Déjate Amar

Capitulo 20.-Confesiones

Albert pensaba tenía que encontrar las palabras precisas, aquéllas que no fueran tan vulgares y sin atreverse a hablar aun tomo de la mano a Candy guiándola hasta una banca cercana, tenían que estar cómodos para tener aquella conversación, por un segundo al ver la enorme sonrisa de su novia y aquellas esmeraldas que lo veían con emoción se pregunto si ese sería el momento adecuado, pero sabía que lo era pues nuevamente se ausentaría por una semana; semana en la que Candy estaría nuevamente en Chicago rodeada de tantas personas que estaban en contra de su felicidad ¿Por qué tenía que ser tan complicada su vida? Antes cuando era solo Albert el chico que trabajaba en el restaurante todo era más sencillo, no era fácil ser quien era pero desgraciadamente ese era su destino.

Candy esperaba impaciente a que emitiera alguna palabra, en cuanto vio su rostro consternado se dio cuenta que la conversación no seria agradable, su terrible manía de pasarse una mano por sus cabellos cada que algo le preocupaba lo delato de inmediato y aquello la estaba poniendo nerviosa, si había algo que lograba sacarla de quicio era precisamente el no saber los pensamientos de ese hombre que a pesar del tiempo y la cercanía seguía siendo un verdadero enigma para ella ¿Por qué le estaba costando tanto iniciar una conversación? Antes las cosas eran tan sencillas, ojala volvieran aquellos días en los que era tan fácil hablar sin parar recostada en su pecho.

-Candy ¿Sabes lo mucho que te amo?-dijo con voz ronca

-Sí y sabes que también te amo muchísimo-respondió sonriendo

-Debemos hablar de Silvia-soltó un suspiro de resignación

-¿Qué hay con ella?-pregunto soltando su mano

-Como sabes o imaginas-dijo poniéndose de pie-entre nosotros hubo algo en el pasado

-Pero ya es pasado ¿Cierto?-dijo ella buscando su mirada

-Para mi si preciosa, pero al parecer a Silvia no le ha quedado claro y temo que quiera separarnos

-Quiero saberlo todo Albert-dijo decidida

-No tiene caso-movió la cabeza negativamente-Solo te pido que confíes en mi

-Quiero saberlo todo por favor-insistió tomando su mano-Así sabré como defenderme de ella-Albert volvió a negar-Confió en ti y nada de lo que me digas hará que eso cambie, es solo el pasado

-Por favor Candy, no puedo hacerlo-soltó un suspiro

-Tú sabes todo de mi-dijo buscando su mirada-Quiero saberlo todo de ti

-De acuerdo-dijo con resignación-¿Qué es lo que quieres saber?

-¿Cuándo fue que la conociste?¿Porque se separaron?¿Que sentiste por ella?...Quiero saberlo todo Albert

-La conocí en Londres ¿Recuerdas tu invitación al festival de mayo?-Candy asintió-Estaba demasiado entusiasmado con la idea, así que visite un mercado de Londres, me había vuelto asiduo a esos lugares, quería darte un obsequio por tu cumpleaños y sabia que ahí podía encontrar algo que fuera único. Observé los objetos sobre las mesas y de pronto algo capturo mi atención, era unos pendientes con hermosas piedras color esmeralda y pensé en tus ojos,así que me dispuse a tomarlos pero una pequeña mano se antepuso a la mía, levante la mirada y me encontré con unos ojos verdes que me veían sin recato, esa fue la primera vez que vi a Silvia, sonrió y descaradamente me dejo sin tu obsequio, así que decepcionado me marche. Había caminado algunos metros cuando un lujoso auto se detuvo a mi lado, era ella...No sé cómo fue que empezamos a frecuentarnos hasta que un día que conversábamos en el zoológico me beso tomándome por sorpresa, así era ella no tenia cautela ni pudor...No deseo continuar Candy