el hombre que es,nunca perdió la fe en que por mucho que se alejara del camino de una u otra manera encontraría la forma de regresar.
Desde aquella separación en New York había soñado con el momento de volverlo a ver y ahora estaba ahí.Aquellos días con el joven Grandchester habían sido refrescantes,era como volver a vivir un poco el pasado ese pasado en el colegio,pero Terry había cambiado sin duda alguna y ella también.
Estaba absorta en sus pensamientos que no vio aquel lujoso auto entrar por la puerta principal de la majestuosa mansión Andley,cerró los ojos tratando de evocar el dulce aroma de las dulce Candy,como deseaba la llegada de la primavera.
-Candy
Su corazón dio un vuelco,ese extraño vacío en el estomago causado por aquella dulce voz,abrió los ojos con miedo como si tuviera temor de estar en un sueño,como queriendo no despertar de el.Sus esmeradas se abrieron con asombro para observar aquella sonrisa que seguía acelerando los latidos de su corazón
-¡Albert!-Grito arrojándose a sus brazos
-Mía...mi Candy-Susurro en su oído mientras besaba sus cabellos
-¡Te extrañe tanto! -le dijo mientras se apretaba a su cuerpo
-Ya estoy aquí mi pequeña llorona-musito secando las lágrimas que caían sobre las mejillas de la rubia
Para William Albert Andley no había dudas en ese momento,aquella chica era solo suya,lo sabía tan solo con estrecharla en sus brazos,no había más temores....
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Había decidido acudir muy temprano a despedirse de su pecosa amiga,aquellos días habían sido muy reveladores para ambos,fue sanador para los dos se repetía repetía su mente.Fue entonces que presenció esa escena tan emotiva....Terry Granchester una vez más entendió que ese no era su sitio...Así que sin decir más....recogió sus pasos y regreso a su hotel...lo que haría ahora requería de mucho valor pero no se quedarían las cosas así....
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Déjate Amar
FanficCandy descubre sus sentimientos hacia Albert pero será correspondida?
