Cerró la cremallera de su maleta,suspiró pensando en los últimos días y su mirada se iluminaba recordado cada atardecer con ella,las decisiones no deben tomarse a la ligera,eso lo sabía perfectamente bien,desde pequeño tuvo que cumplir con un papel para el que fue destinado en contra de su voluntad,tomó en sus manos una vez más el telegrama desgastado,había decidido hacer una parada intermedia antes de acudir al encuentro de su destino,las palabras de Candy se repetían en su cabeza una y otra vez,no se iba con las manos vacías,con ella no había manera de sentir que había perdido de ninguna manera, había tanto amor desbordante en cada una de sus acciones que llenaba el alma de todos los seres a su alrededor y él lo sabía muy bien....El amor es el único sentimiento que puede ser cambiante, dominante y exigente más sin embargo la magia que ocurre al tenerlo dentro es lo que hace girar al mundo al menos el mundo al que el pertenecía.
"Hay que agradecerle hasta el infortunio que nos hizo alejarnos" le dijo la rubia en una de sus conversaciones, fue en uno de sus tantos discursos que lo comprendió todo y podría ser que ella tenía razón, no existe lógica en lo sucedido,solo era el destino de aquello que está predestinado a pasar sufrir tanto por lo que no se tiene,aferrarse a lo que no tiene solo causa frustración que envenena tu propia alma.El amor también consiste en dejar que las personas que amas elijan su camino,desearles de todo corazón que sean felices,pese a saber todo eso no podía dejar de sentir esa sensación de soledad,no había sido favorecido con el amor de la mujer que tanto había amado por muchos años en silencio y sin poder entender las circunstancias,la sintió suya muchas veces pero tenía que reconocer que su instinto le falló, así que era momento de partir y esa noche lo haría sin mirar atrás....
Se sentó a la orilla de la cama,su mirada azul intensa quedó fija en el espejo que estaba frente a él,ya no era un jovencito,ya no podía seguir huyendo de sus responsabilidades que para bien o para mal tenia sobre sus hombros,nada sería fácil pero ¿Cuando lo había sido?
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"Mi querida Candy" Empezó a redactar mientras observaba con ilusión la habitación,su corazón saltaba dentro de su pecho con tanta felicidad,la culpabilidad por seguir viviendo se había esfumado y ahora miraba al futuro con certeza,de lo que quería y anhelaba para ella,se miró en el espejo y casi no podía reconocerse,la tímida e inocente niña estaba quedando atrás para darle paso a una mujer segura que tomaba las riendas de su vida de forma valiente y ella siempre había sido muy valiente, lo fue cuando enfrento la muerte del hombre que amaba,lo fue cuando decidió enfrentar la vida aún aún medio de aquel inmenso dolor,lo fue cuando encaro a sus padres renunciado a su fortuna para vivir humildemente en el hogar de Pony pero sin duda alguna lo era ahora que le estaba dando paso nuevamente al amor.
Tenía tantas cosas que decirle y agradecerle a su amiga que no sabia ni siquiera que empezar a escribir pero de algo estaba muy segura, no podía omitir ningún detalle porque, Candy no se lo perdonaría de ninguna manera,con aquella curiosidad que la caracterizaba podría imaginarla incluso leyendo la carta haciendo muecas como era su costumbre.
Tomo el sobre de cera blanca con las manos temblorosas y lo puso dentro del paquete con mucha ilusión....después empezó a redactar la carta para su mejor amiga,solo esperaba que llegara a su destino justo a tiempo porque si de algo estaba segura era de que ese día tan especial debía estar presente ella
-Patty- escucho la voz de la señorita Lane llamandola-Tu prometido esta aquí
Sonrió y se puso de pie dejando pendiente la carta para Candy aún había tiempo,aunque ella hubiese querido que volará, después de la muerte de Stear nunca pensó que su corazón volvería a latir con tanta fuerza por alguien más,ahora no sentía más culpa por vivir,sabía que seguramente a Stear le hubiese gustado verla feliz.
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Daba vueltas en la habitación como león enjaulado,estaba demasiado sobresaltada y llena de furia,las evasivas de William Albert Andley la estaban volviendo loca,no era posible que siguiera haciéndose el difícil no con ella que muchas veces lo tuvo dominado y sometido a sus más mínimos caprichos, le había dado un ultimátum o la recibía o se atendía a las consecuencias, no permitirá que la humillara de aquella manera.
Después de unos instantes por fin la secretaria del poderoso magnate la llamo permitiéndole la entrada a la oficina del rubio,sonrío de manera triunfal,esa vez no aceptaría una negativa tan fácil.
Entro con la mirada activa y la cínica sonrisa que tanto la caracterizaba,sintió un sabor ácido al ver como como rubio ni si quiera se había puesto de pie al verla entrar ni despego los ojos de los papeles que estaban sobre su escritorio
-¿Qué se te ofrece Silvia?-exclamó de forma fría y cortante
-Deja ya ese jueguito tonto ¿Quieres?
-No se de que juego me estas hablando-repuso poniéndose de pie
-William- se acercó a él intentando abrazarlo- Se que aún sientes algo por mi,no intentes ocultarlo
-Te doy la razón-Sonrió apartandola suavemente
-Vamos cariño deja ya el berrinche-Sonrió seductora
-Claro que siento algo por ti y en estos momentos te lo dejare muy en claro para ver si así dejas de ser tan insistente mi querida Silvia...Lo único que siento por ti,es repulsión
-No digas cosas absurdas,ambos sabemos que solo juegas al noviecito con tu protegida,ella jamás será como yo
-¡Gracias al cielo! Hasta que dices algo coherente y te daré toda la razón en algo que has dicho...Ella nunca será como tú
-Es una pena que siga tan prendada de ese actor ¿Cómo es que se llama?
-¡Silvia por Dios!Los sentimientos de Candy no cambian la realidad entre tu y yo
-Aww te darás por vencido-se burló
-El amor es algo más que poseer a alguien y eso deberías saberlo pero claro que no lo entiendes
-Deja de fingir William que vas a perderme
-¿Fingir?-Sonrió-Amo a Candy como nunca en mi vida he amado a ninguna otra mujer,ella nunca se parecerá en lo más mínimo a un ser tan despreciable como tú,ella es buena,considerada y muchas cosas más que no entenderías,si te recibí es para dejar en claro las cosas de una buena vez...Ah y te lo advierto -Dijo tomándola por las muñecas y mirándola con furia- Si te atreves a buscarla o hacerle daño,me encargaré de que pagues por ello porque entiendelo bien, nunca estaré contigo jamás,aunque Candy se fuera con otro y fueras la última mujer sobre la faz de la tierra
-Debes estar bromeando-gruño safandose del amarre
-Siempre dijiste que yo era poca cosa,que era un tipo sin educación,no hagas que realmente lo sea Silvia... Sólo déjame en paz y desaparece
-William,no puedes....
- ¿Crees que no?
Volteo a verla y noto las gruesas lágrimas caer por el rostro de la mujer,nunca antes la había visto tan descompuesta, sintió un poco de pena pero era necesario ser así de duro con ella,la conocía muy bien y sabía el nivel de manipulación que podría manejar, más esta vez si la había sentido derrotada.Salio hecha una furia y él se desplomó sobre su silla,solo esperaba que esta vez si se fuera para siempre,tomó un vaso y se sirvió un poco de whisky,suspiró pensando en Candy...Solo deseaba que ella fuera feliz
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Lo miro detenidamente pese a toda situación lo veo en calma y en paz,su mirada tenia un enigma que ella jamás había podido decifrar,él no era como los demás y ahora entendía porque una chica como Susana había decidido dar hasta su vida por él.
Terry era un hombre atractivo y de un carácter imponente pero sobre todo tenía un corazón noble que intentaba cubrir con su rebeldía,esa que pocas personas entendían.
-¿Te diste por vencido? -Cuestiono
-Te agradezco me llevaras a Candy,estos días han sido reveladores
-Pero te vas a New York
-Allá es donde esta mi vida-Respondió sonriendo- Nada queda hacer aquí
-Pense que venias a recuperar a Candy- Insistió
-Aquella noche que me llevaste a ella fue tan maravilloso,debo agradecerte que lo hicieras
-Solo quería ayudar-Respondió con una sonrisa- Debes luchar por su amor
-Uno no debe luchar por lo que no le pertenece...
-Quizá tengas razón-repuso la chica - Mañana viajo a Londres...
-La vida es corta y si algo puedo aconsejarte es que no desperdicies tu tiempo con una persona que nunca podrá amarte
-Te refieres a William?
Sonrió sin decir palabras solo abrió la puerta de su habitación y le señaló la salida a la chica para después tomar el teléfono y hacer una breve llamada.
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Estaba sentado frente a su escritorio con la mirada perdida, quisiera o no Silvia era una amenaza cada que estaba cerca era como si la plaga estuviera propagándose por cada sitio que pisaba.Quiza para el mundo era William Albert Andley el hombre de carácter fuerte e imponente para los negocios pero por dentro seguía siendo un poco ese niño asustado que huía de todas las situaciones que le causaban inseguridades más esta vez no quería huir,tenía que enfrentar todo aquello que se le presentará Candy lo merecía,ella en todo momento desafío a la sociedad y a la vida misma por él, incluso aún cuando sus sentimientos no eran tan profundos y compartían el Magnolia, ella siempre supo lo que quería y antepuso a su corazón ante todo lo que tenía que enfrentar,así que valía la pena enfrentar el pasado y desafiar todos sus miedos por ella,la puerta se abrió de imprevisto haciéndole saltar lo cual provoco la risa de la mujer que acababa de entrar, al observarla rodó los ojos fingiendo molestia y en seguida sonrió
-¿En verdad te sorprendí?-sonrió
-Candy- gruño- Mi corazón podría no resistirlo
-Oh- abrió los ojos preocupada recordando las recomendaciones del dr Martin-Lo lamento lo olvidé
-Solo bromeó querida- Se puso de pie para recibirla-¿Qué haces aquí?
-He venido a hablar sobre algo contigo y de manera urgente
-¿Sucede algo?¿Te encuentras bien?
-Se trata de Terry-dijo algo nerviosa
El corazón de Albert se encontraba latiendo con fuerza al escuchar el nombre del caballero que tantas inseguridades le causaba sin embargo tenía que escuchar lo que Candy tenía que decirle,debía ser algo importante para que ella se presentará de aquella manera.
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A veces la vida nos presenta giros inesperados,el más que nadie tenía eso muy en claro,la vida no le resultaba del todo fácil pero no importaba porque al final de todo eso esos giros lo habían llevado a descubrir personas maravillosas,se había separado de la mujer que más amaba ya hace algunos años y sabía perfectamente que su corazón no le pertenecía más,había tantas cosas que le hubiese gustado decirle pero un buen caballero inglés siempre sabe como comportarse y en ese momento lo correcto era dejarle ser feliz.Uno pequeño golpeteo en la puerta lo hizo acudir al llamado y cuando la abrió se quedó perplejo por unos segundos,era nada más y nada menos que el rostro sonriente de Candy
-Hola Terry-Saludo con naturalidad -¿ Podrías dejar de verme como si fuera un fantasma?
-Perdón señorita pecas pero estaba por salir a la estación
-No puedo creer que pensabas irte sin despedirse
-Candy no lo vi necesario
-Eres un gran hombre Terry,lo más valioso de ti es lo que hay dentro de tu corazón y haces que cada día me sienta muy orgullosa del chico rebelde del San Pablo
-Candy......
-Amo a Albert -dijo con los ojos llenos de lágrimas, pase muchos años preguntando a la vida sobre aquella injusta separación...
-Lo se Candy-dijo acercándose a ella- No debes sentirte culpable por amarlo,me prometiste ser feliz
-Oh Terry siento tanta pena por ti
-No debes no....Solo quiero que seas feliz
-Lo soy...soy muy feliz Terry
-Lo mereces mona pecosa -dijo sonriendo
-Tu también mereces ser feliz
-Lo soy -respondió con sinceridad-Alguien me espera en New York y se exactamente lo que tengo que hacer
-Gracias Terry,para mi fue maravilloso volver a verte
-Gracias a ti Candy no sabes cuanto me ha servido este viaje y esas lindas tardes a tu lado
-A mi también me fue grato volver a verte
-Debo irme-dijo tomando su maleta- se feliz Candy...
Solo pudo asentir mientras las lágrimas caían por sus mejillas,lo vio tomar su maleta y bajar las escaleras a toda prisa lo vio alejarse en la obscuridad murmurando muy levemente un "Tu también se feliz Terry ..mereces ser muy feliz "hasta que su silueta se perdió en la obscuridad de aquella noche fría de invierno.....
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Déjate Amar
Fiksi PenggemarCandy descubre sus sentimientos hacia Albert pero será correspondida?
